06 agosto 2020

Desidia (victoriana) al borde del mar (Y6)


 
Estación de Hogsmead, digo de Goathland
La estación de Goathland, por donde pasa el "Tren histórico de los Páramos", recibe más visitas de las esperadas porque es un centro de peregrinación de fanes de Harry Potter. Aquí se filmaron las primeras películas de la saga, y esta estación reproduce la de "Hogsmead".  Al llegar al pueblo -este es nuestro primer destino del día- vemos un montón de coches,  que nos lleva a aparcar en un campo a la salida, pero luego en la estación no hay casi nadie: no entendemos nada, dónde está toda esa gente? Hemos de volver páramo-a-través, y acceder a la estación por el lado opuesto de la entrada principal. Eso sí, es encantador leer que si tras tu paso "cometes la negligencia" de no cerrar la puerta, hay multa de £2! Tal vez tampoco te den "cerveza de jengibre" como castigo después- me siento como en una novela de Enyd Blyton. 

Cierre o multa de £2!



Todas sus necesidades en uno

Nos damos una vuelta por Gothland el pueblo, qué gran nombre para una zona tan gótica como esta (aprendiz, Gotham City). Pero su mayor interés y tal vez única aportación al género es un establecimiento que hace las veces de mini-market, gasolinera y funeraria.  El planteamiento solo da ya para concurso de relatos, pero yo lo me pregunto es porqué tienen lo de funeraria tan aparente. Quiero decir, los del pueblo ya lo sabrán, y acudirán cuando sea la triste ocasión. Por qué no ahorrar al niño o al friki que va a ver lo de Harry Potter, que van de paso, esta información?



Seguimos hacia la costa, el plan es comenzar por el extremo norte de Yorkshire, Redcar, separada por el norte de Northumberland por el estuario del río Tees. De esta zona solo recuerdo haber visitado en el pasado Durham y su preciosa catedral (sí, aquí también se filmó parece Harry Potter). Nota exculpatoria: así como desconocía hasta ayer el nombre del "anciano del palo", Gandalf, tampoco he visto una sola peli de ese niño mago, pese a que todas ellas han sido reproducidas en mi hogar repetidas veces.


La playa de Redcar es maravillosa por desierta (nadie quiere sufrir una hipotermia de buena mañana) e inmensa. Sin embargo, en el lateral izquierdo, dentro del mar, unos molinos de viento. A mí me encantan estos molinos por las montañas pero en el agua, no señor. Tal vez porque estoy traumatizada con lo que el Peda llama "ninguna playa sin su cementera", pero es que hemos visto en nuestra trayectoria tantas playas fastidiadas por la revolución industrial... cómo olvidar la maravillosa "Playa de los muertos" de Almería y su fábrica al fondo, o Santa Marta en Colombia, con una plataforma petrolífera en medio de la bahía, o más recientemente en Malta, o monstruosa central térmica a orillas del Atlántico en Marruecos.

Playaza de Recar: casi 13 kms

Donde aparcamos hay enfrente unas rocas llenas de verdín, pero aparte de eso, todo arena. Comenzamos a caminar y pasado mucho rato, el acantilado del fondo, hacia el que tirábamos, sigue estando lejísimos. Tras algún debate desistimos y empezamos a volver (luego nos damos cuenta de que esta playa tiene la friolera de casi 13 kms: Palo, dónde estás?). En todo este tiempo, ha subido mucho la marea, ya no están las rocas con verdín. Luego ya en el coche tiramos un poco para atrás, y allí descubrimos la parte "pueblo playero hortera británico", categoría a la que definitivamente pertenece Redcar. Todo esto no se ve desde la playa que nos hemos caminado nosotros, pero no le falta su "arcade", feriados y gente fea. Pero además, Redcar no está en su apogeo, no sé si por covid, o por decadencia general, pero hasta alguna arcade está cerrada, por no hablar de tiendas, heladerías... como el cielo está gris en este momento, la sensación de desolación es terrible. Y la ansiedad que siento del mundo que viene, tras esta pandemia, que tal vez no haya sido mi temida "The Road", pero sinceramente, Redcar lo parece.




A partir de aquí, queda poco que decir del día, y lo harán tal vez mejor las imágenes. El siguiente pueblo hacia el sur se llama "Markse by the sea", del que no recuerdo nada, salvo que miramos aquí algún alojamiento que luego no se materializó. Me alegro ahora, no habría sido lo mismo estar en la playa que en los páramos. Y el siguiente "Saltburn by the sea", donde de repente sale el sol y el miedo y el planteamiento del día cambian. Mini pasa de bajar a dar una vuelta, y se pierde un sitio muy agradable, que a mí me hace sentir dama decimonónica, porque me pasa como en los páramos: las puedo ver pasear por aquí. Distinto tipo, estas son matriarcas con parasol, con senior con bigote ("whiskers" como dicen en la novela que estoy leyendo ahora), y con nannies de negro y con cofia llevando el cochecito inmenso del bebé. En oposición a Redcar, con su playa a la altura del pueblo, lo que nos encontramos yendo hacia el sur son playas allá abajo, con su acantilado y el pueblo allá arriba. Por ello los victorianos inventaron unos funiculares comunican ambas partes, y que aún funcionan, pero que ahora estaba cerrado por tema virus.




Saltburn by the sea


Siguiente pueblo es Staithes, este del tipo "encantador pueblo de pescadores", donde de nuevo me acuerdo de Mr Renno el del taller, porque mi kamikaze compa decide bajar en Wolfy hasta la playa, con la consabida pendiente tremenda, y oraciones/ofrendas necesarias a la subida.


Staithes
Staithes
Así son las pendientes en estos pueblos


Y el último y también encantador, se llama Runswick Bay. Todas las casitas son como de juguete. Una en concreto tiene todo blanco y azul, desde las cortinas, las flores del jardín y el menaje de la cocina! (puerta abierta). Disculpas por el publirreportaje, bienvenidas a Di, agencia inmobiliaria:





Y ya que estamos de fotos, terminemos con unas pocas de la vuelta a nuestro cottage por los moors y páramos de los que, si se nos da una semana más, nos consideran ya locales.  


Por ahí va Jane Eyre


Heathcliff enfurecido-entra metáfora

Sol, pero ni un cielo sin sus nubes




Alguien preguntó: aquí nuestro cottage


Que no falte su iglesia para los 4 feligreses del pueblo del cottage

4 comentarios:

  1. Pensamientos varios:
    1. Oh, afortunada (con lo de no haber visto las pelis del niño mago pese a ser repetidamente proyectadas en tu presencia). Creo que si hago memoria de la proporción de pelis de niño mago sobre pelis totales vistas (en el cine) en los últimos 15 años, me echan del club de las que alguna vez pasaron todas las tardes que pudieron en los cines Alphaville de Plaza de España…
    2. Cuando trabajaba en el despacho (y tenía clientes del ramo molinos de ésos), me hacía gracia la distinción on-shore/off-shore porque en España hay muy pocos parques de los plantados en el mar. Mentalmente no me parece una imagen fea, pero tienes razón que en cuanto piensas en las plataformas de hormigón o lo que sea que fragüe bajo el mar y el efecto que tendrá eso… lo que siempre me gustó es otro invento brit que son unas macro boyas que generan energía sólo flotando en el mar (bueno, por las olas y tal) y que recuerdo que intentaban trasplantar al Cantábrico,
    3. “By the sea”. Hace mil años fui a Italia con amigas en tren desde BCN. Todo ese tramo por la Costa Azul donde todo era “Sur Mer” y, al poco “sul mare”. Me encanta, sea cual sea el mar (¿se nota que no lo cato desde enero?).
    4. J3 no habría perdonado un comentario de “oh, qué matchy-matchy todo…” (respecto de la casa azul y blanca).
    Me voy al Y7… Gracias, guapa.

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  2. Sé que mi prestigio intelectual va a quedar arruinado, pero debo confesar que he leído todos los libros de Harry Potter (menos el último, me parece) y he visto casi todas las películas. ¡Y sin que nadie me obligase! Para ahondar en la infamia, también he leído todos los volúmenes de Canción de hielo y fuego y me he zampado la serie completa (la última temporada, una birria, por cierto). Qué quieres, todos tenemos un lado friki...
    Después de tus descripciones, había imaginado el cottage como algo peor, lo encuentro la mar de mono. ¡Encima con jacuzzi!

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  3. Hola de nuevo Ya he vuelto de las montañas y te escribo desde mi jardín :)

    Estoy con Elena, me había imaginado el cottage mucho más rústico, tiene buena pinta.

    Sobre el tema del día, yo he visto la primera película de Harry Potter, todas las demás me las he dormido desde el minuto 1 hasta el final. Y yo no me duermo nunca con las películas pero es que me aburro. Tampoco he leído los libros a pesar de que en mi casa todo el mundo es muy fan.

    Sois unos flojos con lo de la playa, teníais que haberla recorrido entero o por lo menos la mitad... dais un pasito con un palo y ya está. Así no hago carrera contigo.

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  4. Seguimos con más anotaciones-gracias darlings.

    MI historia con el niño mago: cuando salieron los libros, debí mirar las primeras páginas en alguna librería y me dije: "puf, cuando, en el futuro, tenga hij@s, ya me tocará". Luego tuve, y ni con esas. Afortunadam, Mini se enganchó sola, y recuerdo algunas vacaciones en las q leyó más de 100 páginas en un día y "no quería salir" a ver cosas. Las pelis, horrible: en algún punto he parado así de pie, y ni hablar. Veo q las tres tenéis historias con el tema ninio mago... pero ELENA, tu valía intelectual no queda mancillada, pq de sobra conocemos ese lado tuyo friki, al q lo achaco, q nos encanta! :)

    Los molinos de viento on-shore, como dices CARMEN, no deberían ser feos, pero las plataformas petrolíferas los han demonizado para mí. No conozco las boyas y ese viaje por la costa azul, seguro q no es lo mism q en cualquier costas del Mar del Norte... :)Te veo como a Grace Kelly en "Atrapa un ladrón". Por cierto, el otro día vimos "Dial M for Murder" y a Mini le gustó mucho... lo recomiendo para vuestr@s hij@s teens (MO tb). El estilismo de Kelly como spr muy glam (matchy-matchy), pero menos q en "Atrapa", solo saca 3 vestidos...

    Sobre el cottage, sí, sí, el sitio no estaba mal, pero olía raro y traía Wicks y vencejos. Ah, q todo esto os gustó, lo olvidaba...

    muxus

    di

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