Viernes, 22.07.16- Monasterio de Kathara, Stavros, Afales Bay, Escuela Homérica, Exoghi, Playa de Gialos
Pensábamos que la parte sur de Itaka era la pera, pero hoy toca la parte norte. Una vez cruzado el itsmo, subimos por el lado este hasta el Monasterio de Kathara. El mapa marca una altura de 800 ms cerca del monasterio, así que se puede imaginar cuánto se sube en unos minutos en una isla tan pequeña. Las vistas son impresionantes: mira, ahí está Vathy! MIra la cala donde nos bañamos! Parece un mapa vía satélite. Nos encanta.
Seguimos por el monte hasta Stavros, ya bastante al norte. Hace calor y nos tomamos un frappé en el café de la plaza, donde también hay nidos de golondrinas a todo trapo. La panadería está cerrada y nos indican que tal vez en una tienda tengan empanadas. Así es, y también compramos el dulce local, Rovani, que es, como todo lo griego, dulce a matar. Ni al Peda, nuevo fan de la baklava le gusta, o eso dice- cuando queremos comer un poco más nos comenta que se lo ha acabado porque total.
Vamos a la famosa Bahía de Afales. Famosa porque leí lo que escribió un director de cine sobre ella... algo así como que nunca verás un mar tan turquesa. Hay muy poca gente, la playa es un tanto salvaje y logro bañarme en bolas en una esquina. Ahhh, the life.
Tras comer las empanadas estamos decidios a visitar la escuela de Homero: bad choice (good story). Tras estudiar el mapa de la derecha (pegado a una madera, como toda indicación), nos metemos por un camino con vegetación muy tupida con flechas amarillas que indican seguir, incluso cuanod no hay encrucijada. Y nosotros seguimos. Y seguimos. Lo que iban a ser 10' de travesía por el campo se convierte en más de 40' de subida continua por el monte, sin agua (sí, gran prepraración, lo sé). MIni empieza llorando y acaba la primera diciendo que "Mini never gives up". En la única encrucijada se olvidan de poner flecha amarilla y seguimos para adelante. Error.
Aunque el viento amortigua el calor y vamos bajo árboles, llegamos a un punto de duda interior: no deberíamos volvernos? Pero entonces nos damos cuenta que hemos subido un montón y que igual es mejor seguir subiendo al siguiente pueblo (ya convencidos de que la escuela homérica le van a dar por ahí) para tirarnos a los pies del primer tavernero que regente aunque sea la taverna más asquerosa de toda Itaka.
Por fin, estamos en Exoghi, aquel pueblo que se veía ahí en al lontananza cuando comenzamos a caminar. Es un pueblo fantasma: allí no se ve a nadie, aunque las vistas son, otra vez, impresionantes. En un punto, vemos a una mujer en la terraza de su casa. Le preguntamos por taverna y nos indica que no hay. Le hacemos los gestos de beber y señalamos a Mini y nos hace pasar a su terraza.
Vive en una casa colgada de la montaña, y toda su fachada, al menos por dos lados, está recorrida por la terraza. Nos saca una botella grande y nos sentamos. Qué vistas: la bahía de Afales a la derecha, el monte, y la bahía donde esta Frikes a la derecha. 180 grados de mar. Sale su marido, que habla un poco de inglés. Por supuesto, alegría de que seamos españoles y el hombre nos cuenta que conoce bien España, sus puertos, de cuando era marinero. Dice que la casa era de su padre. Qué suerte de casa! Nos despedimos y empezamos a bajar, la vida se ve distinta tras haber bebido.
De vuelta al coche nos vamos a Frikes, a donde llegamos el miércoles con el ferry. Llegamos hasta Kioni, otro pueblo pintoresco más hacia el sur de la costa este. Definitivamente, a esto hay que dedicarle más días. Antes de Frikes, buscamos una cala (puede ser Korvoulia?) y nos damos otro baño, aguas transparentes, poca gente, snorkelling.
En Frikes, frappé y batido en un café a la orilla del mar, donde conocemos a un nuevo tipo humano: los que se pasan las vacaciones aprendiendo a navegar. Se concentran allá y comentan cómo ha sido la navegación esa tarde: "oh, tuvimos muy buen viento". Son todos ingleses, y el puerto esta lleno de los mismos veleros con la inscripcion "Sailing Holidays". Como hay basntantes niños, están hacienod en el bar de al lado un concurso con canciones muy divertido-o eso nos parece a Mini y a mí. Me planteo si me gustaría una "sailing holiday" como la de Menorca con Fransesc, pero me pasa algo: me gusta más el mar desde la tierra que la tierra desde el mar. Es curioso pero es una perspectiva totalmente diferente.
Se hace tarde y comenzamos a bajar por la cara oeste, la que se enfrente con Kefalonia hacia el itsmo y luego a Vathy. Bajamos a una playa que habíamos visto por la mañana desde arriba arriba, Giladis, maravillosa. Puesta de sol y Mini y yo leemos al unísono Itaka de Kavafis, en una especie de ceremonia pagana.
Mini parece meterse en el espíritu del hermoso viaje y, poco a poco se va metiendo más al agua y se acaba bañando en bolas. Su padre ha de ir al coche a por una toalla. Hace vientecillo, pero la guiri nunca tiene frío. Y ya ha comprendido lo que son las Itakas.
En Vathy volvemos a comer un gyro y helado. De vuelta a casa vemos un karaoke en la calle. Hay un grupo de gente sentada y Mini se sienta en unas escaleras, y un hombre le toca la cabeza como si fuera un perrito. Mini se muere de risa.
Nuestra última noche en esta isla: sabe a poco. Mañana toca Kefalonia. No nos extraña que Ulises siempre quisiera volver: Itaca nos ha encantado.
*Nota: taberna en griego es taverna, y así lo escribiré en el resto de la serie.
*Nota: taberna en griego es taverna, y así lo escribiré en el resto de la serie.
taBerna
ResponderEliminarTaBernero.....
con B de beber, de bebercio, de barco, de baladronada, de buque, de bruja.
de Besos
*Nota: taberna en griego es taverna, y así lo escribiré en el resto de la serie. (en primer divague)
Eliminarjajajaja...ni que fueras DFW :)
ResponderEliminarMe has dado una idea... volver a los divagues haiku con larguísimas notas a pie de página :):):)
ResponderEliminarTe vas ya, odiosa bruja!!!
Quiero màs posts griegos. Un beso
ResponderEliminarPasaba por aquí y me quedé prendido (más bien preso!) entre el Homero y el Kavafis... siempre las Itakas!
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