"No voy recibir lecciones de sexismo y misoginia de este hombre. Ni ahora ni nunca" |
El otro día estuvo por aquí Julia Gillard, en conversación con la catedrática de clásicas Mary Beard, porque en octubre se cumplieron diez años de su "Discurso de la Misoginia". Gillard era entonces Primera Ministra de Australia, y ahora es la presidenta del "Global Institute for Women's Leadership" en King's College Londinium. Quien quiera ver esa conversación, aquí.
El discurso fue tan importante que ha sido votado por el Guardian como el "momento más inolvidable de la historia de la tele autraliana".
Julia Gilliard ha sido la única mujer primera ministra de Australia, y gobernó de 2010 a 2013 con el Australian Labor Party. Durante su mandato, tuvo que soportar críticas porque no estaba casada, porque no tenía hijos (un diputado liberal dijo que no debía ser líder porque era "deliberadamente infértil"). Se dijo que era "indecorosa y excesivamente brutal para ser una mujer". Circulaban memes pornográficos y degradantes por la web y mucho más. Han pasado muchas cosas en el feminismo desde hace 10 años, pero el excesivo escrutinio -y degradación- de las mujeres en política (todos estamos pensando en ejemplos), sigue ahí.
El entonces líder de la oposición, Tony Abbot del Partido Liberal, atacó una vez más a Gillard, pero esta vez no como había hecho delante de pancartas como la de la imagen ("Deshazte de la bruja"), sino intentando esta vez enseniarle a Gillard lo que era el sexismo. Un asesor le debió comentar la semana anterior que "existía esta cosa llamada misoginia" y que decir esto le iba a hacer popular. Este hombre, que tenía en su historial haber dicho cosas cuando era ministro como:
"el aborto es la salida fácil"
El cartel de los liberales dice "Deshazte de la bruja": Todo muy edificante |
"qué pasa si los hombres están, por fisiología o temperamento más adaptados para ejercer la autoridad o mandar?"
"Lo que las mujeres de Australia tienen que entender cuando planchan..." (para explicar cambio de precios energéticos)
"Si la Primera Ministra quiere, políticamente hablando, hacer de ella misma una mujer honesta" (gritándole desde su bancada)
Gran discurso. El primer episodio del podcast de Malcom Gladwell Revisionist History está justamente dedicado a esto y a este discurso. merece la pena...
ResponderEliminarAle, no lo sabía, gracias, lo busco... hace tiempo q no escucho a Malcolm, no me da la vida con tanto podcast! Si te acuerdas, cuando haya alguno bueno, dinos (recuerdas hace siglos aquel de los campos de golf? creo q hasta hice un divague...)
EliminarBesos
di
Aplausos. Pero el tipo repulsivo está ahí, escuchándola como si la cosa no fuese con él. Da la impresión de que sigue manteniendo todas las opiniones que ella cita. Ni pizca de vergüenza.
ResponderEliminarMe alegra q saques el tema de la cara del tipo, con su corbata cara y su camisa planchadísima por una de esas "mujeres australianas que cuando planchan bla bla": yo es q es verlo y querer inmediatamente abofetearle. Esto no se puede decir así abiertamente, menos mal q no nos lee nadie.
EliminarMuá
di
No sé en qué medida habrá cambiado Australia. Pero lo q algunas mujeres oyen en Españistan por llegar arriba es muy fuerte. Lo hagan bien o mal, nadie pregunta cuantas pollas han chupado los señoros q nos gobiernan, o los q se les oponen, para llegar a donde han llegado, y eso está muy requetebien. Si eres mujer la presunción de culpa va de suyo. Si eres mujer y de izquierdas se confirma la duda.
ResponderEliminarNada mas, señoria. Vuelvo a mi rincón a seguir llorando. La cara de nuestros Tonys locales es del mismo hormigón q en Australia, q cosas.
Muxus
Me gusta tu concepto "cara de hormigón", MARISA, q se le pone pasados un par de minutos tras la sonrisita del principio. Vi un video en el q preguntaban a varias mujeres políticas sobre qué ataque en sus carreras les habíá dolido más, y Gillard dijo que, al poco de morir su padre se dijo "que había muerto de verguenza por ella", imagina, qué sinverguenzas. Luego había otras (un par) q decían q nada q dijeran les podía tocar, que les resbalaba todo, la mejor estrategia para sobrevivir. Supongo que I Montero, q estudió psicología, sabrá lo q tiene q hacer mentalmente para protegerse, pero por qué debería esto ser necesario. Seguro q hay gente muy válida q se queda en el camino pq simplemente no resisten lo q es inaceptable.
Eliminarmás muxus
di
Ando cantando “in situ” la canción famosa ( prolusa) del Siniestro Total, por lo que ando algo descolgado… pero, además , lo del feminismo me tiene fritito ( lo dernier de Madrid es apoteósico)… y, para colmo, yo soy muy poco projuanasdearco “montadoras de tienda de campaña”.
ResponderEliminarEn fin… bicos moi lisboetas…
Salutti MV... disfruta de Lisboa, y respira ese aire atlántico bien fuerte: no q te vaya a ayudar con tus problemas con "lo del feminismo", pero bueno, si persistes en leer este blog, algo haremos, espero.
EliminarAyyy... menos mal q nos queda Portugal!
Los que vivimos las divergencias entre feminismo (escaso) comunista militante y el feminismo exacerbado de las "falconetti donne", ya estamos curados de espantos, pero lo dernier madrileño aún nos acongojó un poco/mucho...
Eliminar