Aparte del Primero de Mayo, no hay día mejor para nacer que el Día de la República, como insiste en recordarnos anualmente Tiovin, lector del divlog muy en la sombra (solo cuando le llegan los divagues al email, me pregunto si hoy podrá abrir el enlace cuando se lo envíe, de la posibilidad que comente me olvido). Supongo que la razón por la que me ha costado todos estos años escribirle esto -es una de las personas con más anécdotas que conozco- es porque la mayoría no se pueden poner por escrito. El Tiovin ha aparecido lateralmente en muchos divagues, siempre envuelto en alguna actividad semi-delictiva, no hay más que buscar.
Mi tía asegura se enamoró de él "porque llevaba el pelo largo": o sea, era un hippie de los 70 con melena y bigote de motorista en toda regla. Las fotos de la época -que se empeña en poner en su perfil de whatsapp- no le hacen ningún favor, y así se lo digo. Él me ignora, creyendo que solo quiero fastidiar, cuando lo que intento es una labor social.
Todo tiene su explicación: Tiovin estuvo para cura en un seminario de Palencia durante su adolescencia. De aquí han salido innumerables historias que nos encantan, porque hay que admitir que Tiovin es un cuentacuentos espectacular: el frío que pasaban, detalles de la congregación (que he olvidado, me mata), su pasión por el latín y las humanidades, y "la investigación" sobre abuso sexual (años 60 en Ejpaña: yo imagino a Guillermo de Baskerville llegando a la abadía a investigar) en la que entrevistaron a todos los niños y resultó que "el cabrón" solo se había dejado un niño sin meter mano: Tiovin. Creo que aún no lo ha superado. También hay que oír cómo se arrepiente de no haber seguido con el sacerdocio: "sin ambición, con una parroquia pequeña me hubiera valido". Pobres feligresas.
Porque lo siguiente, por más increíble que pueda parecer, es cuánto liga Tiovin: es un misterio para todos, claro que para él "todas están buenas" (menos yo), su nivel es subterráneo (para muestra: para él estaba buena la reina de Inglaterra "de joven"). Y entonces cita a Hemingway, y es que el día que no ligue, para qué seguir. Olé tú.
Tiovin tiene algunas especialidades culinarias, nos asegura, claro que nosotros solo hemos probado el ajoarriero y el huevo frito con txistorra. Cuando va otra gente a su casa, por lo visto da cordero ("de la mar el mero...") o marmitako, pero no a los pobres Pedalistas. Eso sí, su sangría ("sandía") es legendaria: cómo olvidar esos toros en sanfermines en que preparó un cubo gigante que acarreamos por la ciudad. No cuenta como cooperación al abuso animal dado nuestro estado al entrar al triste espectáculo.
Hace mucho que no viene a Londinium, en concreto desde que nació Mini, tal vez se dio cuenta de que Londinium-la-nuit no iba a ser lo mismo. Cómo olvidar sus bailes y la noche de disco en Nottingham en la que por la evidencia gráfica parecíamos una banda de glam-rock (eran los late 90s).
Otro de sus puntos fuertes es la orientación. Todo el mundo sabe que sale hacia destino la noche anterior para que no sea evidente que se ha perdido -siempre se pierde, una vez hasta andando en el parque de enfrente de casa; llegó muy azorado- en su coche de "gama alta" que a veces nos ha dejado pero es un truco: hay luego que endeudarse para llenar ese depósito. Y la decoración navideña: todos los años recibimos imágenes de su parafernalia, que honestamente da miedo. Si algo trajo de positivo su divorcio es que en la mudanza se perdieron lo que él llamaba los "pendientes", unos colgajos de plástico con brillantina que pendían de un celo (no conoce el blue-tack).
Tiovin es un gran lector, primero de periódico y segundo de novelas. La pregunta ritual es: "¿Tiovin, qué comedia ligera estás leyendo?" No porque yo sea una snob, sino porque una vez leía "Una comedia ligera" de Eduardo Mendoza y ahí se abrió la veda. Aunque no en lecturas, sorprendentemente, coindicimos en ateísmo (qué mejor ateo q un ex) y en ideología (de él aprendí protocolo en la mesa: "el pan, como el corazón y las ideas, siempre a la izquierda"). De la política localista navarra - tema inagotable entre él y el Peda- me desentiendo.
Para terminar, de sus múltiples historias, mi favorita: su suegro (mi abuelo) no seguía los motes oficiales del pueblo, se inventaba otros enloquecidos que en principio solo conocíamos la familia. Un día mandaron al Tiovin a buscar algo a una huerta, tenía que encontrar al "Jabonero" (mote oficial) [conocido en casa, tras mi abuelo, como "La Abeja Maya"]. Tiovin llegó a las huertas y decidió pedir indicaciones (se había perdido, ya lo digo) a un hombre que recogía algo. Claramente liándose con los motes -y liándola parda-, le preguntó: "Buenas tardes, ¿está por aquí el mas de La Abeja Maya?". Y el hombre, impertérrito: "La Abeja Maya soy yo".
Muchas FELICIDADES TIOVIN: como me dices cada año "ya solo te quedan un par de años buenos". A disfrutarlo y que podamos pronto escuchar in situ las historias no-reproducibles, la de la Abeja Maya y el camisi...
siempre fue "words doncomisi tu mi" desde vetusta a cadiz
ResponderEliminarja ja ANONIMO... mi madre (visionaria) me llevó a clases de inglés desde los 8, así q a los 11 ya debía entender por lo menos la frase q nos cuentas (de hecho, creo q mi interés por este idioma se vio reforzado por la música- aunque recuerda lo difícil que era hacerse con letras en aquella época): mmmm casi empiezo a entender porqué Tiovin pensaba q era una niña repelente :):):)
ResponderEliminarHugs
di
Pero, POR FAVOR, ¿como no sabía yo estas cosas?
ResponderEliminarY esa foto...esa foto... no sé ni por dónde empezar a despellejar. Para empezar podría llamarse "party in Liverpool in the 70"¿Por qué todo era beige entonces? ¿y qué pasó con la raya al lado? ¿cuando pasó de moda? Madre mía, que testimonio.
ResponderEliminarMO, la foto está cropped, era una mina q te daba para despelleje completo: se veía mi túnica de monja de primera comunión, intuían las florecitas q sujetan la raya al lado y el beige... ese era el mismo, lol. Tengo tb la de su boda q es oro puro pero me he cortado pq sale demasiada gente :)
Ay darling, cuántos anios de blog nos quedan hasta q contemos todas las historias? (la sección "tengo un pasado oscuro" arde).
Beso
di
Que majo Tiovin, en mi casa siempre será el tío de las magdalenas. Y claro que sí, para la gente normal "doncomisi tu mi" es una canción mítica. Reírte del pobre tíovin demuestra lo repelente que eras, es un visionario.
ResponderEliminarBesitos
jajajajaj MARISA, se me habían olvidado sus viles trueques: ayuda con la tecnología ("se ha desconfigurado, yo no he hecho nada-o ese es mi padre?) por colacaos con las entonces baby-iratis. Me extrania q no os haya llamado hoy para ver cómo se comenta en esto de los blogs...
ResponderEliminarQué mal pronunciáis el ANONIMO de Cádiz y tú: por lo menos Tiovin, guiado por moi decia cAmisi no cOmisi... aj!
muxus maitea
di
Insuperable la foto, es que no puede ser más setentera. Coincido en preguntarme por qué todas las fotos de esa época son tan beige (yo tengo un montón de esas también). ¿Quizás todo era de ese color y no nos dábamos cuenta? Y los pelos. ¿Qué se ha hecho de toda aquella abundancia capilar? Ya sé. ya sé que a los que lucían pelambres en los setenta ahora ya casi no les queda pelo, pero me da que los jóvenes de ahora no tienen tanta abundancia capilar como antes. ¿Es solo una impresión senil? ¿Una curiosa mutación de la raza humana?
ResponderEliminarELENA, los hombres ya no son los de antes en cuanto a "melena leonina" (este sintagma es mucho de Tiovin) ppr selección natural: ya dicen q el ser humano del futuro no tendrá pelo (pero sí un "chis" inoculado en alguna pretendida pandemia). Se lo he dicho hoy a Mini repasando biología (no lo del chis) y ha alucinado. Que por cierto, al ver la foto q nos ocupa, su comentario ha sido: "mummy, el Tiovin parece el cascanueces!" NO puedo parar de reír... Tiovin, the nutcracker...
ResponderEliminarhttps://www.farmergows.co.uk/p/Nutcracker_blue_with_rifle/e19a94f20d5b4a2f91c8d17fbc3bbe69/9977e7b489dc4bfd967a61e8c145060d/
Besos
di