Hace unos años mi entonces jefe -y ahora amigo- David me regaló la primera edición, firmada por el autor, de "Behind the Spanish barricades" ("Tras las barricadas españolas"). Había sido escrito muy deprisa, desde Julio a Diciembre de 1936 por John Langdon Davies, un periodista inglés que fue a cubrir la Guerra Civil.
Parece que fue muy criticado por Orwell, del que leí seguidamente su maravilloso "Homage to Catalonia" ("Homenaje a Cataluña"), cuyo nivel literario eclipsaba totalmente la obra de Langdon-Davies, que es más una crónica periodística. Sin embargo, es interesante leerlos juntos para entender cómo aquello de que la izquierda sufre para "estar unida" es un hecho. Langdon-Davies pertenecía a la línea ortodoxa del partido mientras que Orwell... todos hemos leído "Animal Farm".
De los dos libros guardo un gran recuerdo, por distintas razones. Tras leer las barricadas, intenté averiguar más sobre la figura del reportero y me enteré de que, tras sus experiencias en la guerra, fundó una organización llamada inicialmente 'Foster Parents Plan for Children in Spain' -luego Plan-, para ayudar a los niños huérfanos de la Guerra Civil española. A medida que pasaban los años, la ONG fue evolucionando (para apoyar a los huérfanos de la Segunda Guerra Mundial, y luego extenderse por Africa, Asia, Latinoamérica y el Caribe).
Hoy en día, Plan es una ONG que intenta ayudar a los niños a salir de la pobreza. Una de sus ultimas campañas es "Because I am a girl" ("Porque soy una niña"). Porque una de cada tres niñas en el mundo no tiene acceso a la educación por temas de discriminación, pobreza, conflicto. Cada día, miles de niñas han de abandonar el colegio, muchas de ellas para ser casadas sin su consentimiento, y tener hijos: esto es el final de cualquier posibilidad de independencia en el futuro. De algunas de las ocnsecuencias de esto hablamos ayer aquí ("Forsaken").
Las niñas, las chicas, SON el futuro. Con educación y trabajo pueden dar la vuelta a su situación y la de sus comunidades. Plan aspira a sacar a 4 millones de niñas y chicas de todo el mundo de la pobreza. Y para llamar la atención ha existido este día, el 11 de Octubre.
De la desunión de la izquierda, el único comentario personal que puedo hacer es que la derecha sostiene intereses de pasado y de presente; los de la izquierda son de futuro, están por hacer y cada parte que compone la izquierda se esfuerza por ocupar posiciones hegemónicas de cara a ese futuro que, por la desunión, nunca llega.
ResponderEliminarCon respecto a las ONGs, estoy totalmente de acuerdo en que podemos, y debemos, colaborar en medidas de alivio directo e indirecto. Pero mientras los sistemas socioeconómicos, culturales y religiosos que producen las desigualdades no cambien, seguirán produciendo desigualdades a un ritmo superior a la ayuda que podemos prestar. Estaremos aliviando a “damnificados”, sin hacer nada para que deje de haberlos.
El tema de “las niñas” es casi una copia del post anterior. Esta semana hemos conocido dos casos: una niña de 14 años, creo que pakistaní, que quería proseguir sus estudios y le dispararon por ello una bala en la cabeza; una joven nepalí cuyo padre había contraído una deuda de 30 euros y al no pagarla la cedió como esclava doméstica durante dos años. Dos gotas en un ancho mar.
Los occidentales, que hemos conocido tantas penurias, sobre todo por asuntos de religión, tuvimos un punto de partida con la Revolución Francesa y el reconocimiento de los Derechos Humanos. Esta revolución no se habría producido sin que durante un siglo no se hubiera extendido, sobre todo en Francia e Inglaterra, el movimiento de ideas de la Ilustración. Y no todo ha sido un camino fácil y rápido: en nuestro país, cuyo orgullo celebramos hoy, la mujer que trabajaba y tenía una cuenta de ahorros propia podía ingresar dinero, pero no sacarlo, sin la firma del padre, marido o tutor ¡hasta 1976!
Muchos hasta habíais nacido ya.
Las heridas son tan cercanas, a pesar del indudable avance, que podemos percibir las de esas mujeres, ya perdidas, y esas niñas cuyo futuro no se moverá un milímetro del presente de sus madres. La cultura de esos países, basada en principios religiosos, lo impide.
Podríamos acelerar algo los procesos si nuestros gobiernos del primer mundo basaran las ayudas en los niveles de democracia e igualdad, pero prefieren hacerlo por motivos de negocios. Quizá la presión social en ese sentido hacia nuestros gobiernos sea lo único realista que podamos hacer. Aparte del alivio de las ONGs, claro.
Sobre la desunión de la izquierda, que como vamos viendo tiene consecuencias trágicas, hare un "positive reframing" (o "el q no se consuela es pq no quiere"), pensando q el debate es un valor ens í mismo (quien decía eso de q donde todos piensan igual, nadie piensa mucho?). Pues eso.
EliminarDe acuerdo con lo de las ONGs: son parches, tiritas, y lo q hacen debería ser hecho de otra manera. Pero la historia de Plan me toca.
AL final todo se reduce, como dices, a Derechos Humanos. Y estamso retrocediendo.
Yo ya he firmado y lo he difundido por ahí. Me ha gustado decir lo de "I'm over 16", aunque en mi caso hubiera sido mejor "I'm WAY over 16" :P
ResponderEliminarGracias Community Manager ;) I am WAY WAY...
EliminarY luego hay que escuchar a algunas mujeres decir aquello de "yo no soy feminista" (que suelo traducir automáticamente por "yo soy imbécil").
ResponderEliminarLo pondré aquí otra vez para que quede claro:
Feminismo: 2. m. Movimiento que exige para las mujeres iguales derechos que para los hombres.
"Yo no soy feminista, yo soy femenina".
Eliminar(grito)
Ire hablaba de qué son víctimas ayer. Uno es siempre víctima de su propia percepción de las cosas, y de la presión de la sociedad en la que uno nace. En el islám se dice que no hay esposa mala de 12 años, una no se ha desarrollado como individuo en la sociedad fuera de su familia, y su identidad depende todavía de ella y su desarrollo será con un otro, el marido, que tiene pleno control sobre ella, como su primera familia. No cambia por una presión social brutal y porque hay una parte, la masculina, que tiene el control y se beneficia de ello. Son reyes absolutos dentro de su propia casa, con suegra incluida. Su individualidad es una planta que no se ha desarrollado, enferma, con un enorme síndrome de Estocolmo. La presión es tan alta en su esquema de las cosas, que para protestar se queman vivas.
ResponderEliminarLa religión cristiana tiene el concepto del prójimo, trátalo como querrías ser tratado y el del perdón. Los de izquierda de igualdad social (si la quieren conseguir con violencia, paso) que haya hipócritas no quita ni pone a las ideas.
Me gusta esta entrada:
http://susomendive.blogspot.com/2012/10/despiertaes-la-codicia.html
Una es víctima de su percepción, q abarca un espectro muy amplio y algunas podrías ser debatibles. Luego están algunos hechos incontestables. Bajemos el listón y pidamos de moemnto "solo" q se respeten los derechos humanos.
EliminarA lo que yo he llegado es que uno, todos, siempre somos víctimas de nuestra propia percepción ya que vivimos en una realidad que siempre nos supera.
EliminarUno puede ser violentado por un grupo o por un individuo y uno puede notar el daño sin verlo, puede rebelarse y que la maten o aceptarlo, ir entendiendo que pasa en muchos y distinto niveles sin demonizar al otro porque generalmente no lo es!, manteniendo un precario equilibrio entre lo que puedes ver y la pulsión por sobrevivir.
Si a estas mujeres les añades que pueden perder sus hijos cuando el padre quiera, las puede divorciar diciéndolo ante testigos tres veces, y que divorciadas o viudas viven de la mendicidad en la calle sin "protección" no tienen escape. Ven ellas lo que les pasa? Son conscientes? No. Lo sienten, lo sufren? Sí.
El problema que ellas tienen es que no son esposas, son esclavas, pero ellas se dicen esposas. A una ya hecha y curtida ya le podría caer el hombre más respetado, querido, buena gente, etc. etc. yo me diría soy esclava y ese poner la palabra que es la que te libera.
A eso me refería yo. Puedes vivir cualquier cosa, si la ves, aunque estés bajo su control, no sufres una victimización. Sigues siendo.
Como Galileo, si quieres: E pur si muove.
por decirte algo, ya que a los católicos que conozco es a los españoles. Fue con la violencia (en la guerra y después, cuando la violencia ya no era necesaria) que el catolicismo español apoyo la llamada Cruzada.
ResponderEliminarNo con el amor al prójimo ni el perdón. Eso no lo he visto ni en las películas.
A mí me gusta esta http://www.publico.es/espana/443787/mas-de-ocho-mil-ejecutados-en-la-sevilla-de-queipo
Mira bien la foto de los vencedores entrando en Sevilla, la primera línea, dispuestos a fusilar a 8.000 personas y a prohibir que sus familiares se pusieran de luto.
A ver si podemos salir del mismo círculo.
EliminarTal como yo veo al ser humano.
Que uno se valide en sus ideas y en las ideas de su grupo es muy fácil, ya que entonces uno no tiene que validarse por lo que uno hace y por las consecuencias que pueda llegar a tener. Es como dar consejos, uno no pierde ni gana nada, solo asienta sus ideas.
Si uno quedó bajo control de un bando y era considerado del otro, cualquier grupo lo ajusticiaba porque sí.
Y cuando uno de los bandos ganó, el miedo sufrido se canaliza con el que se ha visto como amenaza, con la rabia del que se sintió débil.
Que la iglesia se identificara con el bando que no los mataba es lógico. Que es fácil que se validen con sus ideas y no con los hechos, pues como todos.
Si no has visto amor al prójimo ni perdón "hi en las películas" ;-) pues porque no quieres verlo, porque lo hay y lo hubo.
Sí tiene su lógica, pero tenemos la rabia del que se sintió débil, no el amor al prójimo y el perdón; y de eso, dices, se debería tratar lo vuestro, ¿no? Pero no es lo que la iglesia mostró.
EliminarDe psicologías baratas de autoperdón y amor a uno mismo, las he leído mejores.
A ver si así. Si el lado que perdió hubiera ganado, qué es lo que hubieran hecho? Cómo se habrían comportado con los vencidos?
EliminarEn mi opinión al final es la gente, no las ideas.
Tienes razón, Cou. Teniendo en cuenta todo lo que pasó donde iban "liberando" territorios, tuvimos mucha suerte de que los vencedores fueran el "bando del perdón y el amor al prójimo". Pero mucha suerte.
EliminarPor supuesto que no tuviesteis suerte. Ni en muchísimos casos, perdón, ni justicia. A saldar cuentas! Y nada hubiera cambiado si hubiera sido del otro signo, por eso no creo en la violencia, ni en que uno pueda juzgar a nadie por las ideas que tiene. Pero también hubo casos en los que personas se negaron a vengarse o a que sus hijos pequeños supieran quienes fueron los culpables del daño que habían sufrido. Y que dieron bien por mal.
EliminarPor sus obras los conoceréis.
Tanto los que tu admiras como los que no. Eso es todo, y eso fué.
Y eso vale para los que hablan del amor al prójimo, como los que hablan de los compañeros. Y hay incoherentes e hipócritas en ambos lados. No hay un lado bueno. Hay acciones individuales que dan, o que intentan obtener. Las personas individuales se esfuerzan o no poniendo o quitándose necesidades y dando o no. Y siendo padre es fácil de entender, dejas un espacio propio que podrías reclamar para ti, para que algo más crezca, pienso que es hacerlo extensivo a gente que no es de tu familia, de tu grupo, porque en muchos casos, si escuchas de lo que la gente se queja, refleja un: coge todo lo que puedas para tí, y que los zurzan.
Te equivocas, hay grupos (ya sé que hay hijosputa y gente buena en todos los grupos): y lo que digo es que el grupo católico, como institución, bendijo la violencia. Por eso cuando los miembros de ese grupo me hablan del amor, me da la risa. (salvo excepciones personales que conozco). La Iglesia tiene una historia de violencia brutal.
EliminarDe otra cosa, no estoy hablando.
Lo puedo aceptar. Tiene violencia en su historia, aunque no solo tiene violencia.
EliminarMe olvidé de poner el hambre como motivación/autojustificación de comportamientos en la guerra civil
Una pequeña pero buena noticia:
ResponderEliminarBotsuana autoriza a las mujeres a heredar propiedades, en sentencia histórica. El Tribunal Supremo del país sudafricano asegura en la sentencia que "ha llegado el momento en que este tribunal se convierta en la comadrona que asista al parto de un nuevo mundo que lucha por nacer"
Bien, una buena noticia! Recordemos lo q decías arriba de la situación de la mujer en Ejpaña hasta 1976...
EliminarAcabo de descubrir tu blog. Es de gran interés, un saludo.
ResponderEliminarGracias Jesús, bienvenido. Decirte que somos dos: Diva (mi cobloguera) y yo. Empezamos hace casi... ooops 3 años! y aquí seguimos, divagando.
EliminarUn muxu
di
El título de tu post me ha recordado a una de mis performances favoritas. Te paso el link, para tu deleite y el de todos los presentes. Es casi mejor que el 'Ulises':
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=1Q-W0jonfek&feature=relmfu
También quiero aprovechar para censurar a esa señora que arriba cita noticias sobre Botswana, porque evidentemente lo hace con ánimo de dañar la imagen de nuestro Monarca, pegamento que une España con fuerza, coraje y valor. Si usted, señora que usa un avatar de un niño de Comunión, ha sido incapaz de superar el no haber sido invitada a la recepción privada que Doña Letizia ofreció a un grupo de mujeres de la aristocracia (entre las cuales me encontraba, junto con mi hija), lo único que puede hacer es guardarse su odio si no quiere evidenciar sus carencias.
Volviendo al asunto de la presencia femenina en la sociedad, quisiera citar a San Pablo, que sabiamente sentenció: "Las mujeres sométanse a sus propios maridos, como al Señor". También es reseñable esta otra enseñanza: "A la mujer no le consiento enseñar ni arrogarse autoridad sobre el varón, sino que ha de estarse tranquila en su casa".
Ahora me retiro a españolizar catalanes.
¡¿Cómo que no estaba en la recepción?! ¿Quién te crees que fregaba los cacharros en la cocina?
ResponderEliminarTe lo advierto, como me vuelvas a poner un enlace a Magdalena, sin avisar que es de Magdalena, escupiré en tu taza de té.
Mi forma de entender las cosas es mucho más parecida a la de Courageus, pero...oigo tiros?, ah, que empieza la temporada de caza.
ResponderEliminarEl asunto de la educación de las niñas me preocupa mucho, pero mirándome las propias narices. Alucino con la uniformidad de gustos y caprichos de las miniprincesitas, que sale de los anuncios de la tele y les llega mucho más por la mayor tendencia a la socializacion de las minis -empiezan con el rosa-horrorosa con año y medio!. Estamos formando mentes libres?.