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22 julio 2010

Tiago

Conozco a su padre. Es una buena persona, buena gente. Ayer hablé con él y me decía entre lágrimas "se ha muerto en mis brazos".

A Tiago no lo conocía personalmente, pero me he visto envuelta en sus últimos días de vida porque él los quiso compartir. Quería dar a conocer lo que le pasaba y ayudar a otros a combatir y vencer esta enfermedad.  

Desde pequeño y debido a una fisura en el paladar con la que nació, había estado en el hospital varias veces, pero aún así tenía miedo a las agujas. A lo largo de su vida Tiago demostró ser un luchador nato. No importaba las veces que se caía, siempre se levantaba, siempre se había levantado. Supongo que aplicaba su modo de vida, su filosofía de deportista a sus dolencias y por eso jamás perdió la esperanza. Se marcaba una meta cada vez e iba a por ella. Iba superando etapas.

El día 21 de junio le diagnosticaron un cáncer. Definía el cáncer como "un camino para la lucha, una forma de agarrarse a la vida en la que nunca había que desistir ni bajar los brazos y en la que había que combatir con uñas y dientes. Hay que resistir al dolor y al sufrimiento con los ojos siempre puestos en la confianza" decía. 

El día 7 de julio le iban a operar para extirparle el tumor. Sin embargo fue una de esas intervenciones en las que abren y cierran. Todo estaba mucho peor de lo que pensaban. Malas noticias. Aún así, Tiago estaba decidido a seguir batallando. Como él mismo decía: "Quiero luchar". 

Ayer por la mañana entró en coma y por la tarde fallecía.

Apenas un mes...

Tenía 18 años, una familia que le quería, una novia que estuvo a su lado y un futuro prometedor en el deporte.

Una pena.


11 comentarios:

  1. Sabemos que nos moriremos pero la muerte siempre nos sorprende, cómo si no lo supiéramos!

    Siempre que escucho algo así, me hago propósitos para disfrutar lo que la vida me está ofreciendo y de aprovechar el tiempo.

    No sé qué decir.

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  2. Es cierto Courageous, cosas así te colocan en tu sitio. Seguro que él se hizo muchos planes para cuando estuviera mejor: haría esto, iría aquí, comería lo otro... Nosotros podemos hacerlo y vivimos metidos en la vorágine del día a día sin hacer del carpe diem nuestro lema.

    Hay una frase que dice que hay que vivir cada día como si fuera el último y así quizá un día hagas lo correcto.

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  3. Lo siento Diva.

    Pero sí..hay que hacer las cosas HOY, mañana siempre es tarde.

    Un besazo.

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  4. Hace tres meses murió mi primo con 33 años. Se lo encontró su madre, fisioterapeuta y enfermera, a los pies de la cama. Muerte súbita, les dijeron, autopsia blanca, no hay causa.
    A veces la vida nos sacude de tal manera que no se puede reaccionar, son cosas que no nos entran en la cabeza.
    Carpe Diem, y lo que dure que lo disfrutemos, hay que buscar siempre el lado bueno de la vida. Que por lo menos la filosofía de vida de Tiago sirva para los demás.
    Un abrazo, y mucho corage.

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  5. Un abrazo fuerte...creo que es uno de los miedos más atroces de cualquier padre/madre puede tener el de no sobrevivir a sus hijos.
    Lo dicho abrazos.

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  6. ¡Qué lástima! Y qué dolor para los suyos. Esto es una cura de humildad y una buena sacudida a los valores para los que nos quedamos aquí, a ver si no se nos olvida.

    Una herida así no se cura, se aprende a vivir con ella, pero la la compañía de los buenos amigos hacen el pozo menos hondo.

    Carpe Diem como dice mi hermana.

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  7. En algún sitio leí que cuando mueren los padres muere el pasado, pero cuando, el mayor horror pensable, muere el hijo, muere el futuro. Injusto, cruel, atroz, inútil.

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  9. Hola Co,

    Yo también leí nosedonde que "el nacer es un largo adios". Muy duro pero así es.

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  10. Joder.
    Menos mal que no lo leí en su día. Y para entenderlo leed la última frase.
    Lo siento, mucho tiempo después.
    Me imagino el horror, pero que muy bien.
    Lo que no acepto, y no lo acepto, y por ello estoy poniendo mi pequeño granito de arena, es que la fisura palatina no tenga un protocolo de actuación bien definido y les cueste tantas hospitalizaciones a los críos y a sus padres.

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