La semana pasada vi "The Florida Project", la última pelicula de Sean Baker, y llevo desde entonces pensando en ella. Y en mi infancia, o parte de ella, y la de los ninios de hoy.
"The Florida project" es para mí como estar trabajando, porque trata con ese segmento excluido de la sociedad, que la mayor parte de la gente que leerá esto solo conoce por las pelis, supongo. La gente se preguntará como pueden ser tan "cabezarrotas" de llevar una vida tan en la cuerda floja.
Aquí al lado de mi casa hay un par de hoteles donde mayoritariamente vemos turistas españoles e italianos, despistados con sus maletas, sonrientes cuando ven a Mini con su estúpido sombrerito de personaje de Enyd Blyton ("hemos visto a un autóctono" pensarán) pero donde nos consta tienen algunas habitaciones para alguna de esta gente: el gobierno los mete ahí. En los EE.UU. también alojan a algunas de estas familias en moteles de carretera, y ahí es donde se desarrolla la peli. Un motel pintado de rosa ya que pretende ser un castillo de princesas ("Magic Castle") porque está al lado de... bingo, Disneyland. El motel rosa le da mil vueltas a aquella pesadilla donde los Pedalistas se tuvieron que quedar porque no había habitaciones en Monterrey: un sitio inmundo y carísimo, y tiene piscina! Los habitantes, el del 15 ha estado en la cárcel, la del 9 tiene problemas con la botella... así le va introduciendo este lugar Moonee, la ninia de 6 anios protagonista a su nueva amiga, del motel siguiente -que se llama "Futureland" (como esa parte de Disneyland donde está "Space Mountain"-si no conoces este dato, estás de suerte), que se une a partir de entonces a ella y a Scooty, su compa de travesuras.
Así que estos tres ninios se dedican, fundamentalmente, a vivir. Con poquísima supervisión de sus madres solteras, a menudo en drogas, o buscándose la vida, el que se encarga un poco desde lejos de ellos es el responsable de la finca, que igual sirve para echar cloro a la piscina, como para arreglar la máquina del hielo. La peli tiene una rama social importante, en la que hoy no entraré. Porque lo que me ha maravillado son los críos, su energía y absoluta desaforada libertad. Ellos son pequenios delincuentes, Oliver Twists del SXXI, que hacen auténticos desaguisados, roban, piden dinero a turistas para comprarse helados compartidos, dejan todo el motel sin luz, juegan con fuego... todo esto con el motel de fondo, pero también con otro aún mayor que lo inunda todo que es el parque Disney. Hay un establecimiento enorme que tiene forma de media naranja, las orejas de Micky Mouse están en alguna valla, las heladerias, los restaurantes... está todo al alcance de la mano, solo que estos ninios no pueden cogerlo.
Pero viendo la pelicula, una se da cuenta de que tienen mucho más que todos los pobres ninios ricos que tienen entradas para Disneyland: tienen una libertad tan inmensa que a una le dan ganas de gritar, a la mierda con lo correcto: estos ninios están pasando el verano de su vida. Imposible no volver a los veranos de la gente de mi edad en los pueblos, cuando te ibas de casa con la bici por la maniana, pasabas rápido a comer, desaparecías hasta la cena, y luego ya hasta las mil. Qué hacíamos? Pues era un poco Huckleberry Finn, sin el glamour: ir al río, a baniarnos en pozas, al molino, al pantano, al pueblo de al lado, a la arboleda, a las cuevas... era una sensación única, al menos para mí, ninia de ciudad.
Y hoy miro a Mini, cuando máxima preocupación en este momento es "andar sola", es lo que le gusta de Bellver "podía ir sola", simplemente por el placer de hacerlo. Lo recuerdo tan bien. Y conociendo a mi hija, sé que pese a lo que le gustó aquel Disneyland, lo cambiaría claramente por un verano de delincuencia con Moonee y Scooty.
Que bonito ese momento de la vida donde la libertad es un caballo desbocado que corre libre por la playa.
ResponderEliminarUna sensación que nunca hay que perder.
Y como todo lo bueno de esta vida es gratis.
Quién te lo va a cobrar?
Nadie.
Cuanto puede durar?
Sólo depende de tí.
Hasta cuando ?
Hasta siempre.
...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMañana mismo voy a verla. La infancia en libertad (aunque sin padres metidos en problemas) es la que viví. Mi verdadera patria, que dijo Rilke.
ResponderEliminar¡¡¡Yuhu!!!
seq
ResponderEliminarAcabo de verla y me ha gustado muchísimo. Muchísimo.
ResponderEliminarHola darlings! Me alegro q vayáis a ver la peli (NAN), q la hayáis visto (MO) y q os haya inspirado (DRIVER) a hablar de las mejores cosas de la vida, q son gratis.
ResponderEliminarNo he hablado en el divague del final de la peli (atencion-spoiler)... pero lo voy a hacer aquí... el q la vaya a ver q no lo lea. Moonee, de 6 anios, es espectacular... conocido es el lema "no ruedes con ninios o animales", pero es q esta ninia es brutal. Vi
Perdón, se ha publicado. Sigo...
ResponderEliminarDEcía q la ninia, q interpreta lo q en inglés se llama "streetwise" (callejera, q sabe las normas de la calle), por ello parece mucho mayor de los 6 anios q tiene pero en la escena del final... te das cuenta de su edad, de q es una ninia. LLega un punto en el q Servicios Sociales van a quitarle la custodia a su madre, una chica joven como he dicho en el divague, cabezarrota, desorganizada, caótica,.. pero en realidad fruto de la pobreza enorme q hay en ese país "el más rico del planeta", que lo intenta todo (como vender perfmes a los ricos de los hotsles de golf de los alrededores), pero q al final no puede. Total q cuanod servicios sociale svienen a llevarse a Moonee, esta se va corriendo al motel vecino a buscar a su amiga, y una vez en la puerta empieza a llorar diciéndole q "tal vez no la vea más", y llora... buf, es q se me pone la piel de gallina... llora como la ninia pequenia q es, llora como Mini, q ha sido poco llorona, pero cuando lo ha hecho era exactamente con ese desconsuelo. IMpresionante.
Y luego las dos ninias se dan la mano y corren... superan los limites de su mundo (q era ir a ver vacas reales en lugar del parque tematico zoologico, o casas abandonadas en lugar de la del terror de disneyland) y se cuelan en Disneyland. Aqui el director cambia su camara por un iphone (con uno rodo su anterior peli Tangerine) y nos oferece unas imagenes medio oniricas de las ninias corriendo hacia el palacio de Aurora. Me parece redondo.
muxus
di
Moonee es una entrañable pícara. Una inocente que, salvo milagro (pienso que un milagro sería que los servicios sociales algún día estuviesen bien dotados económicamente y libres de las caprichosas políticas), acabará, inexorablemente, siendo su madre; madre que, aunque de pedagogía anda tan cortita como de dinero, tiene a pesar de todo, que es mucho, el instinto maternal incólume. ¡Un ole por ella! A dicha madre yo la veo insoportablemente maleducada pero ejemplarmente digna, combativa y, a su desatrosa manera, amorosa.
EliminarAl acabar de ver la película, Di, tras reponerme, pensé que es bonito que Sean Baker (el director) transgrediese con decisión los requilorios para rodar en Disneylandia como Moonee y su amiguita hicieron para, en su inesperada y emocionantísima despedida, entrar allí a las bravas.
Y aunque lo malo es que hay muchas moonees, lo bueno de esta película es que nos hace ver que hay, en todas partes, muchas moonees.
LUX, tienes toda la razón en lo q dices: es un ciclo del q es muy dificil salir, su madre sería una Moonee y ella se convertirá en su madre. A menos que. Porque claro q se peude romper el círculo, pero se neceista ayuda. Y, como tú, me he sentido tan desesperada con la madre, tan vulnerable, intentándolo todo y a la vez riénose con su hija, casi como una ninia más. Otros ratos colocada mirando la tele, obviamente, los personajes más inetresantes son los q tienen claroscuros...
EliminarNO sabíá q había normas para rodar en Disney, pero, tiene lógica... bien hecho Sean colarte ahí y haber rodado esas escenas q son pura poesía!
Y claro q hay muchas Moonees, yo aqui las veo todo el rato, o una amiga mía q es profe de insituto las ve constantemente.. los q estamos en la "línea d frente" las vemos/ Y esta genial q Baker las haya presentado a los q trabajan en uan oficina o en un laboratorio.. Ojalá la vea mucha gente...
muxus
di