Ayer divagábamos con Mo y con Ire sobre el concepto "hace 20 años" (o incluso 30!). Para mí, que si no lo pienso me sigo viendo como una quinceañera que no ha asumido que "la vida adulta era esto", decir, por ejemplo, "hace 30 años que fui a las Cíes" me da vértigo. Hasta ahora, no me ha importado cumplir años: tal vez porque no los siento.
Y entonces, el otro día vi este video, que intenta llamar la atención sobre los derechos humanos de los ancianos: muchas veces estamos tan preocupados por la protección del menor que no se nos ocurre, quién protege a muchos mayores? Para quien no entienda inglés, el video casi no tiene palabras, pero al principio el protagonista está en una residencia donde el personal no se acuerda ni de su nombre. Al final del video, hay un bebé al que le preguntan, con una voz toda ilusión y alegría: "Cómo te llamas? Me llamo Charles".
Tenéis que verlo para entender por qué me emocionó. Y, aunque distinto, imposible no tener flashbacks de aquella secuencia de "Up"...
Qué breve, qué cierto y qué bien contado.
ResponderEliminar(Y me has hecho volver a ver la secuencia de Up y me sigue impresionando como el primer día)
Sería lo suyo gritar la consigna "todos somos Charles", pero no. Ni de coña nos ponemos en la piel de los ancianos. Pero lo que si que es cierto es que todos seremos Charles y el que no llegue peor (o mejor según se mire) para el.
ResponderEliminarLos que llegan a esa edad con "posibles" no han de preocuparse por la atención que tengan pero si por el trato.El trato que se da a los ancianos no se puede pagar con nada. La paciencia no es una virtud demasiado extendida.
Los olvidados que llegan a ancianos olvidados seguirán siendo y seguirán soñando con que alguna vez el destino les sacará de esa situación y podrán ir echando en cara a los demás la vida de abandono que han llevado.
No hay que preocuparse porque la vida es bella y si un día te das cuenta de que no es así: no te derrumbes, no sepas lo que pasa ni lo que ocurre. No se de qué me suena esto.
Gracias apreciada Dtora por la cruda realidad.
Bueno, mirando a la cara a la pregunta, hablemos de los derechos que tenemos que darles a los ancianos, y hablemos de otra cosa, que no son derechos de por si, sino de trato. El problema es que despreciamos mucho los modales, muchos ancianos son el último baluarte de estos modales, las generaciones del medio los perdemos porque pensamos que son afectados y las generaciones más jóvenes apenas tienen ocasión de verlos en práctica. Pero es que esos modales, que eran el fruto de una sociedad más tranquila, eran una buena manera de mosrar respeto y por tanto obligar al que los tiene a plantearse que está tratando con personas.
ResponderEliminarPero vuelvo a los ancianos...los viejos. Tenemos que enseñar a los niños que no son un continente aparte y no cayeron en el mundo así. Que os parece obvio?...será que no habeis probado a crecer en una casa en la que no se habla de nada...y vereis el millón de cosas que no son obvias...
En fin, la vivienda es otro punto que me asusta. La semana pasada murió uan viejecita de 81 años a la que le cortaron la luz porque se prendió la casa con una de las velas que usaba para alumbrarse o calentarse...
a mi la secuencia de up me cabrea, no lo puedo evitar, me pongo siempre en la piel de ella...pero eso es otra historia...
¿Cómo no recordar la secuencia de "Up"?
ResponderEliminar¡Uf! A veces me olvidó lo deslizante que es la memoria; que, teniendo 53 recién cumplidos, tengo ya el cerebro como un queso (fundido y lleno de agujeros) y que he olvidado, por ejemplo, el nombre del niño ahogado en aquella playa, que juré que no olvidaría nunca.
Lo único que intento es hacer algo yo; no decirle nada a los demás. Mi contribución pasa por saludar a Antonio en su paseo diario, que balbucea por el parkinson, que casi no puede salir, pero sale y dice que "bi-bi-bi-bien" cuando le pregunto qué tal le va.
No sé...
Hace treinta años...dentro de treinta años...que van a pasar como un soplo, por los menos tan rápido como los treinta anterioires...Aunque sea por egoísmo habrá que hacer algo para no acabar metidos en un desván sin nombre
ResponderEliminarEste tema me ha tocado siempre mucho. Pero la preocupación se oficializó cuando devoré todos los relatos del noruego Kjell Askildsen, mayoritariamente sobre viejos. No ha escrito mucho y recomendaría dos: Últimas notas de Thomas F. para la humanidad y Los perros de Tesalónica. Estos dos son de obligada lectura: todo el entramado intelectual de la situación de la ancianidad lo aprendes ahí. Después, como dice Alberto, conocedores de esas profundidades necesitamos empatía. En el barrio tengo amigos de todas las edades, pero doy prioridad a los viejos. En la calle, cuando me encuentro con alguno de mis amigos viejos, siempre me paró con él o ella tres o cuatro minutos. Necesitan contar las pequeñas cosas que les han pasado... que para ellos, lógicamente, son enormes. Necesitan notar que se les tiene cariño (y eso no se puede simular: lo tienes o no lo tienes).
ResponderEliminarMe tengo muy pateado el tema (y una situación especial, dolorosa y que me impedía, hasta antesdeayer, dormir más de dos horas en períodos de de 10 minutos, llevaba con terror mi pensamiento no a la vejez, sino a mi compañera y yo como viejos... Al fin y al cabo, no me planteo como Cesita que 30 años no son nada: la situación se me aproxima a velocidad de crucero. 30 años es una fecha en la que ya tendría que haber desaparecido. El problema es más corto en su recorrido... y la preocupación es la enfermedad, el dolor y la incapacitación para hacer las cosas más comunes.
Pero lo de los Derechos Humanos de los viejos, no sé. Es necesario, desde luego, para que la Política tenga en cuenta la situación y actúe en consecuencia... claro que eso nos descarga de la responsabilidad personal: ¡El Estado se encarga, o debería encargarse, de facilitar sus situaciones vitales! Está rebién, por supuesto. Pero puede hacer que las personas individuales sientan que no tienen necesidad de actuar personalmente en favor de otros seres humanos. Y si como personas no empatizamos con las situaciones malas de otras personas, mal vamos. (Que estoy convencido de que vamos realmente mal).
Prefiero no extenderme más allá de este punto.
(Que mi situación ha mejorado lo prueba que haya podido leer el post y escribir este tocho. Durante 4 semanas eso me resultaba imposible. Así que no perdáis el tiempo en preocuparos por quien ya va, veloz, hacia una vida tan buena como la de siempre).
Pierdo el tiempo en alegrarme, Nán :).
ResponderEliminarLa alegría nos-me hace mucha falta, así que si te he dado un motivo soy yo el que me alegro doblemente.
EliminarDarlings.. el catarro ha evolucionado a muy chungo... ayer en al cama a las 730 pm, plena congestión y cabeza como un bombo... hileras de pañuelos....
ResponderEliminarCositas: cómo es esto del divagar! no por el forro pensaba q esto iba a dar para q "los no regulars" (Alberto) coemntaran! ALberto-yo tb tengo el cerebro fundido.. de repente, es q no me acuerdo de nada! es muy fuerte, sobre todo con lso nombres... La semana pasada, con el amigo J. del q divagué, es q le decía "jo, yo de esto escribí ene l blog y no me acuerdo!" (link de Goldfinger con arquitectura brutalista). Menos mal, blog! De viejita lo tendre q llevar siemrpe encima para recordar mi vida?
Sobre la secuencia de UP, REVE: lloras? A mí me da igual als veces q la vea: siempre. IRE, cuéntanos porqué te cabrea por ella? Hay algo q la Vigilancia Feminista se ha perdido? A mi me parece triste y preciosa la historia a la vez, y lloro de alegría a la vez que de pena. De alegría por ver esa relación enternecedora, d epena por el tema de la fertilidad, y el de los sueños no cumplidos, pq "spr hay algo" q lo impide. El "carpe diem" se hace imposible pq la vida se cruza... nunca es el momento adecuado para las aventuras, siemplemente hay q hacerlas, es mi aprendizaje...
JOTA, fíjate q pensé titular el divague "Todos somos Charles", como dices. Todo seremos Charles, pero tal como esta el panorama, yo creo q nosotros ya nos tocara "el old trip to Switzerland"
CESI, sobre lode "habra q hacer algo", a mi se me ocurre vivir en comunas de ancianos.. no residencias... algo así como el Marigold Hotel...
NAN!!!! Bienvenido al mundod e los q domrimos echados!!!! De verdad q sé lo q es tener q domrir medio sentado y es odioso... mil gracias pro las refernecias q nos das... los miraré.. con lo q se refieren en el vido con derechos humanos es a ciertos básicos, pq tras haber leído sobre abusos a los mayores, estos están muy extendidos, parece, pro lso menos ene l UK. Por los ninios todo el mundo lo sabe y son vistos como lo q son: vulnerables etc. Pero los ancianos no... me contaba mi madre q llegó a casa llorando pq se encontraron con unos conocidos cuya madre ha tenido una embolia y está dependiente y dijeron, enfrente de la madre: "mira que lotería nos ha tocado". Pobre mujer. Algunos empatizamos, otros no. Es así.
muxusss!
di
Exacto, Di. Nunca es el momento adecuado, lo estoy aprendiendo a base de tortazos y me aplico la letra...carpe diem!. Pero...ella era una ratita llena de energía que transformó al sosaina del prota con la fuerza de su sueño y energía, que le sobraba, pero a la escena siguiente es una casadita que ahorra y mira con añoranza. No me cuadra. No es alerta feminista exactamente, es alerta a este personaje me lo han dejado más aplastado que un calcetín. La esterilidad...qué hubiera hecho esa preadolescente?, no encogerse de hombros, hubiera rabiado o hubiera buscado un sueño alternativo.
ResponderEliminartodo lo demás de acuerdo. Pero dónde está la energía que desbordaba esa ratita con los dientes saltones y los pelos disparatados?