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19 agosto 2021

Librerías de Barcelona: Porno para bibliófilos

Una vez hice un divague titulado "Farenheit 451": Porno para bibliófilos", así que vale, el título está reciclado. ¿Pero qué vais a hacer? ¿Trolearme? (insalivo: lo de tener un trol es como una fantasía sexual así muy loca, nunca he tenido uno). A lo que íbamos, las librerías.

Primero estuve en Donosti, donde está Elkar, la conozco por Iruña y bien, correcta (aunque allí mi favorita es Katakrak, -haceos socios!- gracias a la divaganta Marisa). Más tarde, en Vetusta, lloré con algunas, aunque me reconcilié al final un poco. Pero luego caí por Barcelona y lloré pero de emoción, además de constatar que las pobres Vetustas son eso: provincias. No se enfaden, nací allí; a mí también me duele.

Con la pandemia han abierto librerías nuevas en Barna y me dediqué a visitar las que me dejaron -recuerden, había que comer sin parar. En este divague se pueden encontrar fotos y básicamente ideas aleatorias, esperemos por el bien de tod@s relacionadas con libros. 

Finestres
La primera, maravillosa, fue una recomendación de Elena Rius (gracias!!!). Finestres significa ventanas y, aunque no tiene ninguna (serán metafóricas, igual!), al final hay un patio encantador para tomarte un té con ruido de agua y verde. Hay una nota muy chula que insta a la gente a leer allí libros, no pantallas.  Yo no tengo libro electrónico ni lo quiero y temo que algún día los libros de papel sean un lujo, quedando solo los formatos electrónicos para el pueblo. Ese día, el mundo será un lugar peor, y tal vez entonces me dedicaré a releer. Por algo compro todos los libros.


Finestres está en el Eixample Esquerra. No sé porqué, tengo que pensar antes de decir la primera palabra o me sale "example" [ig'za:mpl] en inglés. 



En Finestres, además de gran iluminación, hay sofás. Es la felicidad. Son sofás sofisticados, de terciopelo verde o granate, a los que te llevas una montaña de libros de las estanterías y sin darte cuenta, ya quieres descalzarte y subir los pies como harías en tu casa. Pero aún tengo maneras - no tuvieron que echarme. 


También hay clasificaciones geniales: por ejemplo, "utopía". Que las librerías como esta no sean una utopía, porfa. Para ello, hay que comprar en ellas en lugar de contribuir a que Jeff Bezos vaya al espacio. 



Byron
Tirando hacia el mar (a ver, no cerca del mar, pero para orientarme en Barna pienso "hacia el mar o hacia la montaña") está Byron. También está muy chula, y al fondo tienen un café con chimenea; obviamente, hay que venir en invierno. Aquí me hice con otra pila de libros para el sillón del que recuerdo "Tristes trópicos" de Claude Levi-Strauss y la frase de Lucrecio (De rerum natura) con la que comienza, "Nec minus ergo ante hace quam tu cecidere, cadentque", que ese traduce algo así como “Todas las cosas que te precedieron están muertas, de la misma manera que las que vendrán después de ti sucumbirán”. Así son los antropólogos, no os desaniméis.

Y ya que estamos de citas, toca una del propio Byron: "La amistad es el amor, pero sin sus alas". Oh.



Ona 
Esta es una librería toda en catalán, pero estaba cerrada. Hice una foto al remolino de libros de la entrada. Next time. 

No estaba en una librería cuando leí esto, pero en algún sitio lo tengo que meter. !!!!En Otonio saca libro Jonathan Franzen!!!!! Yupi!!!! El problema será que tendré que desconectar de la vida unos días - los que me cuesta leer los novelones-nada-postmodernos de Jonathan. Cuando empiezo algo suyo, no lo puedo dejar: "Las correcciones", con el que se hizo famoso -no he leído los anteriores- fue mi primero (oh, recomendación de NáN; NáN, I miss you). Luego "Libertad" y "Purity". Pero, tragedia: Jonathan ha dicho que esta va a ser su último libro de ficción (aunque es el primero de una trilogía) porque cree que un escritor "lleva dentro como máximo seis novelas". Y ya. Así que después de este, que por supuesto será otra saga familiar americana vista desde su particular prisma, cuelga los bártulos. Yo había oído lo de que todo el mundo lleva en sí aunque sea una novela (nanai: llevamos una vida, pero articularla en una novela? ha!). 

Laie
En Pau Claris, enfrente de Ona. Aquí nos mando Dp: según él, un clásico. Dp es uno de los mayores lectores que conozco  -ahora "enganchado" con las Tragedias Griegas y  no es ningún académico del tema, es teleco. Quedamos con él y familia en su nuevo piso -yo desconocía el mundo de la compra-venta de baldosas modernistas en los pisos del Eixample, pero aquí lo aprendí. Total que sobre ese suelo tan bonito nos recomendó a Piglia y a Solá, y ambos los compré en Laie. 



Que no bibliofilia...





La Impossible
Aquí (¿o fue en Re-read, una de segunda mano?) cayó en mis manos un libro de Bryce Echenique titulado "La amigdalitis de Tarzán". En su día (preblog) leí la trilogía que comienza con "Un mundo para Julius", maravillosa, y no le he vuelto a leer. No lo compré básicamente porque me horrorizó el título, así de claro. El tema, novela epistolar entre dos amigos cuyos tiempos nunca han coincidido para la pasión, puede dar mucho de sí. ¿Cómo de importante es un título? Creo que una vez ya escribí en el blog sobre títulos de novelas que me gustaban mucho (que luego no tiene porqué haber coincidido con que me gustara el libro), pero me siento incapaz de localizarlo. 

Y de esta librería también me gusta el nombre. 





La Central de Mallorca
Hace muchos años, cuando el Náufrago Ro estaba haciendo un master del universo en Barna conocimos La Central del Raval. Tengo un gran recuerdo de aquellos días que pasamos en el piso de Ro (el día que llegamos había hecho garbanzos para ellos, espinacas para mí: de qué cosas me acuerdo) y en general de ir vagando por las calles (cuando aún no existía Di Vagando...), hablando de libros con él y con Dp, y pasando bastantes ratos en La Central. 

Clásicos contemporáneos, yeah!
Esta vez no estuve en la del Raval, pero sí en La Central de la calle Mallorca, que es a la que voy siempre. Es mi favorita de todas porque he pasado momentos chulos allí, especial recuerdo un día con Nara asustando a los clientes. Quiero aquí entonar un mea culpa porque el otro día me preguntaba por qué en esta península los libreros no habían descubierto agrupar a los "Modern Classics". Pues bien, en La Central lo han hecho y los llaman "Clásicos contemporáneos" (en imagen). Me gusta mucho que hagan grupos de libros por temas, o recomendados por los libreros. Aquí había una sección bastante grande de libros en inglés nada más entrar, con muchos de los libros que he divagado yo en el blog. Eché en falta una sección titulada "Di recomienda..." y Maléfica ahí sonriendo.


Y terminaré con otra cita, del gran Charles Bukowski: "Encuentra lo que amas y deja que te mate. Y que devore tus restos". No sé cómo puedo enlazar esto con la bibliofilia, porque el vagar por librerías es dificilmente una práctica de riesgo. Pero muchos, sin libros, no podríamos vivir. 

-Truly yours

Di

                "My Dear,

            Find what you love and let it kill you. Let it drain you of your all. Let it cling onto your back and weigh you down into eventual nothingness. Let it kill you and let it devour your remains. For all things will kill you, both slowly and fastly, but it's much better to  be killed by a lover.

            -Falsely yours
            
            CB"




6 comentarios:

  1. Qué buena pinta todas. En Madrid también están abriendo muchas chulas. El problema es tener tiempo para leer. Llevo un verano de lectura lenta que al principio me frustró pero ahora he decidido disfrutar y leer despacio lo que me dé. A ver si voy a Barcelona sin que sea por trabajo.

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  2. "El problema es tener tiempo para leer": de qué vas? Pero si tú lees super-rápido, cada mes nosecuántos libros, tantos q los tienes q encadenar para las entradas! Muchos libros, de todas maneras, q no se pueden leer rápido, o yo por lo menos no puedo. El otro día entré a una editorial q habían puesto de un libro "lectura veraniega" (para atraer lectores? a mí desde luego me tiró para atrás) a ver qué querían decir... es q me suena como esos programas de tele q hacían (hacen?) con una piscina en el plató: basura. Sio alguien califica a tu blog como "veraniego" o "refrescante" o "entretenido", ¿no hay q decirles eso a mí tu no me lo dices en la calle? :)

    love

    di

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  3. Muy inspiradora la cita de Bukowski, Di. Lo de que vagar por librerías no es un deporte de riesgo, no sé si estoy de acuerdo. Es fácil ser abducida por cualquiera de ellas (y sí, en Barcelona tenemos una inmensa suerte y muchas posibilidades de ser abducidas). Por no hablar de las fortunas que te acabas gastando.
    No me gusta el calificativo de "Lecturas veraniegas", porque precisamente en verano es cuando uno tiene tiempo de leer esos libros densos que durante el invierno se quedan pendientes. Ahora bien, yo misma leo en ocasiones libros que son puro pasatiempo: leer y olvidar. Yo los categorizo como "lecturas desengrasantes", igual que después de una comida copiosa necesitas tomarte un sorbete. Tras unos cuantos libros complejos, leer una frivolidad te devuelve el apetito. Dentro de un orden, claro, porque tiene que estar al menos bien escrito. Huyo como de la peste de los bestsellers veraniegos.

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  4. Cierto ELENA, voy a elevar las visitas a librerías a la categoría práctica de riesgo, en primer lugar para el bolsillo (qué caros son los libros en SP en comparación con UK!) y luego, me gusta, por la posibilidad de abducción. Vamos, q daría para un relato: alguien q se mete en una librería y, así a modo de Alicia, se cae por el agujero.

    Necesito q me des ejemplos de "lecturas desengrasantes" para entender a lo q te refieres. LO q tú llamas "frivolidad" igual no es lo q yo entiendo, así q dime unos cuantos y entonces sé de lo q hablamos. Voy a escribir algo de los dos -cortitos- q acabo de terminar. Uno es del q hablamos de Irene Solá: acabo de terminarlo y estoy algo confusa. A ver si me aclaro escribiendo sobre él. :)

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  5. ¿Ejemplos? Mis lecturas "desengrasantes" incluyen una variedad de géneros, creo que el único denominador común es que no me obliguen a reflexionar demasiado y sepan mantener un cierto ritmo, es decir, que sean absorbentes. Van desde thrillers o novela negra como las de John Grisham o Michael Connelly hasta novelas románticas como las de D. E. Stevenson ("cosy" a más no poder), o incluso novelistas históricos como Robert Harris, que tanto te llevan a la Roma de Cicerón ode Pompeya como al caso Dreyfus (muy interesante esta última, por cierto "An officer and a spy"). Son lecturas que me dejan la mente descansada y lista para emprender luego obras más exigentes.

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  6. Gracias ELENA. No he leído a ningún autor q citas, veo q tenemos un Robert harris aquí en la estantería (Imperium), pero no suelo leer novela histórica (he leído "Memorias de Adriano", "Opus nigrum", ese tipo, pero ya en el cole no me gustaba la historia- en contraste con mis compas de piso a los q les encanta, Mini está perfectamente brainwashed con los tudores jaja). Tengo tb por ahí "Los idus de Marzo", q tb debería leer...

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