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30 mayo 2016

El bloguero depresivo lee "The depressed person" de David Foster Wallace (1)

"The depressed person" es el tercer o cuarto relato-el bloguero depresivo no se puede acordar-del libro de David Foster Wallace, "Brief interviews with hideous men" ("Breves entrevistas con hombres horribles". El bloguero deprimido no se acuerda exactamente cómo el libro llegó a sus manos, pero, como buen depresivo, es atacado por un NAT (Negative Automatic Thought/Pensamiento Automático Negativo) en lugar de por un buen recuerdo. Así, en lugar de pensar que este libro se lo regalaron en su trabajo companieros que le aprecian y respetan por su claridad de ideas y generosidad con el equipo, el bloguero depresivo lo que piensa es que no se terminó "Infinite Jest" ("La broma infinita"), del mismo autor, libro que disfrutó enormemente y que puso a un lado por "su dificultad en lo portable", pero que claro que lo retomaría y vencería, cuando tuviera un momento en el que la portabilidad no fuera un issue. Pero como la claridad de pensamiento no es su punto álgido en este momento (más bien el débil: un observador exterior le podría decir lo liado, enredado y enrevesado que están sus ideas), el bloguero depresivo se centra en que IJ le derrotó, luego es una más de su lista de derrotas, luego él es un derrotado, incluso un perdedor, o sea un mierda. 

El bloguero depresivo comienza el libro pero le cuesta infinito (en otro momento habría pensado que este adjetivo era muy pertinente y homenaje a DFW, pero ahora simplemente le parece una palabra manida, aburrida, agotada, un plagio a DFW, o incluso a Shakespeare-el bloguero deprimido aún recuerda que IJ es un sintagma del bardo), porque no puede concentrarse. El bloguero depresivo lee un párrafo y enseguida se encuentra en su pensamiento circular que lleva a un pozo de mierda, y cuando se fuerza de vuelta- desvariaba universos más allá- a la página, entonces ya es hora de nosequé. Nosequé que empieza con la mente todavía en el pozo de mierda y que termina en una habitación de la casa sin saber en concreto qué hace ahí. 

Pero el bloguero depresivo logra avanzar con los tres o cuatro (quien sabe si cinco) primeros relatos del libro haciendo esfuerzos casi sobrehumanos porque el bloguero depresivo, en su marania de ensimismaciones, tiene claro una cosa, una sola cosa que es Verdad. Que si deja de leer está muerto, porque es lo último que le queda que le hace él. Escribir ya lo dejó hace meses, horas frente a la pantalla en blanco, pero leer es la última frontera: si deja de leer el escaso beep de la máquina de soporte artificial se irá continuo, beeeeeeeeeep, y él morirá ya del todo, como siente que ha ido haciendo durante los últimos meses. 

Lo ha intentado todo, empezando por el deporte. Pero para eso hay que tener fe, y el bloguero depresivo sigue siendo el mismo escéptico de siempre, solo que ahora irritable, el hombre más cabreado a este lado del río. Si fuera mujer dirían que amargada, pero siempre ha habido clases, y géneros. Ha probado la behavioural activation (que consiste en hacer más de lo que te gusta, para que esto te haga sentir mejor, eleve tu autoestima, y voilá, bandejas de perdices), pero es una droga de vida media muy corta: si el bloguero deprimido entra en la mágica oscuridad de un cine, durante esos 90 minutos, como el personaje de Woody Allen en el final de "Hannah y sus hermanas" viendo "Sopa de ganso" o "Una noche en la ópera" (el bloguero deprimido no recuerda), puede llegar a creer que la risa que le cosquillea detrás del esternón es algo más, tiene mayor significado, es él. Y al salir de la sala, en contraposición con lo que le pasa a Woody, que se da cuenta gracias a esa risa que debe de dejar de preocuparse por sus neuroris de salud y lo que importa es el carpe diem, el vive el momento, al bloguero deprimido lo que le pasa es que el carpe diem que era su motto vital se ha transformado en "a la mierda", una frase que le dijo un escritor o director o (el bloguero deprimido no recuerda) a alguien en alguna tele y se transformó en un meme.

Sabe que "La persona depresiva" es un relato que tal vez le toque mucho, hasta en su estado patético de cansancio extremo, pese al cual no consigue dormir, el bloguero deprimido se da cuenta, en una lucidez que dura un par, quizás tres nanosegundos exactamente a las 2:54 am, que tal vez leer sobre una persona deprimida (o es depresiva) igual no le haga bien. Como no le han hecho todos esos libros de autoayuda que le ha subrayado su hermana, con puntos sobre lo que tiene que hacer. Pero el bloguero deprimido ya sabe que DFW no es autoayuda, si eso autodestrucción, así que se aproxima no con cautela, sino prácticamente como un suicida. 

La primera frase del relato le da un tortazo que, verderamente necesitaba -el bloguero deprimido se da cuenta que, afortunadamente dejó su blog pero, de haberlo escrito, cualquier lector hubiera sentido ganas de abofetearle-, y la frase dice así: 

"The depressed person was in a terrible and unceasing emotional pain, 
and the impossibility of sharing or articulating this pain was itself 
a component and a contributing factor in its essential horror".

Continuará...

43 comentarios:

  1. "si deja de leer está muerto, porque es lo último que le queda que le hace él. "

    Yo sabía que si dejaba de leer me moriría.... lo sabía. Era la última frontera antes de hundirme del todo y sobreviví.

    La frase de DFW es tal cual, empiezas a estar un poco mejor o, mejor dicho, un poco menos mal cuando a todo el mundo le dices "tengo una depresión y me quiero morir". En castellano no puedes decir "estoy deprimido" porque es una frase que ha perdido todo su significado y la gente la usa igual si pierde su equipo que si no logra adelgazar 3 kilos.

    Besos al bloguero deprimido.

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  2. Hace tiempo que no pasaba por aquí, no he mirado el histórico. ¿Por qué no escribes -relatos cortos, novelas, algo completo y consistente- en lugar de hablar sobre lo que escriben otros? Comentar, reseñar, criticar... libros me parece cómodo comparado con escribir algo propio, donde uno queda retratado y definido. Y disculpa la intromisión.
    Un saludo

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  3. Gracias MO... a mi personaje, "el bloguero deprimido", le afecta su estado a la concentración. Si la pasión de uno es la lectura/escritura/algo q requiera concentración, la depresión es doblemente cruel porque, cómo vas a hacer las cosas q amas si no PUEDES físicamente?

    Hola JL, gracias por tus ideas y para nada intromisión. "El bloguero deprimido" te contestaría lo siguiente: alguna gente opina q los críticos de cualquier disciplina son autores de esa disciplina frutrados. Luego, si uno es mediocre, lo q hace es crítica de lo q hacen otros.

    Yo te contentaría lo siguiente, q ya he dicho muchas otras veces: yo escribo para mí, esto es un diario. Así q si leo un libro q me gusta, o una peli, o un cuadro, lo escribo para mí, para q no se me olvide. Si incidentalmente hay una persona q pasa por ahí y le interesa (por ej, una de las entradas más visitadas es mi review de "Bella del Senior" la novela de ALbert Cohen-entiendo perfectamente q la gente q la haya leído busque lo q otros han pensado de ella), pues bien para ellos y bien para mí si me comentan y así yo tb puedo ver otra visión de lo q sea, q me da el q me comenta. Pero ese no es el objetivo.

    Me preocupa, sin embargo, q me inites a q escriba "algo propio", porque incluso en las críticas (q no son ni de lejos lo más frecuente de este blog) hay mucho de mí. Fíjate q a menudo me reprocho q mis reviews son demasiado narcisistas, q no hablan d ela novela o a peli así en neutro, sino q estoy yo y mi momento muy reflajados en ella.

    Pero además, es q escribiendo ficción no quedas "definido y retratado" de la manera q creo implicas tú. Es ficción y por ello un error pensar q los relatos son siempre en primera persona. Claro q escribimos desde la vida vivida en primera persona pero también la vida vivida vicariamente, leída, etc. ASí q puedo escribir sobre un bloguero deprimido, con una seniora de la alta sociedad vasca q le manda paquetes a un cura en Chile, o una ejecutiva de origenes de clase trabajaora q impulsa a una subordinada de su mismo origen... ninguno de estos personajes tienen porqué tener q ver nada conmigo.

    Hay blogs de relatos, de fotos, de cortos. Este no es uno de esos y lo es: a veces lo es. Otras no. Lo q espero q sea siempre es PROPIO y las antípodas de "cómodo".

    Un abrazo

    di

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    1. Y te la he agradecido JL. Lo mío era solo una respuesta a tu sugerencia...

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  4. Querida Di:

    Quizá el mayor temor del deprimido sea ser depresivo. Sea como fuere, sólo el tiempo responderá cabalmente a eso: ¿se es, se está? Al respecto, y aunque parezca que no viene a cuento: ¿son fiables las personas que nunca han sufrido? ¿Por qué el precio, el elevado precio, de la lucidez pasa con tanta frecuencia por el sufrimiento?

    Por otra parte, yo no leería The Depressed Person ni de broma. No digo yo si fuese él (tu amigo bloguero), que también, digo yo siendo yo. Hace años sí lo hubiese hecho (de hecho lo hacía; toda nostalgie de la boue me atraía como buen adolescente), pero a partir de cierta edad… No, ya no. No quiero. En la ficción busco alegría y brillo; en la vida lo que ésta me traiga. Y es que, quizá, la alegría sea una conquista mientras que la paz un don. Hagamos, pues, lo que está a nuestra mano.

    En cuanto a no acabar un libro… Yo cada vez lo practico más, la verdad. Antes era incapaz, pero ahora le he cogido gustillo. Algunos se me caen de las manos por ladrillazos, otros porque sí, injustificadamente. No le demos más vueltas. O sí, mejorémoslo: aplazo el deleite, ¡practico la lectura tántrica! Juas, y me fumo un puro.

    Respecto del ¡¡A la mierda!!, y aunque sé que tu amigo dice no recordar al autor por puro fastidio por este tipo de coletillas, recomiendo otra mejor: el ¡¡No lo sé!!. Lo siento, pero a mí estas cosas me hacen gracia. Cojones, en 0.2 de sonrisita a zarpazo. Y me viene la imagen de un canoso oso amoroso que, de repente, torna impetuoso, furioso… ¡Y la caga ante la impertinente prensa! Glorioso.

    Por último, y en perfecta orgía sentimental, me uno a los besos de Molinos con abrazos a tu ¿ficticio? amigo bloguero, que también desde ahora es mi nuestro (siempre y cuando no haya mucho mariconeo en esta espontánea y afectiva melé, ojo. Ojito).

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    1. Meditando, he llegado a la conclusión de que Fernando Fernán Fer F… se sobresalta a sí mismo con el ¡¡No lo sé!! (obsérvese que la periodista retira al instante la alcachofa por si Fernando le arrea un bocao, pero también como él mismo huye con ojos de miedecito por lo que acaba de pasar, no vaya a ser que se autolesione o algo).

      En fin, ya lo dejo.

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  5. Querido Lux, gracias por tu comentario... me he reído. Me gusta lo q dices de q la "lucidez pasa con frecuencia por el sufrimiento", es tan verdad y tan bonita.. parece una frase célebre!! Como la de la "alegría es una conquista, la paz un don"... pero en lo q no estoy de acuerdo (o sea, me parece perfecto q otros lo hagan, yo no) es lo de evitarnos obras (literatura, cine, etc) difíciles, q carezcan de alegría... dónde queda aquella otra (ya q vamos de máximas) de "la ciencia traqnuiliza, el arte disturba"? Un poco de disturbe nos puede llevar a esa lucidez, también.

    Y no me quiero olvidar: este relato es devastador (escribire más sobre él maniana) pero a la vez divertidísimo como lo es DFW. Yo me he reído mucho, aunque era risa amarga, ene l divague explicare porqué.

    "El bloguero depresivo" es un personaje... q como yo, no ha terminado Infinite Jest, pero así son lso perosnajes, tienen cosas nuestras y otras q no. En este caso he querido usar esa voz para escirbir sobre un relato de depresión. Pero me encantan y me quedo colgada en vuestros abrazos.

    muxus

    di

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  6. El bloguero depresivo entró en la librería para adquirir cincuenta ejemplares del libro recomendado.
    Su tarjeta de crédito tenía un límite, una capacidad máxima, así que sólo pudo comprar veinticinco.
    Una bolsa ?
    No, mejor dos, así reparto mejor el peso, no sea que me escoñe las manos.
    ...
    Avanzó por la ciudad con su pesada carga, sin saber qué destino le depararía el ídem.
    ...
    Entró en el hospital como cada día y se dirigió a la sala de espera del pabellón donde su hija estaba ingresada.
    Los restos del naufragio estaban sobre la playa de la Seguridad Social.
    Padres que habían traído a chavales a este mundo, y que ahora estaban deprimidos, cabreados o simplemente hasta las mismísimas.
    ...
    A las cinco y media empezaba la hora de visita.
    Las chicas del pabellón de trastornos de alimentación salían en pijama al corredor, disfrutando de su media hora de libertad diaria.
    Carne de cañón, el puto precio de la industria de la moda, que con su talla 34 engordaba la cuenta de resultados a base de destrozar la vida a unas niñas.
    ...
    El bloguero depresivo lo tenía clarito.
    Sacó de las bolsas los veinticinco ejemplares y los fue repartiendo a las mozas.
    Luego abrió el ventanal del final del pasillo.
    Trazó una línea roja en el suelo y empezó la competición.
    ...
    (Continuará ... )

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  7. Yo no tengo en tan alta estima leer si no se comparte, ni escribir si no se da a leer a alguien. Cuando era adolescente sí era capaz de llenar páginas para después romperlas, ahora no le veo el sentido a centrar la comunicación en la soledad. De hecho una soledad tan terrible como la de no tener nadie que pueda entender lo que lees o escribe me llena de angustia, porque la he vivido.

    Quiero deciros que estoy ausente por un motivo muy duro, la enfermedad de mi madre, desde principios de año. La estoy perdiendo, al mismo tiempo que estoy aprendiendo a acompañarla sin preguntar ni enfadarme con el proceso de la muerte. Se muere. Yo sólo soy un pequeño apoyo. El dolor vendrá después, me figuro, ahora estoy muy fría, si no, no podría estar ahí.
    Un beso a todos los que habeis compartido conmigo más de una ronda de comentarios enlazados.

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  9. Iré,escribo desde el hospital.
    Mi hija ha vuelto a ser ingresada por anorexia.
    Te remito un abrazo tan intenso, cálido y sincero, como mis palabras son capaces de transmitir.
    Y sí, pienso armarla en el hospital con las niñas. Es mi destino.
    Arrancar una sonrisa al dolor.
    Es una buena opcion.

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  10. ¡Jo, Ire! ¡Qué pena la tuya! ¡Cuánto lo siento!...
    Yo creo que soy inmune a la depresión, pero no a la desesperación. Noto lo de la desesperación cuando se me caen los libros de las manos. Cuando, como ahora, estoy permanentemente furiosa y no soy amiga de nadie. Cuando noto unos irrefrenables deseos de morir matando. (¡Menos mal que soy cristiana! de lo contrario seguro que me veíais aparecer en la prensa en plan..."Sucesos: pueblecito con marco incomparable. En la mañana de ayer una mujer enloquecida se presentó en las dependecias del marco incomparable con una escopeta de cañones recortados y disparó en repetidas ocasiones contra varios directivos de dicha institución. La asaltante fué abatida por la Guardia Civil, no sin antes dejar malheridos a varios Números de la Benemerita que bla, bla, bla..." Pues eso: Cocinar, limpiar y ver tele, cocinar, limpiar y ver tele...hasta que se me pase la furia...

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  11. Se va una unos días y el mundo se da la vuelta como un calcetín.
    Iba a comentar sobre ese amigo imaginario/alter ego/ ente invasor/ que parece ser el bloguero depresivo al que nada deja contento del todo.
    Pero prefiero mandar un beso a Ire y otro a CS. Perder una madre, perder un proyecto vital, son jodiendas de las que cuesta salir. Algunos dirán que se sale más fuerte, que de todo se aprende, pero hostias, menudo precio a pagar. Así que muchos besos para las dos.
    Y un saludo al resto de blogueros y blogueras depresivas o no.

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  12. joooder, ¡Cómo está el patio!

    Bloguero Depresivo, Driver, Ire, C.S.

    Yo, en cambio, estoy estupendamente, con mis 68 recién cumpliditos. La verdad es que no le pido mucho a la vida. De muertes, hace 56 de la de mi padre y 15 menos de la de mi madre. Como dicen los analistas de la bolsa cuando hay una catástrofe financiera pero se estaba esperando desde hacía semanas, “el efecto ya estaba descontado”.

    Brief interviews with hideous men es el único libro de DFW que me dejó mal sabor de boca... hay tanta gente horrible.

    Caminamos hacia el fin del mundo. Lo dice DeLillo en la primera frase de su último libro: “Todo el mundo quiere apropiarse del fin del mundo”. Ese fin lo da por descontado, así que se centra en quienes se apropian de él para medrar, no para impedirlo.

    Lo que quiero ahora es gritar un ¡Hip, hip, hurra! por David Foster Wallace (nótese que para este caso no uso las iniciales). En un caso semejante de entrega de la vida por La Causa, a un guardia civil lo habrían enterrado con la bandera y una condecoración encima, pero de DWF casi nadie lo comenta. Para su depresión congénita, y la decisión de dejar de fumar maría, había conseguido un cóctel pastillero que le mantenía en plena forma. Pero por primera vez en muchísimos años, las pastillas empezaban a interferir en su escritura. Así que eligió y dejó de tomar las pastillas. Nos dio así un par de libos excelentes y, cuando no pudo más, se suicidó.

    Mi agradecimiento por esos dos libros será eterno (hasta el final de mi mundo).

    Para todos: esto que ha escrito la Di es un relato. Sólo me lo creería si hubiera puesto ESTO ES UNA PUTA FICCIÓN. Es lo que dicen siempre los escritores que creen que en el fondo se están contando a sí mismos. Y no lo ha dicho así de claro.

    Besos a todos. El que tenga cuitas y me quiera escribir, ya sabe.

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    1. ¡NáN, felicidades! Y que sepas que apenas te tenemos en cuenta que nacieras el mismo año que Rita Barberá, de verdad. Eso sí, la coincidencia con Mayra Gómez Kemp harías bien en explicarlo. Más que nada por despejar dudas, callar bocas y dejar en su sitio a los de siempre.

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  13. Hola mis queridos, que nos vamos unos días, os lleno el blog de divagues largos perdida por templos y nos recuperamos así...

    Lo primero, mil abrazos para IRE y para DRIVER. Poco puedo decir tras la sabiduría del divagante LUX, q parece q es él quien se ha ido a Japón y ha vuelto espiritual, en lugar de moi. DRIVER, cual es el libro de 25 copias? Miraré el video cuando pueda, pero estoy contigo en q el mundo de la así llamada "moda" tendría q hacérselo mirar.

    A CESUCHI decirle q espero el corto q filmará Snoid titulado "UN día de furia, by Cesita". Yo también me siento así... claro q otra opción si el dire acepta, podría ser "Cesilta y Di" (otra versión de huída hacia adelnate violenta, esta vez ocn las dos, y Lux podría hacer de Brad, q dice, pese a su paz interior, necesitar tb un arma).

    A MARISA y NAN, razonables, les mando un abrazonte: a Marisa por mandar a escaparrear al "se sale más fuerte" (no queremos salir ni ser fuertes!) y a Nan por recordarnos q vamos a mil hacia el abismo y q DFW es genial. A mí el libro no me está-de momento-dejando esa amargura q describe Nan: el relato del deepresivo me parece de lo mejor q he leído últimamente. Pero quedan muchos relatos.

    Os mando más abrazos q nunca

    di

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  14. Luxito, en la guardería Mayra estaba muy apartada y sacaba malas notas, ¡todo eran calabazas! (una mujer y un destino). Pero Rita era la caña. A la salida comprábamos helados y ella decía que lo pusieran en la cuenta de la profe.

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  15. Un abrazo a todos.

    Cesuchi y Driver, muchas fuerzas.

    Lux, no disimules, eres espiritual sevillano :). Gracias por tu testimonio.

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  16. Adcfyi Lux !
    Fgrty cytr ghyu, así que quieres que acabe el cuento, gkuy kefc !
    Cuantito me fuelten los segudatas del hospital dijo.
    Jodido describir con las napias !

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  17. Driver, llévate la tablet al hospital, que con el móvil no aciertas, chico :).

    Driver y yo hemos hablado más de una vez de la anorexia. Yo pienso que la fuerza que saca a alguien de la misma, viene de dentro, que es algo a lo que una persona tiene que aprender a llegar porque está en ella misma, y el medio que se pone desde fuera es el amor para transmitirle la fuerza, la calma y la aceptación de que uno mismo tiene fuerzas para enfrentar la vida, y sus cambios, si renuncia a mostrar ante los demás lo que cree que los demás esperan ver.
    Esto es terriblemente difícil durante la adolescencia, y más para las niñas que se hacen mujeres, queremos ser queridas, queremos encontrar el amor, queremos que nos miren con admiración...las mujeres somos gregarias, tendemos a identificarnos con una forma de pensar y a tener mucho miedo a la soledad.

    Para tu hija, la persona a la que más le deseo fuerza en este momento, es un camino muy duro de aprendizaje. Pero la fuerza la tiene dentro, se trata de aprender a aceptarla, y a aceptar el rechazo de mucha gente, se trata de aprender a aceptar el llevar el peso de tu propia vida.

    Tiene la mayor de las ayudas. Vuestro amor.
    Pocas veces hablaré así, Driver.

    Muchas fuerzas a vosotros que la estais ayudando en tantos momentos duros. no debería ser así. No deberían haber tantos mensajes de cosificación del cuerpo, sobre todo de las adolescentes. Pero en este mundo que es lo que es, tu hija aprenderá a salir de este enredo. Fuerza en el camino.

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  18. El bloguero depresivo abrió el ventanal del final del pasillo, trazó una línea roja en el suelo y la competición se inició.
    La primera fue la chica chinita. Mil millones de habitantes en su país y ninguno la quería. Tuvo que venir una pareja de Cuenca para adoptarla. Y sin quererlo ni beberlo se vio envuelta en una bulimia nerviosa del carajo.
    Lo peor de oriente y de occidente había caído sobre Hu Min, así que decidió estar callada durante dos meses.
    Le di el libro, le explique el juego y ella que es mas lista que los ratones coloraos lo pilló a la primera.
    Cogió carrerilla, llegó a la línea roja y arrojó el ejemplar de autoayuda por la ventana.
    Fiuuuuuuuuuuu !
    Comprobado, los libros de autoayuda no planean.
    Caen a plomo desde el segundo piso del hospital y aterrizan como pueden sobre las camelias en flor.
    Y la niña pudo por fin decir sus primeras palabras.
    A tomar por saco !

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  19. Un beso enorme a Cesita, a Driver y a Ire.

    Cesita no se es inmune a la depresión, como no se es inmune a la apendicitis o a romperte un brazo...pero si estás cabreada con el mundo eso es bueno. La depresión no te deja fuerzas ni para respirar...y menos para estar cabreado.

    Sobre la fuerza interior para sobrellevar las cosas sinceramnete creo que está sobrevalorada y creer en eso no lleva más que a frustrarse y hablo por mi experiencia. Las cosas no se sobrellevan, se sufren hasta que se pasan.

    Es así de jodido. Todo.

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  20. La segunda competidora se merecía una oportunidad.
    Y dos y tres.
    Diagnosticada como anoréxica nerviosa su caso era para inflar a hostias a alguien.
    Un primo que había abusado de ella, una familia encubridora y un bloguero depresivo que estaba pelín para allá.
    Demasiado para tener quince años.
    Así que agarró su ejemplar, y tras coger carrerilla por el pasillo lo arrojó por el ventanal.
    Comprobado. El manual de autoayuda no planea ni de coña. Aterrizó de canto sobre el parabrisas del deportivo del coordinador de planificación familiar.
    Las palabras exactas de la chica fueron : Iros al infierno, cabroncetes.
    ...
    Tal cual.

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  21. La tercera competidora era un cielo de mujer.
    Con doce años era toda sonrisa.
    Dulce como una magdalena.
    ...
    No sólo arrojó el libro por la ventana, sino que fue capaz de hacerlo de forma amable.
    Primero miró hacia abajo para comprobar que no le daba a alguien en la cocorota, y luego lo dejó caer suavemente.
    Un cielo de mujer.
    Tuve que besarla varias veces en señal de agradecimiento.
    Qué menos !

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  22. La fuerza interior no es más q aceptar lo q te va trayendo la vida, Mo, no creer q eres Rambo. No creer q vas a poder con todo.
    Yo he sido anoréxica, Mo
    En esto, estoy hablando de mi.

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  23. Así, uno tras otro, los veinticinco ejemplares de manuales de autoayuda que no servían para nada,fueron arrojados al vacío mientras las chicas saltaban alborotadas.
    Los seguratas tardaron dos minutos en subir a la segunda planta y reducirle.
    Y un minuto mas en hacerme abandonar las instalaciones de forma taxativa.
    ...
    Pero estaba escrito.
    Hasta el mas largo de los viajes comienza con un primer paso.
    Y aquellas veinticinco chavalinas lo acababan de dar.
    ...
    Y el bloguero depresivo sintió que sí.
    Que aquellos veinticinco ejemplares, por fin, habían sido útiles.

    La sonrisa de las chicas daba fe.

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  24. Ire, entonces estoy de acuerdo...

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  25. Este cuento está dedicado
    a Ire y a todas las mujeres del mundo capaces de abrir una ventana y tirar por ella aquello que no es justo.
    Aquello que en un momento de sus vidas les sobra.

    Atentamente. Driver.

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  27. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  28. Disculpa Di el zarangollo que he organizado, pero escribir en un movil, mientras discutes con los seguratas y pones una denuncia a los padres de la segunda niña, es pelín complicado.
    Y a veces, la vida y los cuentos se mezclan.
    Y claro, sale un desparrame esférico.
    Porque la vida es un maravilloso follón del carajo.

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  29. Mucho ánimo a todos.

    Espero impaciente la continuación de esta historia.
    Yo leí IJ en ebook, lo que facilitó bastante las cosas. Creo que el libro en papel hay que transportarlo en una carretilla.

    Espero que el bloguero del cuento vuelva a escribir. Siempre he creído que el alma bloguera es como ese personaje de Oscar Wilde, que llevaba siempre su diario encima para tener algo interesante que leer.

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  30. Pues a mí el texto me ha gustado mucho, me ha parecido que el tono y la voz iban perfectas y que conseguía transmitir muchas cosas.

    De los comentarios, solo suscribir y repartir abrazos varios.

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  31. ¡Buff, Driver! No se me ocurre cómo un libro de autoayuda puede hacer que a alguen le entren ganas de comer. Suelen ser más bien estragantes. El bloguero hizo bien tirándolos por la ventana. ¡Ánimo a tí y a tus chicas!
    A los demás, gracias por vuestro apoyo. Lux, estate atento al silbidito. Y prometo leer a DFW en cuanto se me pase la pájara. ¡Soys legión y de confianza los que os chifla!

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  32. Para explicarlo, yo fui anoréxica en mi adolescencia. Claro q le he dado muchas vueltas a como y por que me pasó.
    El por qué era porque quería ser aceptada, porque tenía un miedo enorme a la soledad y al rechazo. Quería sentirme protegida ante la inmensidad q puede traer la vida, q adivinaba pero no había vivido.
    Me costó mucho aceptar esa inmensidad como parte de la vida.
    Hombre, todavía sigo fracasando en aceptar muchas cosas, o sea q con 17años lo q hice fue tan sólo a rirme a unas pocas opciones, una de ellas salir con un chico y arriesgarme a romper, cosa q me aterraba.Claro q rompimos, el caso es q di ese paso, y más, aparte de comer.
    Para mi, en muchos casos la anorexia tiene q ver con un afán de controlar los sucesos de tu vida, y mucha necesidad de protección.
    Esa es .i experiencia, y a es me refiero yo con el concepto fuerza interior, a la aceptación de la imposibilidad de evadir el riesgo.

    Luego, por supuesto q no soy inmune ni al dolor, ni a la depresión, ni a la frustración. No hablaba de eso en mi idea de fuerza interior, en fin, tal vez algún Lama consiga esa inmunidad, yo no ��.

    Un beso, Mo. Muchas gracias x tu apoyo. Si, duele mucho y estoy de acuerdo en q se sufre.

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  33. Fuerza, ànimo... poco màs que decir, más bien leer lo que acá se dijo y "escuchar" a los demàs el momento por el que estàn pasando. Un beso, a todos.

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