El divague “Atroz” de hace unos días instigó otros subdivagues. ¿Aceptaríamos la escarificación si no fuera por el dolor que causa? Se habló de diversos países del mundo donde el trato que reciben los niños más bien parece sacado de una película de terror. Se comentó cómo la mujer es objeto la mayor parte de las veces de estas prácticas y cómo lo ha sido a lo largo de la historia (corsés, vendas, dietas). En el caso de la escarificación , no es específicamente femenina, sino infantil la vulnerabilidad que se aprovecha.
Lo que pienso sobre la dictadura a la que las mujeres estamos sometidas con la delgadez lo escribí en “Ellos las prefieren gordas: Mojándome”. Hoy, unido a la escarificación, quiero hablar de otras escarificaciones a las que se someten miles de mujeres en el así llamado “Civilizado Occidente”.
Es de dominio público el número de mujeres pasan por el quirófano para gustar más a los hombres. "Ah, no" -corregirán los directores de marketing de las clínicas que las operan - "es gustarse a sí mismas". Ya. Ellos, mejor que nadie, conocen el perfil psicológico de estas mujeres (el que te intenta vender siempre es tu psicólogo más atento) . Por hacer un resumen brochazo invocaré a las protas de "Sex & The City" (Sexo en Nueva York): queremos cazar hombre, a ser posible marido, y a ser posible que nos mantenga, para poder pasar aún más tiempo comprando bolsos y zapatos.
En Asia se operan para ponerse los ojos más redondos, en US para quitarse michelines, en Colombia para ponerse tetas… y no sigo. Curiosamente en el año 2000, el 89% de estas operaciones se hicieron en mujeres pero el 85% de los cirujanos que las hacían… voilá: eran hombres. Los actuales estándares de belleza alimentan al negocio (liderado por hombres) de la moda, belleza, dietas, cirugía, entretenimiento y pornografía, y la homogenización de la apariencia (que es lo que se está consiguiendo con todos estos procedimientos) es ya parte de la globalizada cultura del consumo.
Todo esto, así, en abstracto, es como lo vemos todos los días. Pero hay que coger las historias una a una: entrañabales. ¿Qué me dicen de lo que me contó el otro día mi amigo R? Conoció en un país de América Latina a dos hermanas que se habían ido allá a hacérselo “todo”. Una, aún hecha un cuadro, se entiende, cuidaba a la otra en su postoperatorio, y luego la primera operada hacía de enfermerita a su hermana. Igual con los arreglos hasta se conseguía hacer a un médico cuando pasaba planta: viaje redondo. Supongo que echarían a suertes quien cuidaba la segunda.
Y la siguiente: Di, en la prehistoria del diblog, da con la siguiente noticia el 26 de Mayo del 2007 en el British Medical Journal (y sabiamente guarda en sus carpetas amarillas). El artículo se titula “Peticiones de genitoplastia cosmética. ¿Cómo deben responder los servicios sanitarios?” Como en Atroz, os ahorraré esta vez no las fotos, sino la narrativa de lo que piden las mujeres, las imágenes que llevan (guiadas, por supuesto, por el mundo de la pornografía), y lo que se les hace. En este artículo se hacía énfasis en que la gente debe conocer que “la apariencia de los genitales femeninos cambia con la edad, que la operación conlleva muchos riesgos y no suele ir acompañada de beneficios psicológicos” (o sea, tu infelicidad es mucho más profunda que lo que sientes al abrirte de piernas ante un tío al que le importas seguro un pepino).
La escarificación, con anestesia eso sí, también ocurre en el mundo que se cree civilizado. Hay un grupo de mujeres que están dispuestas a casi todo por.... ¿por qué?
Si no las escribo, las cosas no han llegado a término, solo las he vivido (A Ernaux) La vida real no está a la altura de escribir sobre ella (J Eugenides) Lo que me interesan son los errores, fruto de la pasión, los errores que se cometen arriesgando (G Steiner) En la calle, codo a codo, somos mucho más que dos (M Benedetti) Escribir es persuadir a un extraño de que se quede (R Cusk) El camino del exceso conduce a la sabiduría (W Blake)
Siempre me ha llamado la atención observar, ya desde muy pequeños, la necesidad que tenemos de igualarnos a los demás, de no cantar - cuando la verdadera educución es "cantar" ( llamar la atención,desarrollar lo que te hace distinto). A eso le llaman "socializarse".
ResponderEliminarY compruebas que necesitamos imitar patrones muy universales: la moda, los "acosados" de las urbanizaciones, los centros comerciales absurdos, sin luz y cerrados sobre ellos mismos, (tipo Eroski), aceitera aceitera, que a la gente le dan seguridad. ¡Como van muchos!
Ahora hay muchísimas mujeres que aceptan encantadas meterse en el quirófano, y que hace unos años les horrorizaría,no tanto por ser más guapas, o gustar ,sino porque lo haven todas las de su entorno.
En mi urbanización (confieso es de "acosados" todos iguales tipo tableta de Toblerone, se compró un tío una motarro, el verano siguiente ya eran cuatro tíos con motarro, el siguiente ya eran seis...¡y la usan, como mucho, siete veces al año!(pero que da muy bien colocarte un pañuelo pirata, unas gafas de sol y darte una vuelta por los alrededores countrys
Nunca entenderé a tías capaz de pasar por esa tortura (los post-operatorios son de traca y larguisimos) sólo para nosemuybienquien.
ResponderEliminarSi es para otro, que poco te quiere ese otro, que necesita 300 gr. más para quererte.
Y si es para ella...que poco se quiere.
Y los cirujanos que majos ellos, siempre si a todo, el paciente manda...
Pues mira tú que a mí no me vendría mal una liposucción... Éso sí, ¡¡que me la haga una médica!! ¡Y en Colombia!
ResponderEliminarBuf, Basaja, por un momento pensé que iba a decir una genitoplastia... Ibas a desmitificar para siempre al hombre de los bosques.
ResponderEliminarQuerida Di,
ResponderEliminarSoy de la opinión de que por quirófano las menos veces, mejor. Generalmente no se habla de la gente a la que le ha ido mal la operación. Yo conozco gente que se operó y ahora son feísimas cuando antes no lo eran. Una en concreto parece que tiene dos salchichas de frankfurt por labios. Es muy desagradable. Una vez compartí sala de espera con un cirujano plástico y había señoras dignas de esconder. Estaban feísimas. Retocadas por igual y sin expresión.
Además tengo entendido que crea adicción y claro nunca te ves del todo bien. Nadie es perfecto. A operarse de nuevo. Que mejor negocio que el de las cremas y arreglos varios. Siempre juega el tiempo en favor de su bolsillo y encima es imparable. Yo quiero estar en ese sector.
Por no hablar de las revistas tipo telva, vogue, cosmopolitan que alientan a esas chicas para que se "sientan más seguras" y "consigan un cuerpo perfecto". Basta con teclear "ana y mía" en blogger y veréis cuánta gente hay con blog contando como van a perder kilos o como engañar a tus padres para que piensen que comes o como vomitar... Es escalofriante. Por lo general adolescentes buscando un lugar en el mundo.
¿Y la publicidad? ¿por qué siempre nos sentimos hinchadas las mujeres en cuestión de yogures? ¿o de cereales ligth? ¿o de mermerladas? Boicot.
Suso, me contaron de una conocida de una conocida que le hizo pagar una teta al novio ("pq él las iba disfrutar") y que en su grupo "era la única sin habérselo hecho". Hablamos de gente de treintaitantos. Para que vayamos viendo el nivel, Maribel.
ResponderEliminarViveiró: lo que dices es lo que siempre me ha llamado la atención. A mi me dice mi chico que me opere y el carpetazo se oye en Sudáfrica. Pero claro, a las chicas como a mí no nos diría nunca eso nuestro chico. Precisamente pq nunca estaríamos con ese tipo de cretino.
ResponderEliminarBasajaun, con el tipazo en mallas de los duendecllos del bosque, no me tendrás anorexia? (te ves gordo sin estarlo)
ResponderEliminarDiva, esto de acuerdo con todo lo que dices, aunque yo no es que esté en contra total de estos procedimientos. Si uno tiene una nariz como la Giralda y spr ha sido infeliz por el tema, etc etc, pues no seré yo quien le diga que no, q mire la Streisand lo feliz q es.
ResponderEliminarPero es que hay cosas, como lo de la genitoplastia, que me parecen tan pasadas de rosca que en mi divague por lo menos quería dejar claro que me parece hipócrita que nuestra sociedad mire por encima del hombro a la escarificación y no se de cuenta que esto es lo mismo (pero con asepsia y anestesia, como decíamos)
besis
di
divagues..
ResponderEliminarPor qué es el cuerpo de la mujer el que necesita ayudas?
Quién determina lo que está bien o no?
Por qué es tan fácil cambiar lo que uno es por lo que otros quieren? Por qué se interioriza y se dice esto es lo que yo quiero?
"Te crees en libertad porque el viento que te lleva no sabes adónde va"
Quizás tengan la culpa todos los años de la infancia en la que uno depende del grupo...
Quizás es un miedo a la libertad, a la libertad que tiene cada uno, es más fácil elegir entre una selección que decidir qué es lo que quieres. Si estás con el grupo no te equivocas...
El consenso es real puesto que la gente lo acepta cómo real, pero tomárselo como real es una exageración ;-) y querer formar parte de él una obcecación neurótica!
Históricamente la mujer ha sido cosificada y sometida. Aunque las sociedades cambien, esa realidad permanece inmutable. Se trata de la forma que ha encontrado la sociedad del siglo XX y XXI de perpetuar esta tradición.
ResponderEliminarEn cuanto a la teoría que planteas de las escarificaciones, se me ocurren dos cosas.
Negro+pobre+escarificaciones=brutalidad
Blanca+occidetal+escarificaciones= moda
Ya se sabe que el dinero marca la diferencia entre el moro mierda y el jeque árabe.
Es la hipocresía de la sociedad acomodada. Lo que hago yo es bueno, aceptable, exportable y adquirible por todos. Lo que hacen los pobres es brutalidad, mantenimiento de tradiciones que anclan a las sociedades en el pasado, etc. Nada nuevo, vamos.
Courageos,
ResponderEliminarMe has llegao con la frase del viento. ¿Será, será de José Bergamín quizá? Muy bonita. Si no lo es se le parece.
Por otro lado el cuerpo de la mujer no necesita de ná.
¡¡Olé yo pa mí!!!
Bien dicho.
ResponderEliminarBergamín, sí.
Corageuous: Esta el rebaño, pero luego tambien esta toda la gente singular q piensa distinto y q esta dispuesta a decirlo.
ResponderEliminarSigamoslo diciendo.
Grcias
Di
Lili, es cierto q la muejr ha sido cosificada, y lo sigue siendo. La mayoria no tiene otra opcion, pero yo me rebelo ante las q tienen otras opciones (tienen dinero, educacion, etc) y deciden seguir jugando ese papel.
ResponderEliminarUn abrazo
di