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11 octubre 2022

"Sula" de Toni Morrison y la ambivalencia por un personaje

No es un patio andaluz(ya quisiera),
es mi balconete en el corazón de la pérfida

El padre de Toni Morrison, la única autora negra que ha ganado el Nobel de literatura (1993), no dejaba entrar a blancos en su casa de Ohio. Sus razones eran distintas de las que los blancos, que no se mezclaban con los negros por aquello tan viejo de que tu grupo mantenga sus derechos a costa del otro. El padre de Morrison había vivido desde niño la representación de ese supremacismo blanco en su cara. Miremos el nivel de racismo de la sociedad actual; imaginemos el racismo en la época que nació Toni Morrison, 1931.

No había leído nada de Morrison, aunque sí a otras autores negras: Zadie Smith, Chimamanda Ngozi Adichie, Kiley Reid, e incluso algún tío, Paul Beatty, pero tengo terribles lagunas. Noto con estupor que cuando fui a Sudáfrica me compré cuatro libros y ninguno de ellos era por autor@ negr@. Mini se está leyendo ahora en el cole "Things fall apart", el clásico de Chinua Achebe, que igual le debería coger cuando termine. Hasta aquí mi Mea Culpa - más acusado si cabe porque acabo de empezar a dos tíos blancos americanos, Palahniuk y Franzen, dos típicos "wokes" que no van a retar mi mundo en absoluto, pero no todo va a ser un valle de lágrimas.

Hablando de retos: "Sula". Esta es la segunda novela de Morrison, publicada en 1973, cuyo tema de la contratapa no me podría atraer más: "la amistad de dos niñas". Cuánto nos gustan estas novelas que nos llevan a esa época en la que tu amiga (estupenda) era lo más importante del mundo. Hablando de amigas estupendas, por supuesto me estoy refiriendo a la primera de Elena Ferrante del mismo título divagada aquí. En ella Lenú y Lila se pierden por las calles de Nápoles, y yo me pierdo en el divague y acabo hablando de otra novela de amistad, la maravillosa "Nubosidad variable" de Carmen Martín Gaite. No recuerdo quién era quien, pero o bien Lenú o Lila era muy especial: indómita, nada convencional, libérrima. Este tropo se repite en "Sula", porque ella, Sula, es también ese personaje.

Vais a salir hasta ahí de mis geranios,
a que están preciosos?
Nel y Sula, que viven en Medallion, un gueto de negros en Ohio, se conocen en la página 52 del libro y, hasta ahí, me cuesta bastante conectar. Supongo que es lo de siempre: "no eres tú, soy yo", estaba a mil cosas, un viaje, empezar uno de relatos que acaba quitándole protagonismo, o tal vez la historia, que al principio no sé bien por dónde va, no sé. Pero entonces: "Un sendero líquido de odio" o "Durmió una noche llena de sueños de azul cobalto" y, qué bonito, tenía que seguir leyendo. Sula y Nel se conocen y se re-conocen, porque ambas eran hijas de "madres distantes y padres incomprensibles" (yo diría además de madres distantes emocionalmente y padres físicamente), ambas habían descubierto hacía tiempo que no eran hombres blancos (hoy añadiríamos heterosexuales) y que por ello, "la libertad y el triunfo estaba prohibida para ellas" y juntas comenzaron a "crear ser otra cosa". La sensación de encontrar una soulmate, un alma gemela con la que el mundo no da miedo y con la que te ríes de esa manera tan chula que luego tienes cosquillas detrás del esternón, y es de las mejores cosas de la vida. Esa sensación, con 12 años.

Ditto

Era 1922, otra época, otro mundo. Mi libro es de segunda mano, y está tirando a amarillo, con una fuente demasiado gruesa, antipática (esas cosas, a alguna gente nos importa), y leerlo físicamente me ha llevado a hace tiempo también: el olor, la textura, en qué manos habrá estado antes, esa persona (ese alienígena) que lo ha dejado intacto. Decía, otra época, pero el libro no te transporta a tu infancia como otros que hayamos podido leer porque nada nos es familiar. No te lleva ni a Huckleberry Finn, ni a Steinbeck... tal vez un poco a lo que debió ser el otro lado de "Matar a un ruiseñor", pero ni eso. Ah, la infancia: "el dolor más viejo y devastador que hay: no el dolor de la infancia, sino el recuerdo de ella".

Como decía, Sula es ese personaje del que una se debería enamorar: un alma libre, no sujeta a las convenciones, que no va a seguir el camino dictado, ese rollo. No quiere casarse y su amiga "podía entender por qué no se había casado: movía las mentes de los hombres, pero no sus cuerpos", pero sobre todo porque "su vida era suya". No quiere tener hijos "no quiero hacer a nadie más, me quiero hacer a mí misma". En el sexo, "no sentía ninguna obligación de complacer a nadie, a menos que su placer le complaciese a ella... quería tanto recibir como dar dolor, sentir placer como darlo: su vida era experimental". Va por la vida sin las preocupaciones de la mayoría, "No tenía ambición, no tenía avaricia, no competía, ayudaba a otros a definirse". Sobre el papel, Sula es ese personaje legendario que seguro me hubiera apasionado si hubiera leído el libro con 20 años. Ahora, a ratos me pregunto si no es mi maldita deformación de destripar a los personajes como si fueran casos clínicos lo que me impide verlos como lo hubiera hecho hace todos estos años. Y no se explica con el-estar-de-vuelta-de-todo de la edad (eso sí que es hacerse viejo), en mi caso esta mirada clínica es, aunque suene paradójico, más comprensiva, más relajada y más abierta que la que tenía con 20. Menos picos y valles, más calma, mejor persona. Pero pese a poder llegar a comprenderla, me ha resultado difícil querer a Sula: ese alguien que pasa de distinguir lo que está bien de lo que está mal, que carece por completo de empatía, y que cuando hace algo 
Pasaba por aquí, 
ningún teléfono cerca...
que daña a su amiga, -porque ella no sigue a las convenciones, recordemos-, no es que no lo sienta, es que le importa un pepino.

Para seguir el ritual de la excéntrica aventurera, Sula deja este lugar provinciano y viaja muchos años por el país. Un viaje iniciático que también la acaba aburriendo, porque tiene propensión al hartazgo, quiere novedad, estímulos, nuevos chutes de dopamina. "Todas esas ciudades, con la misma gente, con las mismas bocas, sudando el mismo sudor. (...) Todos esos hombres no le habían dado nada más que trucos del amor, y le costó ver que un amante nunca podría ser un colega, y nunca lo podría ser". Yo ya estoy aburrida de ella y de esos tíos sudorosos que en teoría deberían dar yo-que-sé a una tía egocéntrica y psicopatilla. Pero entonces entra Morrison con una de sus maravillosas frases que te hacen alegrarte de estar leyendo algo así: "Y como todo artista sin una manera de expresar su arte, se convirtió en peligrosa". Entendéis? No cerréis blogger, esto nos mantiene a las artistas de la recensión barata entretenidas y no vamos por ahí asaltando farmacias ni corazones. 


Cuando Sula vuelve a Medallion, se encuentra con todas esas mujeres, entre ellas su amiga Nel que se "habían doblado en ataúdes almidonados, su dulzura succionada por hornos y teteras". Pobres mujeres que han comprado la historia de Disney, el príncipe les había durado cinco minutos, la caterva de hijos les duraría, o eso parecía, toda la vida "cuanto más estrechas sus vidas, más anchas sus caderas". Muertas en vida: "Todas las mujeres negras de este país están haciendo lo mismo que yo: morirse. Pero la diferencia es que yo estoy muriendo como una sequoia y ellas como un tocón. De verdad: yo viví en este mundo".

Ahora toca el otonio desde la buhardilla

¿Puede el amor romántico/de pareja ser alguna vez trigo limpio? ¿Algo desinteresado, que no tenga al que dice amar, en el fondo, en el centro del escenario? Lo digo porque la única vez que parece que Sula muestra una especie de vulnerabilidad es cuando se va un noviete. Pero no nos enganiemos, en el fondo, si una profundiza, está Sula ahí, narcisa máxima,  en el centro: “Porque con su ida, él le había dejado nada aparte de su impresionante ausencia. Una ausencia tan decorativa, tan ornamental, que era difícil entender cómo alguna vez pudo sobrellevar, sin morirse, su magnífica presencia. (…) ¿Lo habría alucinado? Tenía que buscar evidencia de lo contrario”. No es que quiera lo mejor para ti como para un hijo, un hermano, lo que quiero es cómo me hace sentir quererte.

¿Es vivir bien lo que hace Sula? ¿Hacer y coger lo que quiere, pasando por encima de quien sea? Hay que ponerse en el lado receptor de las consecuencias de su libertad-sin-coger-prisioneros (take no prisoners), en este caso de Nel. Nel, cuyo amor por su marido era otra cosa: “Nel había hilado una tela de araña gris constante alrededor de su corazón”. Y la traducción de tela de araña es mía, porque en el original solo dice “web”, que puede ser solo una red, pero me gusta esa imagen: un corazón de casa abandonada, de Halloween, ahora que vienen estas fechas. Sula es literalmente incapaz de entender el punto de vista de Nel, no puede ponerse en su situación, ni le importa. Al final, da pena: uno nace así. 

Nel es "la clase de personas que se crece en las crisis" y hay una conversación final entre las amigas que es bestial, lo mejor de la novela, y con algunos de mis subrayados voy a terminar:

N: “Siempre lo sabes todo ¿no?”
S: “No lo sé todo; simplemente lo hago todo”.

N: "Estás sola"
S: "Sí, pero mi soledad es mía. La tuya es de otro. Hecha por otro que te la ha pasado. ¿No es eso algo? Una soledad de segunda mano".

N: “Siempre entendí cómo pillabas a los hombres, y ahora comprendo por qué no has conseguido que ninguno se quede"
S: “¿Eso es lo que tengo que hacer? ¿Que el objetivo de mi vida sea que un hombre se quede? Nunca quise a un hombre porque lo mereciera. El merecerlo no tiene nada que ver con eso."

N: "Eres la propietaria del mundo y el resto estamos de alquiler".
S: “Ser buena con alguien es como ser mala: arriesgado”.

Lo sé, lo sé: yo también prefiero a Sula. Todas sus frases son para enmarcar ("Beber para olvidar lo que ya no recordaba")
Lo siento: es evidente que no paseé este libro
, todas para decirlas en una puesta de sol, o un acantilado con mucho viento, toda digna, luego darte la vuelta y dejar a quien proceda con la mano elevada y la palabra en la boca. No sé si he logrado explicar la ambivalencia que me ha causado el personaje de Sula pero sé que de esa clase de "remover" va la magia que es la literatura. Y
 eso, junto con la maravillosa prosa de Toni Morrison, debería ser suficiente para querer leer este libro. Morrison es una de esos escritores, los mejores, que leen nuestra mente y ponen en palabras justo lo que nunca podríamos hacer nosotros - por cierto, esta frase es de Palahniuk, uno de los tíos blancos wokes que leemos sin parar, y tal vez va siendo hora de salir de nuestra zona de confort: Chinua Achebe, allá voy.

21 comentarios:

  1. Este no lo he leído pero Ojos azules, Jazz y Paraíso me encantaron. Te los recomiendo todos, para que sea más diferente mejor Jazz y Paraíso.

    Me parto con tu alarde fotográfico de poses con el libro. Y no te quejarás, solazo en Lodinum

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    1. Morning odiosas q estáis de bank holiday (digo festivo). Me alegro q guste mi faceta "bookstagramer-de-blogger" (en Instagram duró 5 minutos). Y sí, días de sol + geranios + balconete, es casi como trabajar desde una isla del jónico (jaja-va, ya dejo de flagelarme)

      Vale, me apunto Jazz y Paraíso. El Peda esta con "Beloved" y le está costando.

      besox

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  2. Me gusta esta mujer, leí El origen de los otros y acabo de terminar Una bendición y reconozco que es una escritora de la aprendo mucho. Describe de una forma increíble las relaciones (en el caso de Una bendición entre mujeres de diferente estatus en el origen de los USA en el siglo XVII) pero además escribe muy bien. Apunto más recomendaciones
    Muxus

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    1. Otra ociosa: os observo con gusto tras una reunión de "finanzas"... Enmedio de ella le quería preguntar al contable: "es el azul de tu camisa cobalto? Tal vez índigo? Tiffanu? Añil?" A todo eso me ha llevado Morrison. Cuando lees una frase y piensas "por qué no se me ha ocurrido a mí?" Suspiro

      Muxus maitea

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  3. Disiento (luego existo) y me puse de fondo a las mamás y los papás, por eso de combinar beach con funk melody…

    Me quedo con N… todas sus frases, aunque resalte la última :

    N: "Eres la propietaria del mundo y el resto estamos de alquiler".

    Supongo que, si hubiera sido capaz de aterrrizar en el París “de los 18”, entonces me sentiría más cerca de S… sería otra variante de adn social el que me hubiera marcado…

    Y veremos si coincidimos con la Chinua Achebe… “disfruté” mucho con ella, oyéndole relatar una historia tan africana, al final del río que se marcó el Conrad… deja las “africanadas” del Picasso, por ejemplo, a nivel de un calcetín humedecido por las babas de una amorosa perra…

    Y que bonito suena mamá Cass!!!!

    Bicos nostálgicos (poco)...

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    1. Y me ha encantado el Aduriz del lateral (Jot)...

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    2. all the leaves are brownnnn
      and the sky is greyyyy

      Me has pegado una canción MV. Y Chinua Achebe es un tío, q yo sepa... ya te contaré, pero no hasta dentro de unos meses, tengo mandanga de la buena antes.

      SObre Aduriz, he empezado a leer la entrevista y he parado aquí: "¿Qué es lo que motiva a gente de todo el mundo a plantarse en este lugar, a hacer viajes para venir aquí? ¿Comer productos? No vienen a comer productos, vienen a comer significaciones, vienen a comer una mirada diferente sobre las cosas, vienen a comer quizás algo en abstracto…"

      A ver, yo soy una chica de gustos sencillos, pero es q sinceramente, q el cáncer del psicoanálisis o el postmodernismo o la tontería haya llegado a los fogones me parece el colmo. No voy a viajar para comer significaciones. Por cierto, una vez en un sarao aquí en Londinium conocí a un tal Kike Dacosta (le he tenido q preguntar a mi compa de piso pq ya no recordaba el nombre) ... resulta q era un chef famoso. Tb a Arzak (ese sí q me sonaba pq cuando voy a donosti paso por la puerta de su restaurante). Qué pena q no me hablaron de Foucault y Bourdieu y significaciones, les habría echado el mousse en la cabeza... :)

      besos beligerantes

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    3. Mea culpa, y lo siento por el africanismo (que lo pillé muy tardio, ya que en mi adolescencia Lumumba era un criminal)... pero es que lo de “los nombres”... veo que es un macho (o no binario), al que confundí con la “otra” (para mi, por desgracia, no hay “muchos”... como ya insinué fue el Conrad quién me abrió el camino)... ahora recuerdo que esa hablaba en dos vídeos sobre la mujer africana (y como hablaba!)...

      La cuestión es que si anduve rondando la negritud con el Chinua, porque a fin de cuentas no habla “de negros”, habla de seres humanos que nacieron con piel negra… pero también demuestra que esa misma frase (“con piel negra”) no basta para cerrar el mercado… porque, los que nacen con piel blanca, son los que se los llevan en barcos negreros (aunque el colofón real está, en que los que los meten en los barcos también son negros, y negros poderosos… así que… para algo está el poder malsano).

      Y del mundo chef, poco puedo decir, que sea positivo. Pero tampoco lo puedo hacer del postmayo 68 (por ejemplo), sobre todo en su deriva “por los cerros de Úbeda”, tan proclives siempre los “universitaros” a recorrerlos, con fruición y sin sentido de la medida…

      Porque el Foucoult es un artista (del pensamiento creativo en su campo), como puede ser el Lacan… pero lo que se tiende a llamar “escuela” suele ser para dar de comer aparte… porque, como pasa en los partidos políticos, el más allegado no suele ser el más capaz…

      … y por eso precisamente, me divertí mucho (no rematé la entrevista) con las “sabias” palabras del chef… porque hablaba hacia quien ocupa un asiento en su comedor, como el que habla a quien está sentado en un sofá del psicoanalista… le dice lo que quiere escuchar, lo que no se atreve a pensar, o incluso un nuevo cuento de hadas que trastoca todo lo que anteriormente leyó (sobre Princesa y Dragones) el susodicho “comensal”… pero tiene estilo, que es lo que yo le pido a un elaborador de platos… me gusta el típico caldo (si está bien hecho), pero la evolución obliga a experiementar nuevas formas de “leer un plato” (poniéndose ya en postmayo 68)... a mi médico (acabo de ver un docugrama sobre un hospital postKatrina que quita el hipo) no le pìdo que me cure (eso ya se verá), solo le pido que me entregue la dosis de confianza necesaria, para pensar que eso puede ser posible (y si no, con más razón, también)...

      Bicos razonables…

      Ah : nunca desperdicies un buen mousse...

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    4. Hola MV,  qué tal. Hoy leía un artículo en el q el autor se preguntaba "¿qué ha hecho la cultura conmigo?" pq cada uno somos producto, al final, de todo eso a lo q nos hemos (o no) expuesto. Sobre Foucault, me refería a su libro aquel sobre locura y civilización, q no he leído, pero q inspiró a los movimientos anti-psiquiatría de los 60. Soy la primera en reconocer los abusos q en nombre de la psiquiatría han ocurrido a lo largo de la historia, q conste, pero de ahí a decir q todo se explica por estructuras y sistemas, no. El otro día escuchaba la recomendación de un libro de una autora q había tenido problemas de salud mental y decían "fue psiquiatrizada". Qué quieren decir con eso? Esto es lo q me chirría. 

      Y sí, yo tb muy fan de la textura mousse para sabores q me gustan... chocolate, por ej. Mousse de mejillones (los odio), no.

      Bicos paletos con reducción de jalea de lima o vino tinto

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    5. Mejillones amoussados, ug... supongo que será algo así como el paté de marisco, que me resulta espeluznantemente patético...

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    6. Ah, y te invito al excelente plato sobre la cancelación (existencialismo habemus?), que presenta lamarea.com en el lateral... aún podemos (!) tener esperanza...

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    7. Jo, MV no sabía q tal cosa como el mousse de mejillones existía (me lo he inventado, pero existe!). Igual tengo un futuro como redactora de cartas de restaurantes pijo? 

      Y gracias por hacerme la revista de prensa de los enlazados q tristemente no suelo tener tiempo de leer... lo anoto... No tengo conciencia de haber cancelado activamente a nadie, pero igual me equivoco. Soy muy partidaria, eso sí, del "no les compres", todo lo q sea no comprar me gusta, es eso cancelar? 

      bicos aún-podemos-yes-we-can

      di

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    8. No me quiero meter en camisas de once varas... así que puede no existir lo de los mejillones (mousse), pero por aquí hacen un paté de erizo (de mar) que dicen ser excelente (no está mal)... por lo de la cancelación tampoco me meto (mucho) , aunque entiendo, que cancelar sería con la edición del autor, que no se compre una obra suya solo indica libertad de compra... o sería un escrache permanente, para evitar que se pueda expresar en un medio de comunicación (aunque sea "in")...

      Bicos de lechuga permanente (o casi)...

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    9. Y como no hay más tela que cortar (por lo de ahora) sigo con mis incursiones por la banda derecha (a veces la derecha tiene cosas buenas... herejía habemus!)... lo del Taras Bulba (Zenda) me hace pensar en los nacionalistas gallegos (tan románticos ellos, como todo buen nacionalista en pleno siglo XXI)... ya que los "entiendo" bastante bien, cuando pienso en el imperio ruso/español... tan católico él (o tan ortodoxo) y tan avasallador de cualquier diferencia social o cultural, que no le cayera bien... como los gobernantes mundiales de esta puta actualidad...

      Bicos rebeldes (con causa!)...

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  4. De Toni Morrison leí hace más de veinte años uno que no recuerdo el título. Como no me gustó no le di otra oportunidad. No sé si hacerlo ahora o conformarme con esa larguísima crónica que haces de "Sula" Ya veré.

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    1. Hola Di, gracias por tu comentario. Como me han dicho otras veces, si te terminas el divague te cuenta como libro leído (alguna vez, cuentan los más antiguos del lugar, ha habido recensiones más largas q el propio libro), así q como veas. Eso sí, conformarte, no: mira una de las frases del epígrafe del blog del esquizofrénico (digo, psiquiatrizado) William BLake: "El camino del exceso, conduce a la sabiduría"... o la amiga Mae "too much of a good things is.... wonderful"

      salud

      di (vagando)

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  5. Es ud una autentica revolucionaria de guerrera verde y kalasnikov al hombro, emboscando al "menos es más". Tenga cuidado, se empieza así y.se acaba en alguna cámara alta de.senadora con los gintonics.subvencionados. ....bebe usted?. Si no es así, ya tiene edad para empezar. ...no, la ingesta bajo vigilancia medica para crear así por las costuras no lo veo yo. Just drink.

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  6. .....y, mire que le digo, aquí desde el capus.mundi de los pipis y sus barcos, palma de mallorca, a.mi me sigue gustando la exhibición de un algarrobo

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    1. Hola Anónimo-que-me-ustedea, 

      No queda claro si yo bebo, pero me parece sospechar q usted sí... es más, me atrevería a lanzarme a esta piscina: parece haber escrito esto "bajo la influencia", conclusión a la q he llegado porque oiga, he tenido q guglear algarrobo... y como diría Eugenio del búlgaro: "lo busqué y era un árbol!". 

      Le aseguro q gin&tonics con pepino no, y dadas mis credenciales revolucionarias, q graciosamente apunta (taa), habrá ya adivinado q soy de aquello q en vetusta llamaban "orgasmo" (vodka + naranja )

      Hasta la victoria siempre

      di

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  7. Mire ustez, grave es concluir sin pruebas. Se empieza asín y se acaba creyendo en que una paloma es dios. Yo soy abstemio.por la.gracia de dior.

    Lo del algarrobo,....bueno, de donde ustez es entiendo que sólo sepan de vegetales secos qye giran por los monegros empujados por el aire con una triste armonics por banda.sonora......no se llamen mediterráneos y ya esta

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  8. A veces, muchas, callar es lo más sensato. (Creía, iluso, que habías en algún momento de los últimos años, enlazado mi blog en el tuyo). Bueno, no pasa nada. Vaya tontería.
    Un fuerte abrazo

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