Si no las escribo, las cosas no han llegado a término, solo las he vivido (A Ernaux) La vida real no está a la altura de escribir sobre ella (J Eugenides) Lo que me interesan son los errores, fruto de la pasión, los errores que se cometen arriesgando (G Steiner) En la calle, codo a codo, somos mucho más que dos (M Benedetti) Escribir es persuadir a un extraño de que se quede (R Cusk) El camino del exceso conduce a la sabiduría (W Blake)
:)
ResponderEliminarQue precioso todo.
Que envidia.
Saludos.
Bonitas fotos.
ResponderEliminarHáblanos de cómo sonaba.
ResponderEliminar¡Qué bonito! ¿Dónde estuviste?
ResponderEliminarToro, fue un viaje relámpago. Salir por la mañana y volver por el mediodía. Lo bueno, si breve, dos veces bueno...
ResponderEliminarNáN,
ResponderEliminarSonaba a cencerros, a perros que ladraban a desconocidos, a un coche que pasaba por una carretera lejana, al cruir del hielo al pisar los charcos, a un acento particular, a palabras como mohina, chónega...
Doctora,
ResponderEliminarEl pirineo Aragonés. Un valle remoto sin explotar que sólo conocemos unos pocos afortunados.
Mmmmm! Sonidos discontinuos en el silencio helado.
ResponderEliminarMe gusta.
De mayor voy a ser monje en un sitio frío, solitario y de silencios interrumpidos.
Gracias Courageous.
ResponderEliminarLa que más me gusta es la de la carretera casi cubierta de hojas.
ResponderEliminarHola José Luis,
ResponderEliminarTe comento.
La primera me gusta porque era un hombre que estaba taladrando la montaña para poner unas redes. Taladraba con las piernas! lo juro y se ve tan poquita cosa al lado de la majestuosidad de la montaña...
La segunda, me gusto por el camino que marcan las balas de hierba en contraposición al "desorden" natural que le rodea.
La tercera (la que te gusta a tí), es un poco típica. Eso me parece a mi que la fotografío siempre que voy. Es una carretera vieja, olvidada por la que no pasa nadie porque todos usan la nueva. Sin embargo a mi me encanta por lo cerrada que es. Hace un mes hubiera sido espectacular.
La de la vaca. Además de ser un ejemplar de limousina muy bonito, me gusto la actitud del ternerito que asoma por detrás, sin fiarse de mi.
La última, me recuerda a los pueblos con los que adornamos el Belén.
Qué monada esa ternera que asoma detrás de su madre.
ResponderEliminarTodas las fotografías que has puesto parecen encontradas, más que buscadas, lo digo como elogio, incluso las de paisajes, aunque, en parte, sabías lo que te ibas a encontrar.
ResponderEliminar¿Qué programa usas para editar las fotografías?
Gracias Claudia!!! A mi también me lo pareció...
ResponderEliminarJosé Luis,
ResponderEliminarEstán hechas con una canon EOS 400 D y las pasé a mi ordenador de la oficina que es un mac, asíq ue usé el iphoto... Nada profesional... todo está en la mano de la artista.... ;·)
Yo creo que la semana que viene me escapo para allá...a ver si hay suerte
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