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03 agosto 2020

El encanto de las abadías abandonadas. Omnia Vanitas (Y3)

Lunes, 3 de Agosto de 2020


Cute!
Este fue uno de los mejores días de la semana yorkie. El plan era ir "de abadías", pero no nos imaginábamos lo que nos íbamos a encontrar. Además, sol!! Nota: sigo sin entender a la gente, como mi suegra, que les gustan los días grises (debe ser por Donosti), pero desde el punto de vista de fotos, si no hay luz, no hay color. Así que el peor día de la semana (el martes), lo fue porque no vimos un rayo de sol (oh-oh-oh). Nunca hubo una jornada sin una nube (o no sería Yorkshire), pero las nubes y claros son muy fotogénicas. 



Como todas las mañanas, salimos por la carreterita hacia el norte, obligadas fotos a vacas y otra fauna autóctona (somos peces de ciudad) y nuestra primera parada es un tal "Keldy castle". No está muy indicado y al entrar hay unas cabinas de madera de gran copetín: tejados que terminan en el suelo, y lo que no es madera, cristal. Nada que ver con los hórreos metálicos alienados de ayer. Al final hay un edifico de piedra, la recepción y otro, un restaurante. Parece que un muro a la derecha de la recepción es lo que queda del castillo. Castillo fantasma.

Envidia floral-Al llegar mi lavanda estaba seca
Seguimos hasta un pueblo llamado "Rosedale Abbey" (Abadía de Rosedale): esta vez, lo fantasma es la abadía. Nunca la tuvo, pero, hey, por qué ha eso de ser óbice para llamar a tu pueblo como quieras? Parece que fue centro minero en el SXIX porque se descubrió hierro, y se nota que es un pueblo donde hubo dinero. Esto es muy curioso en estos pueblos de los páramos: hay algunos donde ves casas de abolengo y otros donde se respira pobreza. En realidad, es así en todos los sitios, a mí siempre me choca en la península las diferencias regionales en las construcciones. Aquí visitamos la iglesia con su cementerio. En una puerta lateral hay una inscripción que reza "Omnia vanitas", que es algo muy apropiado tal vez para un cementerio, o tal vez me parezca a mí, que justo ahora estoy leyendo "Vanity Fair" de Thackeray. 
Todo es vanidad... pero todos acabaremos calvos
Y otro estereotipo inglés



















Cómo culpar al divagante por no seguir la ruta que llevamos en el mapa, pero les avanzo que estamos haciendo una "U" invertida y vamos hacia el sur, el siguiente pueblo "Hutton-le-hole". Este pueblo no engaña, no tiene castillo, ni abadía en su nombre, pero sí "hole", que es exactamente lo que tiene: un agujero con riachuelo que recorre el pueblo y es muy bonito, con su césped alrededor. Eso sí, ninguna posibilidad de dejar el coche que no sea un aparcamiento de pago. No es que me moleste pagar en el culo del mundo (que sí, también), pero para mí le quita parte de la magia de pensar que estás en un lugar semi-remoto. Es como pagar para entrar en un "parque natural" en Sudáfrica: me quieren decir que no soy una intrépida en llegar ahí? Ah, no, vale. 

Pero divago: es otro de esos pueblos de casitas encantadoras (según dice la guía "de piedra caliza y tejados de teja flamenca roja") y Mini lo pasa bien en el riachuelo, que hasta tiene cascaditas. Hay que considerar que a pobre Mini ha calificado este "el viaje más aburrido de su vida", porque no hemos hecho "cosas", esas actividades que le gustan tipo agobiar con nuestro peso a un caballo/camello, nadar continuamente, ir en quad y esas cosas. Así que terminamos el paseo metiéndonos por un bosquecillo y aventura mickymouse. 

perdices suicidas
Mini no estará precisamente de acuerdo, pero para nosotros es aquí es donde se empieza a animar el día: nuestro siguiente destino es Rievaulx Abbey. Verdaderamente apartada de todo, en el valle del río Rye, fue fundada por los monjes cistercienses de Clairvaux  en 1132. Se llega por una carretera donde  se cruzan perdices (o codornices?) suicidas- vimos muchos animales atropellados en este viaje (snif). Al final, llegas a un pueblo de cuatro casas y ahí, imponentes, están los restos de la abadía. Parece ser que ya está cerrada, así que no podemos acceder, pero el paseo que nos damos por fuera es suficiente. Además, tenemos una luz impresionante, hay caballos alrededor, y absolutamente nadie. La sensación de paz es maravillosa. 

Abadía de Rievaulx
Abadía integrada con el pueblo

Remoto, pero ahí tienen

 






Este es el único sitio en este viaje donde hemos encontrado uno de los míticos cottages con tejado de paja (thatched roof). Incluyo las fotos porque no solo a mí me encantan, sé que al mundo también...



Ahora sale la bruja de Hansel y Gretel





Ye Olde England del imaginario colectivo

En éxtasis con esta abadía, nos dirigimos a otra, pero antes paramos en un pueblo de mercado (market village), Helmsley. Aparte de sus consabidas casitas tudor (algunas con vistas al cementerio), iglesia de torre de cuatro puntas, riachuelo, y otros sospechoso habituales, este pueblo tiene "El cisne negro", un hotel que data del SXV, y a cuyo jardín entramos a tomar el té (oh yeah, proper british), bien pasadas las 5 .

"Aquella casa al lado del cementerio"

Por fuera parece solo un edificio Tudor más. En su día fue una herrería, y luego una "coaching inn" (lo que Tarantino llamaría "una mercería" para quienes hayan visto "Los odiosos ocho", una de esas tabernas para las carretas a caballo de la época). Me quedé con ganas de explorarlo por dentro, con sus "creaking" pasillos, pero covid manda. De hecho, lo elegimos por su jardín que resultó ser uno de los momentos más agradables del viaje. Rodeado por la iglesia por un lado, y casitas y muros, y lleno a rebosar de flores es el mejor sitio para repostar a media tarde antes del siguiente destino (espíritu de guía turística, sal de mí!). Bajemos a la realidad: solo tomé té yo, porque Mini cola-cao y el Peda un café, y comimos un siempre fabuloso scone y un lemon drizzle. Además, el lugar se acogía a la oferta del gobierno de "Eat out to help out"-de lunes a miércoles, si comes fuera te descuentan £10 por persona, que no lo aplicaron porque si no, habríamos salido con dinero, pero creo que nos cobraron la mitad. 

Jardín interior del Black Swan

Nuestro último destino es Byland Abbey, otro monasterio cisterciense fundado en 1177. Contenía la que fue la mayor iglesia del país con 100 ms de largo y 40 ms en los cruceros. Parece que inspiró la famosa "Rose window" de la catedral de York, lo que fue el rosetón se ve claramente. Ya es última hora de la tarde y no hay nadie. Además, aquí se puede entrar libremente y es precioso caminar sobre el césped, con los 100 metros de pasillo frente a ti, lo que debió ser el altar al final. Hacemos muchísima fotos jugando con el atardecer, y Mini escala por los muros. 


El no-rosetón

Vista desde "el altar"
d'auteur


Byland de lejos

Ya es tan tarde que no podemos seguir hasta Sutton Bank , donde está el famoso caballo blanco calizo y grandes vistas, así que volvemos hacia Pickering que aún nos queda un rato. Luego leo que había "cuestas empinadísimas", loado sea, Mr Renno. Hoy ha sido uno de esos días de viaje redondo-no todos son así, como sabemos-: naturaleza, arte, buen tiempo, lovely tacita de té y volvemos con los mismos calcetines -secos- que hemos salido. 






6 comentarios:

  1. Oh, Di-crónicas, qué bien!
    Nunca llueve si tienes calcetines de repuesto y solo si llueve piso la baldosa que salpica, cada vez que salgo de casa!
    Ondo izan!
    Nati

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  2. Uy, me han encantado las abadías, me han dado ganas de hacer ese viaje, de abadía en abadía y tiro porque me toca. A Mini todos los viajes son lo "más algo", acuérdate que el de Marruecos le horrorizó... está atravesando esa edad en que cualquier otro sitio o lugar es mejor que aquel en el que está.

    Yo estoy a muerte con tu suegra, los días grises son preciosos.

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  3. Muy románticas estas ruinas de abadías. Si en ruinas son así, imagínate cómo serian en su momento de esplendor. ¡Lástima de cismas religiosos! En esta ruta os habéis superado: no solo volvisteis secos a casa, sino que la parte gastronómica parece hasta normal.
    Mis hijos también protestaban muchísimo en los viajes, pero no hay que hacer caso, con el tiempo están encantados de haberlos hecho. Recuerdo con horror un viaje por la Toscana con mis hijos de 13 y 15 años, que nos amargaron a conciencia. Hoy, quince años más tarde, tienen la jeta de decir que fue "el mejor viaje que hemos hecho". Para matarlos.

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  4. Hola my ladies,

    NATI, qué ilu verte... sobre tu teoría, yo la tengo extendida a diversos complementos: por ej, si se me olvidan las gafas de sol, sale solazo, o si llevo mucha ropa, calor. Esto será confirmado el martes y el miércoles (cada día por lo contrario). Muxus polita.

    Jaja, sí es muy MO-suegra-Peda-gente raruna lo de los días grises. Los de vetusta es q estamos acostumbrados a esos cielos azules de invierno. Os veo mucho a MO y a ELENA haciendo el viaje de las abadías. Fijaos q igual voy a decir un anatema, pero me encantan derruidas, es mucho más romántico q completas y ademas, nunca serían tan remotas pq atraerían a más gente, se habría desarrollado una ciudad a su alrededor etc. Me gustan así, y hay montones.

    Totalm q Mini no hace más q quejarse de todos los viajes, y luego siempre acaba como vuestros hijos reconociendo q le encantan (menos marruecos, de ahí no se baja, con lo q nos gustó a nosotros). Como la repelente inglesa q es dice q le "parece inapropiado para una ninia, las cosas q tuvo q ver". Ah y me olvidé de decir q cuando empacamos, su aportación al viaje fueron... TRES ABANICOS!!! Cuando sea una seniora inglesa, darlings, este blog se convertirá en reportar sus excentricidades, como una tesis de Nancy cualquiera.

    Luv

    di

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  5. Cuánta belleza, me ha encantado.

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