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07 diciembre 2024

"Mañana y tarde" de Jon Fosse: Una voz que es llovizna, pienso, y que es luz y que es, al cabo, arco iris, pienso.

"Mañana y tarde" de Jon Fosse -Nobel 2023- es una "novella", que es como llaman en inglés a las novelas cortas, de la que es imperativo hablar sin contar un punto clave de la trama. Y no es porque hacerlo sería un "spoiler" tipo "el asesino era Jack El Forastero", no: sería mucho peor que eso. Hay algunas novelas en las que hay sorpresa más allá de la mera lectura, por ejemplo pasa con "La mancha humana" de Philip Roth o "El camino de Ida" de Ricardo Piglia. Con este párrafo lo que vengo a decir es eso tan de moda de "la experiencia": tienes que vivirla. Yo no te la voy a chafar- pero cuidado con las críticas, que en una he leído el spoiler en el titular.

Jon Fosse es noruego y me lo imagino viviendo en una cabaña como la que encontraron a Ted Kaczynski, el Unabomber [si no has visto la serie "Manhunt: Unabomber", ya tardas], ahí perdida en un bosque de abetos. O en "la casa más solitaria del mundo", esa que yo pensaba que estaba en las Islas Faroe, pero buscándola acabo de descubrir que está en una islandesa llamada Elliday. Acabo de averiguar cosas sobre ella, pero eso sería irme aún más de tema, pero tengo que poner las fotos:




Pero dice la wiki que Fosse tiene una casa en Bergen, ese no-lugar donde atracan los horribles "cruceros por los fiordos escadinavos" y donde te atracan £15 por una birra [la birra más cara ever, y hace diez años]. No sé si escribe allí, entre gaviotas y turistas españoles, pero mientras leía me imaginaba al prota de esta novela, Johannes, en este pueblo, este sí, de las Islas Faroe.


Una parte que no encajaba entre la concepción del escenario y lo que Fosse me contaba es que el protagonista y narrador es un pescador jubilado que sale de su casa, baja al muelle, un rato va en barca... y como se puede apreciar en la foto, el pueblo está rodeado de acantilados y difícil será para un anciano el bajar al agua, pero así son los mundos que nos construimos cuando leemos. Y en el resto del divague voy a incluir fotos de las Faroe, porque son maravillosas -una amiga estuvo allí hace poco, lo confirma- y porque imaginarme a los personajes en esos enclaves aún hace que la novela me guste más.


A las afueras de este pueblo vive nuestro protagonista al que, por cierto, hemos visto nacer en las primeras páginas en las que su padre, Olai, le pone el nombre de su abuelo, Johannes. Y poco más, esta parte es breve, pero habla de llegar a este mundo, de nacer: "y este probablemente sea uno de los mayores esfuerzos que tiene que hacer una persona en su vida, el de salir de su origen en el vientre de su madre y entrar en su propia vida". No recordamos nuestro parto -aunque conozco a una persona que asegura que sí- pero debe ser un proceso, si no tan duro como para la madre, también intenso para el bebé: ese navegar el canal del parto sin cuaderno de bicátora para salir al mundo frío y clínico que es el quirófano, y luego ya solo frío, que es la vida. De repente, en una ffwd bestial, nos reecontarmos con Johannes, el anciano pescador que ocupa la segunda parte de la novella. 



Antes de nada, una novedad para quien me haya leído sobre libros antes: es de los pocos en los que la traducción no me ha chirriado. Su estilo es tan especial, tan corriente de conciencia y pensamiento circular, que se asume bien desde el principio ["¿no está pinchada una de las ruedas? pues sí que lo está, piensa, mira qué mala pata, piensa"]. Hay poca frase bonita formal [e.g. "una felicidad recorre todo lo suyo y se le sale por los ojos en forma de lágrimas"], pero es más el tono, el hacerte sentir verdaderamente dentro de la cabeza de ese anciano lo que hace la magia. 

Utiliza mucho -porque supongo que es así como pensamos- la repetición de una frase a modo de letanía, que recorre toda la novela. ¿Alguien recuerda el divague del libro de consejos de escritura de Chuck Palahniuk? Palahniuk sugiere insertar un coro (griego) que repite una máxima durante el libro, acorde al personaje. En su famoso y maravilloso Fight Club la frase es “La primera regla de Fight Club es que no se habla de Fight Club”. Pues aquí hay muchas, desde referirse siempre a personajes con todos sus adjetivos: "la vieja matrona Anna", "la vieja señorita Pettersen, ya sabes, la vieja señorita Pettersen", hasta frases simples como "la hija le salió buena", o "eso no hay quien lo niegue".

Al no desvelar el tema principal, voy a escribir de otros también importantes. Uno de los que me ha tocado particularmente es envejecer ["Qué pena da envejecer, dice entonces Johannes"]. Me voy dando cuenta de que, desde hace unos pocos años, con los amigos de mi edad comenzamos a hablar de esto con cierto tono jocoso: "yo ya no aguanto una noche de fiesta como antes", "claro, con 20 hoy no tiene resaca y nosotros estamos muertos". De momento estamos aún en esa fase: solo la fiesta, ni siquiera hemos entrado a deporte, porque ciertos hitos deportivos, quien los quiere, los hace [el otro día estuve con un amigo del Peda que se hace 25 mil kms al año en bici, e hizo una carrera de montaña más de 300 kms en un día]. A veces bromeamos con la "gente joven" del equipo o nuestros hijos para que hagan algo en el ordenador porque ya saben más de tecnología, pero no nos lo tomamos demasiado en serio: no somos aún como la generación de mis padres que solo se defienden, la mayoría. Pero a veces el Náufrago Ro habla de "la primera segada" de la de la hoz, que se lleva así como quien no quiere la cosa a alguien de nuestra edad, o nos da un susto de salud. Por supuesto, y dado mi historial, no soy hipocondríaca pero el tema salud me da particular miedo: menos mal que se va a legislar aquí en UK sobre la muerte digna, yo no quiero vivir a cualquier precio [el que quiera, adelante, que se lo ofrezca a Dios Vuestro Señor, pero a mí me dejen en paz].

Siguiendo con Dios, parece que Fosse se convirtió al catolicismo en 2012 y asegura que le ayudó a combatir sus problemas de adicción al alcohol. Antes era ateo, y siempre me parece curiosísimo que alguien que un día no creyó, de repente cambie [estoy calentita, que ayer vi "Cónclave" de Berger]. Sé que esa regresión puede pasar con los ancianos, a medida que se acerca el momento, así que estad atentos a este blog a ver si me ocurre, pero ahora me parece imposible que alguien con dos dedos de frente pueda llegar ahí. Los personajes de Fosse hablan bastante del tema y piensan cosas como "en este mundo manda Satanás tanto como manda el buen Dios" pero también como "pero que Dios lo decida todo y que todo lo que ocurre tenga un sentido divino, eso no se lo traga". Me hizo gracia esto del "tragar", porque ni con los niños a veces este pensamiento mágico cuela: el Peda, poco antes de la primera comunión, cuando su madre le explicó que en la consagración, “el pan y el vino se convierten en el cuerpo y la sangre de Jesucristo", él hizo un corte de mangas a la vez que un "y yo que me lo creo!". Es curiosa esta "religión a-la-carta", como la de la Yaya: no entiendo por qué no se dan de baja de todo el club, aunque a nuestro protagonista le sirve, ante todo, de consuelo:
"poco a poco se fueron haciendo a la idea de que no tendrían más hijos, así es la cosa, es lo que nos ha tocado, se decían, y daban gracias a Dios nuestro Señor por haberles dado a Magda, porque sin ella la vida habría resultado algo triste allí en el Islote al que se fueron a vivir".


 Pero el pensamiento recurrente de Johannes que más me ha dado que pensar es su viudedad. Su mujer, Erna, ha muerto hace poco y por sorpresa, él siempre pensaba que le tocaría primero y ni se había planteado lo que iba a ser la vida en soledad. Todas estas partes, que están narrada con esas mismas letanías circulares son tremendamente nostálgicas. Y a la mitad del mundo que siga en pareja le va a tocar ajustarse a eso,  un día. Observo cómo reacciona alguna gente a mi alrededor, "no me acostumbro", "nunca me acostumbraré". Cuando roté seis meses de residente por psicogeriatría escuché muchas historias: un hombre may mayor, que había vivido una vida entera, viajado por el mundo y esas cosas con su mujer que había fallecido unos meses antes, que decía "no veo la razón de seguir", y cómo no entenderle. Aquí Johannes dice cosas que parten el corazón porque, lejos de ser una pareja de Disney -como todo ciclo de relaciones, ya estaban aburridos, y a veces se peleaban- cuando vuelve de su paseo piensa cosas como "si Enna viviera, sería un verdadero gusto llegar a casa". Esto es bonito y debería ser un aviso para lo que damos por hecho. 

Porque Johannes se ha de forzar a salir pues, "ay qué pena, piensa Johannes, qué lástima da quedarse solo, es una verdadera lástima, piensa Johannes, será mejor que vuelva a salir enseguida, piensa, en casa ya no hay quien pare, piensa Johannes".

"solo que ahora ella se ha ido
para siempre
Así es la cosa, dice Johannes"
La sensación de vacío, que no se llena con todos los kilowatios del mundo-pongamos que tengas suerte y no estés en pobreza energética, como muchas familias y ancianos hoy en día:
"pero por mucho que calentara la casa nunca llegaba a calentarse del todo, y por muchas luces que encendiera tampoco llegaba a iluminarse del todo, de modo que si por eso fuera, podía quedarse en la cama holgazaneando tanto como aguantara, solo que tampoco podía darse por vencido (...) En fin, dice. Así es la cosa, dice. Tengo que ponerme en marcha, dice".
Y ver su fantasma.
"Y Johannes piensa en lo bien que estuvieron los últimos años que vivió Erna, sin apuros de dinero, sin trajines ni fatigas de ningún tipo, vivieron en paz y tranquilidad, pero de pronto un día Erna amaneció muerta en su cama ahí arriba en la guardilla, piensa Johannes, y mira hacia la ventana de la cocina donde solía apostarse Erna y ahí no hay Erna ninguna, no hay más que suelo vacío, piensa Johannes" .


Y la de "de he hacer algo", "he salir de esta cama aunque no quiera". Porque lo que de verdad quiere es morirse. Porque total, ya nadie le necesita
"pero será lo que tenga que ser, tampoco tiene mayor importancia, ahora que Erna está muerta y los chicos ya hace tiempo son mayores, no sería un drama que acabara alimentando a los cangrejos, piensa Johannes"
Esto es tristísimo y he estado en conversaciones en las que las personas mayores dicen algo de este estilo, "ya no sirvo para nada". Y qué? Las personas no estamos para servir para nada. La muerte digna nada tiene que ver con "no ser productivo", "no ser un estorbo", a la que se referían en el debate del parlamento los oponentes a la ley. No han entendido nada. 

A veces pienso en las cosas que nos sobrevivirán, en los objetos. Tengo a ratos problemas para deshacerme de ciertas cosas -no me gusta comprar y este es un factor contributivo- que considero con "valor sentimental". Esto me está llevando a acumular algunos trastos en el desván y a menudo, cuando subo, me pregunto, "quién tirará todo esto, a qué contenedor irá". Fosse también lo toca:
"basta con pensar en todas las veces que Erna usó esos barreños, cuántas coladas no haría en esos barreños antes de tener su lavadora, pues unas cuantas, y ahora Erna ya no está, mientras que los barreños siguen aquí, así es la cosa, las personas desaparecen mientras que las cosas permanecen" 

Supongo que ese pensamiento de dónde irán mis cosas es también envejecer, aunque me haga 30 kms en bici y el cuerpo más o menos aguante. Pero no hace falta tener cierta edad para leer esta novela, aunque leerla con 20, cuando se es inmortal, no debe ser lo mismo. Aún así lo recomiendo porque aunque llueva, a ratitos sale el sol: solo hay que saber encontrar el arco iris...






13 comentarios:

  1. Cuando murieron mis padres de cáncer y con pocos días de diferencia me propuse que no estar dispuesto a vivir días de más sufriendo y si necesidad para ello. Me encontré con un artículo en El Pais de una asociación que te ayudaba a morir cumpliendo ciertas condiciones y que por supuesto por aquel entonces no era legal pero ya se hacía la vista gorda. Lo guardé por si lo necesitaba. Hoy no hay mayor problema para elegir.
    En cuanto a ancianos y Dios. A mi padre ya en el lecho de muerte su hermana le ofreció que si quería la asistencia de un sacerdote y por respuesta soltó un gruñido de desaprobación. Me dejó encargado que sus cenizas volaran sobre el Rompeolas y por allí debe andar.

    Abrazos

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    1. Ay Jota, muchas gracias por compartir esto, qué momento más duro debió ser, y menos mal q las cosas han cambiado. Decirte q solo por ese gruñido ya me cae bien tu padre y qué chulo lugar un rompeolas...

      Un abrazo grande

      di

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  2. Me lo pones a elemento básico en la reproducción de algunos animales y que se halla algo desprestigiado como acompañante de unas solitarias patatas fritas o muy proclive a maltrato constante por parte de adultos inhumanos, una vez que salga de la piscina no precisamente olímpica.

    Volveré(mos) por aquí...

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    1. “Daban gracias a Dios nuestro Señor…” supongo que es lo que justifica ese terrible esfuerzo de nacer, que debe ser mucho más terrible que otros “pequeños” esfuerzos futuros… como :”sentirse abandonado”... “no encontrar un ser a quien amar”... “perder al ser amado”... “no saber qué haces en el mundo”... “no saber la razón de que los demás hagan lo que hagan (y no me refiero a aplastar hormigas)”...

      Porque al nacer nuestra mente aún debe ser como la de la hormiga que aplastaremos con deleite en nuestros primeros años de “tener uso de razón”... por lo que sufrir sufrir lo veo realmente un bluf (comparativamente). Incluso en la adolescencia podemos sufrir enormes desamores a lo Romeo y Julieta, pero no dejan de ser banales paseos por la superficie del sufrimiento (objetivamente).

      En fin, que me alargo mucho… y me podía meter con la necesidad social de confesar "in artículo mortis"... este divague me lleva a pensar en dos Síndromes de Estocolmo, muy cercanos… el de la Muerte Prematura y el de la Pérdida de la Pareja (amada)... por ahora con n>2 ni me preocupa.

      No queremos prepararnos (tampoco nos dejan) para recibir a la Señora con la tranquilidad necesaria, para tomar el pasaje, incluso con ganas.

      Y por lo mismo nos aferramos a una pareja tal que noray en el puerto, para evitar que nos sintamos solos al tener que desatracar con falta de marinería.

      Y la dificultad básica reside en el injerto de un gen social negativo, que mudó el biológico, sobre la naturalidad de la muerte. Así como otro gen social muda la necesidad de socializarse, pero sin perder la identidad propia, por una necesidad artificial de temer a la Señora, y, al mismo tiempo, temer a perder tu identidad, no sólo una parte, al marcharse (ni siquiera tiene que morir) la que era tu pareja casi imprescindible. Tú jodida “media naranja”.

      Todo eso forma parte de un adn social negativo, que se fue injertando en la mente durante las etapas de cría humana, y reforzandose a tope en la etapa adulta. Oscureciendo así los dictados positivos que están escritos en el ADN.

      En fin, uno que no sufre pariendo… aunque sufre mucho por lo que está pasando en este puto planeta.

      Bicos de uno que está esperando tranqui por el fatal beso de la Señora…


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    2. MV, claro q el feto en su paso por el canal del parto sufre físicamente (no emocionalmente, ni racionalmente, no tiene conceptos), pero como nadie recuerda para contarlo...

      Es cierto q no nos preparamos para La Señora esa de la guadaña (q me acabo de dar cuenta q la he llamado "la de la hoz" en el divague, ahora lo cambio... ay me estoy riendo sola, a veces pongo cosas sin sentido, otras, barbaridades... en fin, agradezco vuestra paciencia). Lo cierto es q a todos nos debería dar miedo o preocupar precisamente el "cómo" más q lo habrá depués (spolier=nada), pero ese "canal del parto" del q hablamos q si sufrimiento o no, el "canal del estirarlapata" puede ser bastante desagradable, a mí eso es lo q me asusta.

      Bueno, no nos pongamos tétricas q es mejor reírse por lapsus soviéticos como el mío...

      bicoss

      di

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  3. Me ha encantado tu comentario.
    Me han dado ganas de volver a leerlo de nuevo y seguro que me gusta tanto o más que la primera vez. Cuando lo veo en la Biblioteca en lugar preferente y alguna persona ojeando la estanteria estoy tentada a decirle: cógelo, que te va a gustar.

    Otra cosa. Igual te llevas una sorpresa con DMD que se va a legislar ahí. A la hora de llevarla a cabo no están fácil. Multitud de trabas.

    Un beso.

    .

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    1. Muchas gracias Anónima 19:47... claro q no es tan fácil... de entrada te tienen q dar 6 meses de vida, y q lo certifiquen 2 médicos y un juez... ese proceso dura ya seguro más de 6 meses. Tiene q haber trabas para salvaguardar a personas q querrían vivir pero no pueden pagarse los paliativos, claro.

      Es muy chulo, y tb cuando vas descubriendo lo q no he contado... a ver cuando leo SEptología q lo tengo aquí edición de Fitzcarraldo...

      otro beso

      di

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    2. "de entrada te tienen q dar 6 meses de vida". Es decir, si alguien tiene demencia, que apunta ser severa, pero puede seguir vivo durante 10 años ¿Tendría que esperar 9.5 años a que se le aplicase la eutanasia? Solo pregunto, porque no sé si lo he entendido bien.

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    3. Yo tampoco lo entiendo...no solo el Alzheimer, hay otras enfermedades neurológicas terribles q puedes vivir anios con mínima calidad de vida y q no quieras vivir así. Una amiga me envió esto que pone los pelos de punta:

      https://www.youtube.com/watch?v=mOxJHGHXviE

      Minuto 22:00 en adelante. Familiares explicando q ante situaciones terribles la médica les dijo "rezo por él" o el enfermero "recurra a la espiritualidad". Luego piden respeto para todas las fes.... la que tienen ellos por los demás. En fin.

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    4. Gracias por la respuesta, simplemente quería saber si lo había entendido bien. Y visto lo visto, la ley es un inicio, pero necesita mejoras.

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  4. En los últimos tiempos me ha tocado decir hasta otra a dos personas de forma inesperada. No eran tan cercanas como para notar su fantasma en mi casa, pero sí lo suficiente para soñar con ellos muchas veces y a uno de ellos verlo en la calle a la vuelta de cualquier esquina. Echar de menos es lo menos que podemos hacer. Ninguno era mayor, ninguno estaba cansado de vivir. Pero pienso que obligar a vivir no es de recibo y al parecer es lo que sucede incluso con una ley de muerte digna. Que a la gente se le niega el derecho en aras de defender el "bien superior" que es la vida con argumentos absurdos. No es tan fácil aquí, espero que allí sea mejor.
    Menos mal que el oso no cae por aquí, con esas fotos imagina nuestros destinos de vacaciones para los restos.
    Muxus

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    1. Gracias darling, te entiendo y lo inesperado lo hace tanto más duro, increíble, cuando te despiertas por la maniana el primer pensamiento es blanco y, de repente, oh no, esto ha pasado.

      El debate aquí fue por lo q he leído muy emotivo: algun@s diputad@s lloraron pq tenían historias personales. Un cirujano q es ahora diputado dijo q cuando empezó de joven en medicina no estaba a favor, pero después de anios en primera fila había cambiado de opinión. Alguien dijo q por qué no dar a las personas lo q autorizamos con mucha tristeza para nuestros perros.

      Es un lugar muy losiratis de vacaciones, "haciendo monte" por ahí...a mí tb me gusta eh, pero echo en falta el... hey, vamos a bajar a baniarnos a esa playa! (pq está a -2 grados :))

      muxusss

      di

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