Como casi todo el mundo que acabe por aquí-pero quien sabe, extraños son los caminos de Internet-, asisto con estupor al espectáculo de un mundo cada vez más guiado por los bajos sentimientos, por las tripas, por la superstición. No interesa la razón, el cerebro, la ciencia, la verdad, o por lo menos al última verdad vigente. Desde el principio de este blog, hemos divagado sobre la ciencia como el camino para entender-nos y también al mundo que nos rodea. Es un camino del que nunca veremos el final, y por el que avanzamos a trompicones: lo que hoy parece cierto podrá ser probado erróneo y superado dentro de unos años, pero es lo menos malo que tenemos aquí y ahora para explicar el problema que sea. Y claro, recordemos el tótem "la ausencia de evidencia no es lo mismo que la evidencia de ausencia", en temas que podrían ser potencialmente respondidos usando el método científico (no, el unicornio azul no cuenta, ni existe, despierten). Igual no hemos encontrado la fórmula, el neurotransmisor, el virus, loquesea, que explique algo, pero.
También hemos divagado aquí sobre las pseudociencias-el psiconálisis, por ejemplo. La semana pasada aún de vacaciones la divaganta Marisa me llevó a una librería genial llamada Katakrak, donde me perdí un rato por las estanterías hasta encontrar a Antonucci, un médico italiano que en "El prejuicio psiquiátrico", que hojeé un rato, da caña a la psiquiatría. Una vez más, me planteo cómo incluso dentro de las disciplinas científicas, hay distintos niveles. Un físico teórico mira por encima a las ciencias sociales. Con razón, y suma y sigue.
Total que, a dónde voy? (esto es un divague en el más puro estilo): resulta que el otro día escuchaba un podcast de Juan Luis Arsuaga, el paleontólogo conocido por su trabajo en Atapuerca. Hablaba de las grandes preguntas que nos hacemos los humanos, y entonces yo me planteé si la filosofía, que había comenzado intentando explicar algunas de las grandes preguntas que hoy ha contestado la ciencia, ocuparía algún lugar en el futuro, ya que la ciencia avanza a grandes pasos. Ojalá, pensé, porque una lee los periódicos y se le cae el alma a los pies.
Tomé alguna nota de lo que decía Arsuaga. Y eso que anoté está aquí abajo. Si hay algún@ aventurer@ ahí fuera, es una lectura tal vez básica para algunos, pero hoy muy necesaria. Sobre todo para aquellos que nunca caerán en este blog, o en los podcasts de Arsuaga. Que no caerá en este blog, pero de todas maneras le digo gracias!
Salud divagantes!
La pregunta "por qué estamos aquí los seres humanos" nos define como especie, los animales no se la hacen. No tiene sentido preguntarse por la utilidad de esta pregunta, pero es inherente a los humanos. Cómo la responde la metafísica, la religión, la ciencia?
También hemos divagado aquí sobre las pseudociencias-el psiconálisis, por ejemplo. La semana pasada aún de vacaciones la divaganta Marisa me llevó a una librería genial llamada Katakrak, donde me perdí un rato por las estanterías hasta encontrar a Antonucci, un médico italiano que en "El prejuicio psiquiátrico", que hojeé un rato, da caña a la psiquiatría. Una vez más, me planteo cómo incluso dentro de las disciplinas científicas, hay distintos niveles. Un físico teórico mira por encima a las ciencias sociales. Con razón, y suma y sigue.
Total que, a dónde voy? (esto es un divague en el más puro estilo): resulta que el otro día escuchaba un podcast de Juan Luis Arsuaga, el paleontólogo conocido por su trabajo en Atapuerca. Hablaba de las grandes preguntas que nos hacemos los humanos, y entonces yo me planteé si la filosofía, que había comenzado intentando explicar algunas de las grandes preguntas que hoy ha contestado la ciencia, ocuparía algún lugar en el futuro, ya que la ciencia avanza a grandes pasos. Ojalá, pensé, porque una lee los periódicos y se le cae el alma a los pies.
Tomé alguna nota de lo que decía Arsuaga. Y eso que anoté está aquí abajo. Si hay algún@ aventurer@ ahí fuera, es una lectura tal vez básica para algunos, pero hoy muy necesaria. Sobre todo para aquellos que nunca caerán en este blog, o en los podcasts de Arsuaga. Que no caerá en este blog, pero de todas maneras le digo gracias!
Salud divagantes!
~~~~
La pregunta "por qué estamos aquí los seres humanos" nos define como especie, los animales no se la hacen. No tiene sentido preguntarse por la utilidad de esta pregunta, pero es inherente a los humanos. Cómo la responde la metafísica, la religión, la ciencia?
- Un metafísico la formularía preguntándose por el sentido de la existencia del universo y por el lugar que el ser humano ocupa en ese universo. La metafísica está más allá de la ciencia pero muy cerca. Es la rama de la filosofía que estudia la naturaleza, estructura, componentes y principios fundamentales de la realidad. Esto incluye la clarificación e investigación de algunas de las nociones fundamentales con las que entendemos el mundo, como entidad, ser, existencia, objeto, propiedad, relación, causalidad, tiempo y espacio. Antes del advenimiento de la ciencia moderna, muchos de los problemas que hoy pertenecen a las ciencias naturales eran estudiados por la metafísica bajo el título de "filosofía natural". Pero el universo no tiene sentido ni propósito. En el universo hay varios tipos de materia: la materia inanimada (el mundo mineral) y la material viviente, dentro del cual hay materia pensante/consciente (los seres humanos, los únicos). Pero nunca fue el propósito del universo crear unos seres que reflexionen sobre su lugar, no es un fin o un objetivo del universo, que, una vez más, no tiene objetivo ni propósito.
- La religión formularía la pregunta en términos de "para qué" estamos aquí, no porqué. Para la religión somos el resultado de un plan cósmico, y quiere establecer qué lugar ocupamos en el plan cósmico. Todo lo contrario: hay sentido y lo lleva todo un ser superior.
- Sin embargo, la ciencia no se plantearía la pregunta en ninguna de esos términos. Primero, la pregunta sobre el sentido nunca se la haría un científico, porque los científicos estudian cómo es el mundo, no se preguntan qué sentido tienen las leyes de la naturaleza ni el sentido de las cosas. La ciencia no atribuye propósitos a la naturaleza. Segundo, la ciencia no explica las cosas en términos de causas finales, de intención o voluntad. La ciencia formularía la pregunta de "por qué estamos aquí" como "cual era la probabilidad" de que estemos aquí: somos el producto del azar (la lotería cósmica, ya que el margen de la vida es muy estrecho, una serie de condiciones muy precisa tuvieron que ocurrir para la vida) o era inevitable que esto ocurriera? [Aquellos sucesos que se repiten mucho probablemente son inevitables. Si pensamos en nuestra cultura, la escritura, la base de la civilización moderna tenía que parecer necesariamente (por ej, a los incas, que estaban muy avanzados, pero eran ágrafos: les faltaban 100 años para desarrollar la escritura)].
Para que una pregunta puede ser científica, tiene que ser contestable, es decir, partir de hechos. Puede no ser contestada inmediatamente, pero puede ser concebible que algún día se pueda contestar en base a los hechos, al mundo material. Las preguntas incontestables no son científicas. Por ejemplo la siguiente es una pregunta científica:
Hay vida en el universo?
La pregunta de si la vida está extendida en el universo no tiene nada de metafísico, se podrá un día contestar: solo tenemos que acceder a la atmósfera de otros planetas para constatarlo. Dicen que en diez años lo habremos logrado, remotamente. El agua y el carbono, las bases de la vida, existen en el universo. Analizando las atmósferas de los 4000 planetas que conocemos sabremos si hay planetas con oxigeno en su atmósfera. Cuando, junto con el oxígeno, se dan una serie de circunstancias favorables -un planeta que esté en la "zona de habitabilidad"-inevitablemente se producirá vida. Entonces, si el universo está lleno de vida, la contestación a por qué estamos aquí será "porque es inevitable, la vida es una propiedad general del universo".
Definición de vida
Los seres humano sabemos identificar la vida, pero es difícil definirla. No es único: tenemos muchas ideas para las que tenemos palabras pero es difícil de definir (amor, dolor). Karl Popper decía que la vida es "resolver problemas". Los minerales, y los muertos no tienen problemas, pero el ser vivo es una sucesión de problemas hasta alcanzar la entropía.
Qué es la entropía
El segundo principio de la termodinámica dice que "todo sistema tiende hacia la des-organización y el frío". El balance final de la vida es el caos y el frío. El universo también tiene hacia el caos y el frío, hacia un aumento de la entropía.
El ser vivo es un sistema organizado, caliente, con múltiples sistemas, órganos que funcionan, etc. Esto lo consigue extrayendo del exterior información, materia, y energía. Desorganizando lo de fuera para organizar lo de dentro. Nos alimentamos de orden, creando desorden fuera.
Como hemos dicho, para que exista la vida, las leyes/fuerzas de la materia tienen que ser exactamente las que son, no se pueden desviar nada. Si las leyes de la física no fueran las que son ahora, no hay margen para la variación, la vida no sería posible. Uno se plantea si nos ha tocado una lotería, una pequeña variación habría cambiado totalmente.
Teniendo en cuenta este estrecho margen que hace posible la vida, el principio entrópico nos puede dar dos respuestas:
1. nos ha tocado la lotería, este es el único universo que existe y nos ha tocado a nosotros o
2. la teoría del multiverso: hay muchos universos paralelos, y nosotros vivimos en el universo que permite la vida. Nosotros solo nos podemos mover en este, y esta es la parte no científica de esta teoría: cómo podremos saber si existen el resto, si no podremos acceder a ellos.
Espacio/tiempo
Antes del (la creación) universo, no había ni espacio ni tiempo. No había nada. Había la nada.
Esto es difícil de imaginar porque nuestro cerebro/imaginación tiene los limites de la vida práctica. Nuestro cerebro está hecho para sobrevivir en la sabana africana. Ni siquiera fue seleccionado para estudiar matemáticas/física, pero como es un cerebro con capacidad simbólica, consiguió llevar a cabo estas tareas. O sea, nuestra imaginación para la vida práctica, logró formular conceptos matemáticamente (pero el medio es importante, por ej, los romanos lo tenían muy difícil para desarrollar mucho las matemáticas con esos números).
Fuera del universo tampoco hay espacio ni tiempo. No hay "fuera" del universo. La idea newtoniama es que el universo se expande en el espacio, dentro de un espacio pre-existente infinito no es real porque más allá del universo en expansión no hay nada. Es la expansión del universo la que produce el espacio y el tiempo.
Si pensamos en multiversos, salieron de la nada, y pueden los distintos universos estar apareciendo y desapareciendo constantemente. Esto es porque la nada es inestable, dicen los físicos cuánticos. Aseguran que una fluctuación cuántica podría producir un universo de la nada.
Pufff, yo hoy me pregunto:
ResponderEliminar-¿Por que vuelvo a trabajar?
-¿Por qué sigo viviendo en Madrid?
-¿A qué estoy esperando para irme a vivir a Los Molinos?
ja ja MO... son tus preguntas científicas? filosófico-existenciales? retóricas?
ResponderEliminarYo por ej en una reunión me he preguntado
-Por qué siempre hablan los mismos y por qué se empenian en tener reuniones? (donde nada se produce ni se llega a ninguna conclusión)
y
-Por qué los ingleses comen pavo para xmas? Hoy una colega me ha contado una larga historia de los pavos agotados para Navidad, y cuando le he dicho q en Ejpein no comemos pavo me ha dicho q no le extrania, q el pavo es horrible?
y
-Por qué aún no se ha quemado ninguna iglesia y ya ha pasado un día de gobierno "Sodoma y Gomorra" q he leído por ahí q tenéis?
Y más cosas :)
love
di