![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
Si no las escribo, las cosas no han llegado a término, solo las he vivido (A Ernaux) La vida real no está a la altura de escribir sobre ella (J Eugenides) Lo que me interesan son los errores, fruto de la pasión, los errores que se cometen arriesgando (G Steiner) En la calle, codo a codo, somos mucho más que dos (M Benedetti) Escribir es persuadir a un extraño de que se quede (R Cusk) El camino del exceso conduce a la sabiduría (W Blake)
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
"Había playas negras, hechas de pizarras y mármoles pulverizados, donde el sol ponía regueros de chispas; playas amarillas, de tornadiza pendiente, donde cada flujo dejaba la huella de su arabesco, en un constante alisar para volver a dibujar; playas blancas, tan blancas, tan esplendorosamente blancas que alguna arena, en ellas, se hubiese pintado como mancha, porque eran vastos cementerios de conchas rotas, rodadas, entrechocadas, trituradas —reducidas a tan fino polvo que se escapaban de las manos como un agua inasible".
"Al Tiempo de los Árboles de la Libertad había sucedido el Tiempo de los Patíbulos. Hubo un momento impreciso, indeterminable, pero tremendo, en que se operó un trueque de almas; quien la víspera fuese manso, amaneció terrible; quien no había pasado de la retórica verbal empezó a firmar sentencias. Y se llegó al Gran Vértigo —vértigo tanto más incomprensible, al ser evocado, cuando se pensaba en el lugar donde se había suscitado: precisamente donde pareciera que la civilización hubiese hallado su equilibrio supremo; en el país de las serenas arquitecturas, de la naturaleza amansada, de las artesanías incomparables; donde el idioma mismo parecía hecho para ajustarse a la medida del verso clásico. Ningún pueblo podía ser más ajeno a una escenografía de cadalso que el pueblo francés".
"Dos días transcurrieron en hablar de revoluciones, asombrándose Sofía de lo apasionante que le resultaba el nuevo tema de conversación. Hablar de revoluciones, imaginar revoluciones, situarse mentalmente en el seno de una revolución, es hacerse un poco dueño del mundo. Quienes hablan de una revolución se ven llevados a hacerla. Es tan evidente que tal o cual privilegio debe ser abolido, que se procede a abolirlo; es tan cierto que tal opresión es odiosa, que se dictan medidas contra ella; es tan claro que tal personaje es un miserable, que se le condena a muerte por unanimidad. Y, una vez saneado el terreno, se procede a edificar la Ciudad del Futuro".
"una mañana, en el medio sueño de su incipiente noche";
"un crepúsculo invertido que se llenaba de maitines y pregones"
"puesto en el patio, el reloj de sol se había transformado en reloj de luna, marcando invertidas las horas"
«Hemos rebasado las épocas religiosas y metafísicas; entramos ahora en la época de la ciencia.» «La estratificación del mundo en clases carece de sentido.» «Hay que privar al interés mercantil del horroroso poder de desatar las guerras.» «La humanidad está dividida en dos clases: los opresores y los oprimidos. La costumbre, la necesidad y la falta de ocios impiden a la mayoría de los oprimidos darse cuenta de su condición: la guerra civil estalla cuando la sienten.» Los términos de libertad, felicidad, igualdad, dignidad humana, regresaban continuamente en aquella atropellada exposición, justificando la inminencia de un Gran Incendio que Esteban, esta noche, aceptaba como una purificación necesaria; como un Apocalipsis que estaba radiante de presenciar cuanto antes, para iniciar su vida de hombre en un mundo nuevo.
![]() |
Robert Sapolsky |
![]() |
Más coincidencias: ante no tener fotos, siempre van bien los geranios,me digo. Pues bien, qué peli anuncia el bus que pasa de fondo? Respuesta al fin del divague |
![]() |
Evidente: "28 years later" |
El otro día escribí la parte más dura de "Determined" de Robert Sapolsky, y hoy pensaba terminar con la parte divertida, la que debates con tus amigos en una cena. Pero, ay, como siempre, todo me parecía apasionante y me he alargado. Con lo cual, habrá tercera (y prometo, última) parte.
Voy a incluir un ejemplo que da Sapolsky para ilustrar las "tortugas en acción" (hay que leer el principio del divague anterior para entender esta metáfora). Imaginemos dos de sus alumnos en su oficina teniendo el debate del libre albedrío. Uno de ellos quiere demostrarle que está equivocado, que el libre albedrío existe, y para ello va, y coge un boli. "Voilá, lo acabo de decidir". Por supuesto, aquí se habla siempre de la media, de lo más frecuente, pero Sapolsky se lanza a especular que es más probable que el que dice eso no haya comido aún, que no durmiera bien la noche anterior, que sea hombre (si la otra es mujer), y que sea hetero si quiere impresionarla. Que sea extrovertido. Que tenga los andrógenos elevados. Es más probable que sea de una familia acaudalada que lleva generaciones yendo a la universidad (un alumno de clase trabajadora que es primera generación en la uni es menos probable). Y si es emigrante, es más probable que sus padres decidieron emigrar por razones económicas vs. refugiados. Más probable que haya retado al catedrático si viene de una cultura individualista vs. colectivista. Y así con muchísimos factores que nos hacen nosotras. Espero que con este ejemplo se entienda mejor lo de "son tortugas todo hasta abajo".
Si se piensa que lo de ayer fue un mazacote, solo anotar que se me debería agradecer que no me he metido en otros capítulos de la primera parte en los que explica la "teoría del caos", la "complejidad emergente" y la "indeterminación cuántica". Bueno, menos medallas: confieso que me hubiera sido imposible porque no he podido con ellos. Mi mente ya no da -el hecho de que hiciera física en COU es un ejemplo vivo de cómo el/mi cerebro degenera, porque no me veo capaz de estudiar esa asignatura de nuevo. El no haber entendido esos conceptos no me ha impedido seguir con la segunda parte, pero si alguien está interesado, he enlazado las referencias.
Todo el mundo acepta que el color de los ojos, del pelo, etc, es algo biológico, es algo que la ciencia nos ha enseñado que es así y que se transmite asá. Sin embargo, nuestro carácter, nuestra resiliencia, nuestra motivación, nuestra fuerza de voluntad... esto sin embargo es algo mágico que unos llaman "alma" y otros superego. Nunca llegaremos a predecir nuestro comportamiento al 100%, pero mientras escribo esto se está descubriendo un nuevo gen que actúa sobre el cerebro que da un poquito de luz sobre el tema.
Pero, que una sociedad aceptara que no tenemos libre albedrío podría tener terribles consecuencias, ¿no? Esto es lo que vamos a ver a partir de ahora: ¿Será esto una bacanal constante? ¿No podremos castigar a los que antes eran "los malos"? ¿Nadie reconocerá todo lo que he ganado "con el sudor de mi frente"? ¿Seré lo mismo que esos pobres, que lo son por vagos?
Como digo, pensaba hoy cubrir todo pero me he quedado solo en la primera pregunta:
Si todo el mundo pasamos a creer que no somos responsables de nuestros actos porque no existe el libre albedrío, ¿se irá la sociedad a la porra porque todo el mundo actuará como enloquecido?
En primer lugar, la mayoría de los estudios no han podido demostrar que la gente se vuelve menos ética una vez que asume que no hay libre albedrío. Y un metanálisis (que es un estudio de estudios, en este caso incluyó 145) de 2022 probó justo esto. Como vale, igual no hay grandes cantidades de estudios sobre este tema, vamos a ver qué pasa -en esto hay muchísimos- cuando la gente deja de creer en Dios.
![]() |
Yo esto no lo sabía, pero la invención de Dios para comportarnos éticamente no viene de tiempos inmemoriales. El Dios que juzga, castiga, el de la moralina que nos es familiar es un invento relativamente reciente. Los cazadores-recolectores tenían dioses a los que hacían sacrificios, que tal vez aspiraban a responder por qué ahí cayó un rayo, pero estos dioses no estaban interesados en que fueran "buenos los unos con los otros". Los dioses moralistas no comenzaron hasta que la gente empezó a agruparse en poblaciones más grandes, donde no todo el mundo se conocía (porque "ser malo" enseguida te pasaba factura en una comunidad pequeña donde terminabas con mala reputación), luego se necesitaban un par de ojos celestiales para controlar al personal.
Ejercicio: dime si la protagonista de este caso era responsable de sus actos (o sea, tenía libre albedrío)
En 2018, una mujer con un diagnóstico de epilepsia estaba conduciendo en Brooklyn. Trágicamente, tuvo una crisis convulsiva tónico-clónica que le hizo perder el control al volante y mató a dos niños, dejando a sus dos madres y a otros heridos. Fue acusada de homicidio y, ocho meses después, mientras esperaba su juicio en la cárcel, se suicidó. Qué injusto, pensará el divagante: esa mujer no era responsable de sus actos, tenía una enfermedad. ¿Por qué homicidio?
Donde Sapolsky nos lleva es a un lugar incómodo: si pensabas que es injusto que se condene a epilépticos por una convulsión, ¿qué piensas de la que condujo en contra del consejo médico? Igual aún crees en la magia, en que esa mujer, de la nada, un día se miró a los ojos en el espejo y decidió no tomar la medicación, luego para ti es culpable.
Hemos estado ahí antes
El desconocimiento llena sus vacíos con lo que sea, y la historia de la medicina está llena de ejemplos en los que se buscaban respuestas culpando a los enfermos (bueno, no hace falta irse a la medicina, las tormentas eran dioses enfadados). Hoy vamos a terminar con ejemplos de enfermedades neurológicas y del neurodesarrollo que fueron interpretadas de manera enloquecida, y cómo se movió la sociedad hasta aceptarlas en lo que eran: la epilepsia, la esquizofrenia, el autismo.... y el síndrome de estrés postraumático de regalo.
>>Causas
>>¿Qué pasa en el cerebro de estos enfermos?
O sea, la esquizofrenia es una enfermedad de "aberrant salience", o sea, algo está terriblemente mal en las cosas que se le presentan como importantes a esa persona durante el día. Esto también se refleja en las alucinaciones: la mayor parte de nuestro pensamiento es verbal, cuando pensamos “nos vamos contando cosas”, pero las personas con esquizofrenia le dan preponderancia a ese discurso y "lo oyen". Espectacular que personas sordas de nacimiento con esquizofrenia cuando alucinan lo hacen visualmente viendo lenguaje de signos.
(*) Ah, y obviamente, la medicación que ayuda con los síntomas de esquizofrenia es aquella que bloquea los receptores de dopamina, porque necesitas bajarla. Y esto es de cajón: si tomas medicación que sube drásticamente la dopamina como las anfetas, terminarás con un episodio psicótico. En la enfermedad de Parkinson, lo que tenemos es lo contrario: poca dopamina en determinadas áreas del cerebro, así que la medicación que se les da es L-Dopa, para que suba la dopamina. Y si tratas el Parkinson con demasiada L-Dopa, aumentas el riesgo de psicosis, claro. Y lo mismo con la esquizofrenia: si te pasas con los bloqueadores de dopamina, desarrollarán síntomas parkinsonianos. En serio, hay algo más biológico que el que haya pacientes que responden a medicación así? Mejor echarlos en el diván a culpar a su madre, claro.
>>Macroscopia
También hay cambios estructurales en los cerebros de las personas con esquizofrenia: la corteza cerebral es anormalmente delgada, sobre todo en el córtex frontal donde hay pérdida de dendritas y axones (los "cables") que comunican las neuronas. Por eso suele aparecer en la adolescencia o principio de la edad adulta, ya que es la época en la que está ocurriendo la mayor parte del cableado en el lóbulo frontal, como venimos explicando.
>>Corolario
Aunque no lo he hecho con la epilepsia, he entrado en detalles con la esquizofrenia porque me encanta meterme con los psicoanalistas… no, va... para que se entienda que es una enfermedad, con base biológica. Esto no va de demonios ni de madres que lo generan. Gracias a la investigación, hemos logrado quitar la culpa a un esquizofrénico que tristemente hace algo malo. Y ahora vamos al último ejemplo…
Síndrome del espectro autista