"Quería hacer algo con lo que se pasase un buen rato, que fuera tonto, exagerado, precioso, barroco, loco".
Esto es lo que dice de su peli Emeral Fennel, la directora de "Saltburn", la cinta para ver en familia estas fiestas de la que sin duda habrás oído hablar. Estoy de acuerdo con todos los puntos de su descripción: la peli es tonta, exagerada, visualmente preciosa, barroca, loca y en ningún momento de sus 127 minutos te aburres. Ahí vamos...
Todos los boletos para gustarme
Y sí, tenía un montón de ingredientes para ser una de mis pelis: en primer lugar, es la segunda de Fennel y su ópera prima, "Promising Young Woman", -el thriller de "revenge rape" (venganza tras violación) con el que ganó el oscar a mejor guión- me gustó mucho. Segundo, comienza siendo una "peli de campus" (me acabo de inventar el concepto, viene de "novela de campus", género del que soy fan) y continúa encerrando a los personajes en una "country house" (mansión) inglesa que le da el título -otro escenario que me interesa, ideal para tensar y testear relaciones, psicologías. Tercero, porque desde fuera parece que uno de sus temas es ese viejuno, para algunos, "lucha de clases".
Esto no es parte de English Heritage: aquí vive peña |
Una vez más, la casa es la prota
"Saltburn" está filmada en una mansión que no había aparecido en nada antes -que ya es decir, conocemos a los ingleses- con una aspect ratio de 4:3 (la imagen es más cuadrada que en las películas habituales, algo así como Instagram). La casa, un personaje más como en las mejores narrativas de "casas", tiene 127 habitaciones y hay una escena en la que Félix, el chico guapo hijo de los dueños, se la va enseñando a Oliver, el chico pobre menos agraciado al que ha conocido (y adoptado como su animal de compañía este curso) en Oxford. En esta escena se ve lo que va a ser la cinematografía de la cinta (de Linus Sandgren, el de "La La Land"): tu cuñado diría un "festival para los ojos". Pero del que te das cuenta la mitad: hay que ver videos de Fennel con un rotulador explicando la escena, subrayando todos los detalles que tú te has perdido, todo al milímetro: cosas mundanas que todos tenemos sobre un secreter del SXVI, sombreros sobre los bustos (todo esto fueron ideas "robadas" de los actuales habitantes de la mansión, que ha pasado de familia en familia desde su construcción en 1300), o la camisa de lino de Félix, cómo juega con las luces para crear transparencias. La mansión es espectacular incluso para alguien que gusta más de los castillos góticos con torretas y que no ha visto nunca "Downton Abbey" como yo, aunque Fennel le ha querido dar a todo un toque gótico, no hay más que ver la fuente que ha usado con el título:
What's in a name?
Quiero hacer un párrafo sobre la elección de los nombres, que creo que no ha sido casual, para quienes lean de fuera de la isla. "Saltburn" es un pueblo a orillas del Mar del Norte, pero no tiene ninguna relación. Oliver es un nombre de clase alta en este país pero como siempre pasa por el tema aspiracional (como es en este caso) está siendo adoptado por clases más bajas, hasta que se degrade y ya los ricos no lo usen más. Félix no lo sé tan seguro, pero porque es inusual y porque viene del latín, sospecho que será un nombre de clase alta. A propósito, me he reído con "The Now Show" (BBC radio 4): Boris Johnson dijo en la Investigación del covid que se había olvidado de las contraseñas de su teléfono porque usó palabras extrañas - los humoristas añaden "como los nombres de sus hijos" (Wilfred Lawrie Nicholas, Theodore, Frank Alfred Odysseus por dar algún ejemplo).
"Porque yo lo valgo", otra vez
Tendría muchas cosas que comentar de la primera parte en la que están en Oxford, pero me voy a quedar con la escena en la que Oliver va a tutoría con el profe de literatura: llega puntual y se ha leído los 50 libros de la "lista de lectura" en el verano. El profe le ridiculiza ["cómo se le ocurre haberlo leído todo, si está hasta la Biblia del Rey James... ni siquiera yo me lo ha leído todo"] pero cuando aparece tarde uno de los pijos -que por supuesto no ha leído nada- se derrite patéticamente cuando le pregunta por su apellido y el chico le dice, como si no fuera nada que sí, que es su madre. Esta escena me recordó a la de Connell de "Normal People" (Sally Rooney) en el Trinity College de Dublín, esto escribí: "él, que estudia, que lee, que prepara sus clases, y los estudiantes de la clase media-alta que aparecen en clase sin haber preparado nada, pero con su auto-confianza secular no se preocupan por esto, o por parecer creídos o ignorantes. Las conversaciones son abstractas, carentes de detalle… “van a la universidad cada día a tener debates acalorados sobre libros que no han leído”.
Los cuernos creo que son un guinio a su papel en "The killing of a sacred deer": Alguien se acuerda de lo perturbador que Barry Keoghan resulta ahí? |
Dramatis personae
Cuando Félix invita a Oliver a pasar el verano a Saltburn para conocer a su familia, es imposible no pensar en la maravillosa "Retorno a Brideshead". Hay un montón de gente allí, incluyendo una hermana con desorden alimentario ("y ahora, dedos de postre", dice la madre), un padre estiradísimo (solo lo podía hacer Richard Grant), una madre interpretada por una genial Rosamund Pike, que sugiere que los años locos de juventud podría haber sido la musa de Jarvis Cocker para su "Common People", y tiene las líneas de guión más divertidas ("intenté ser lesbiana una época, pero es todo demasiado húmedo-los hombres son más secos" o, cuando se entera que una amiga -interpretada por Carey-me-encanta-Mulligan con peluca roja- se ha muerto "oh, haría cualquier cosa por llamar la atención"). Cuando Oliver llega a Saltburn y se enfrenta a esta panda, se siente obviamente intimidado. Y aquí es cuando yo tengo una historia de un Saltburn mío particular, pero que solo duró una noche, no un verano.
Debía ser el año 2000, yo estaba todavía haciendo mi residencia en Nottingham. En uno de los equipos por los que roté conocí a Alison, una señora mayor (arghhh, tendría entonces mi edad actual) muy elegante que solo trabajaba un día a la semana como psicoterapeuta porque tenía "this complicated life". Con esto se refería a lo que me contó alguien en algún pasillo: Alison era marquesa (o duquesa, nunca sé bien) y estaba casada con un príncipe italiano, tenían casa en Capri. Nos hicimos bastante amigas, tuvimos muchas conversaciones sobre ese desnortamiento vital en el que estaba yo a los 29 y cuando me tocó rotar, como despedida me llevó a comer a Hart's, en la época el mejor restaurante de Nottingham (del que solo recuerdo el vino). Otro día nos invitó a cenar a su casa y cuando nos dió las instrucciones para no perdernos escribió algo como que al final del camino os encontraréis con nuestro "embarrassingly huge drive" (nuestra entrada de coches tan enorme que da vergüenza).
Cuando llegamos, era exactamente así, en un punto de la carretera se acababa en un camino y al final, una Country House en medio del campo, como cuando Oliver llega a Saltburn. Era la mansión "donde iría la reina si visitara la zona", parece. Aquí ellos no vivían en todo el edificio y una de las alas estaba ocupada por un internado que "les pagaban los gastos de calefacción". Nos dió un paseo por la planta baja y recuerdo (no había móviles con cámaras, no tengo fotos) que de una estancia se pasaba a la otra (un poco rollo Versalles) y tenía ese aire dejado que ya había empezado a vislumbrar en la clase media-alta británica: sofás rebozados de pelo de gato o golden retriever, chimeneas con polvo, sillones en desesperada necesidad de un tapicero.
Al rato llegó otra pareja de más o menos nuestra edad, hijos de unos amigos, y que eran ambos graduados de Oxbridge: uno por lo menos era de filosofía y la otra de alguna otra disciplina "liberal" (arte? literatura?). No recuerdo nada específico de la conversación de la cena (aunque el Peda me ha dicho que me he equivocado, que era 2001 porque se habló de la guerra de Irak), solo una sensación: nunca me he sentido tan "sin dar el nivel". No es que yo sea Fran Lebowitz o Ellen Degeneres, pero en general me defiendo: sin embargo, esa noche se hablaba a otro nivel. Cuando salimos, le dije al Peda: "qué ha pasado aquí?", y contestó: "Ese nivel lo da el Old Money". Conduciendo por carreteras secundarias oscuras, hablando sin parar, llegamos nuestro piso ex-council en el peor barrio de la ciudad y a la conclusión de que tener tirando a buena educación y pasión por la cultura no te hace sentirte cómodo ni pertenecer ahí.
Viejos tropos, pero: cual es Tu Tema, Fennel?
Oliver se siente exactamente como nosotros, tal vez elevado a n, porque además ha de jugar el papel de "hijo de familia disfuncional", que es lo que ha fascinado a Félix y luego a los suyos (si adoptas un animalito, mejor que sea colorista). En Oxford, Oliver había terminado en el círculo de Félix de manera y por razones que no voy a contar porque son parte de la trama (y aburridas), pero desde el principio, se fascina totalmente con él. No es un amor homosexual -eso no habría sido complicado en absoluto. El concepto del chico de clase media o trabajadora que va a Oxbridge con beca y se da de bruces con el "Old Money" (gente con dinero de generaciones atrás) es más viejo que el cancán, y la fascinación por esta "clase alta" por parte de cierta parte del pueblo también - pero esto tampoco habría sido complicado.
This is the life |
Nota: Hay alguna gente que además de negar la existencia de las clases -eso es algo marxista y sepia- sostienen que esto que vive Oliver solo lo han visto en las pelis o los libros. Yo, sin embargo, lo he vivido de primera mano, a lo cutre eso sí: un pequeño grupo de "hijos de" en mi facultad que funcionaban como la "élite" del curso, o vicariamente, porque tengo un colega que fue a Cambridge y me ha contado en detalle lo desplazado que se sintió. También he conocido a chicos teniendo "crushes" con "Teresas" por su confianza, su estilo, su glamour [este fenómeno lo he observado menos en chicas; a mí en concreto este tipo de personas no me han atraído jamás, más bien al contrario].
Pero eso es lo que crees gran parte de la peli, que Oliver es uno más de esos flasheados ("una polilla que va a la luz", que le dicen) por el poder y el privilegio, desde el wow, desde la admiración. Y a los ricos estos del Old Money no se les presenta como malos malísimos -eso también habría sido simplista- sino como gente carente de toda empatía porque no tienen ni idea de lo que es la vida real (piénsalo: tal vez tú en su lugar habrías sido así). Pero luego ya te vas dando cuenta que tal vez las cosas no sean lo que parece y queriendo darle un giro de guión, el final no me ha funcionado - mucho menos, cuando "lo explican", eso es muy cutre.
Los shocks
No he hecho ningún spoiler de la trama hasta ahora, y lo que voy a contar en el siguiente párrafo tampoco lo es, pero si alguien la va a ver y quiere experimentar el shock ahí, en vivo y en directo, aconsejo que se lo salte. Críticos de la peli dicen que está escrita para que "como un reloj" nos dé un susto cada veinte minutos. Igual que la imagen cuadrada que he descrito antes -que Fennel asegura es porque "los techos eran preciosos y quería trasmitir una aproximación voyeurística"- es para facilitar la distribución de trocitos en redes sociales como Instagram y Tik Tok, estas escenas de alto contenido emocional-impacto también cumplen este objetivo: que se puedan difundir y así funcionar de cebo. De hecho, la propia Mini está desesperada por ver la peli [que en UK tiene una clasificación de 15] por lo que ha visto en Tik Tok. No se la hemos dejado ver precisamente por los"shocks", pero me imagino que los habrá visto todos en Tik Tok. Ahí van.
Al principio, en Oxford, hay una imagen de un vómito sobre un espejo que se extiende más de lo normal. Yo cierro los ojos. Ya en Saltburn, Oliver practica sexo oral a la hermana de Félix y -al buen entendedor- comenta "qué bien, entonces, que soy un vampiro" [nota: yo si fuera tío hetero me fijaría en la mirada de las mujeres directoras sobre el sexo -cómo olvidar aquella gran escena en "Red Road" de Andrea Arnold]. Veinte minutos más tarde, la que me dejó a mí disturbada (existe? me gusta más que perturbada): cuando se está vaciando la bañera de Félix -su baño ha tenido final feliz-, Oliver lame lo que queda del agua que se está yendo por el desague, y luego lo rodea con su lengua, y está todo hecho con tal avaricia y glotonería que... bueno, hace que la siguiente escena, veinte minutos después, en la que Oliver folla con una tumba, quede en nada.
¿Por qué poner pegas a "Saltburn"?
...se preguntará quien lea, si parece que lo pasaste tan bien? Y lo hice, pero es un placer culpable. Porque la política de la peli es... no sabe a dónde va. Fennel dice que ha hecho un "thriller erótico con tema de clase social". Pero, ¿qué ha querido decir de la clase socia? ¿Es nostalgia de una aristocracia británica en decadencia como en "Retorno a Brideshead"? ¿Es el odio de clase está vivo así que cuidad a quien abrís vuestras puertas? Desde dónde escribe la directora?
Fennell ambientó la peli en 2006 en Oxford. Adivinen quién estaba en 2006 en Oxford estudiando literatura- no que la culpe, tod@s escribimos desde nuestra biografía, más o menos obvia, vivida o vicariamente. Fennel es hija de Theo Fennel, un joyero famoso de esta isla -por lo visto, qué sabré yo de joyeros- que sirve a Lady Gaga y Madonna (pero hace poco ha cambiado la localización de su chiringuito por los abusivos alquileres en Fulham Road: los ricos también tienen sus estreses, no crean). Emeral Fennel es brillante en las entrevistas y no puedo evitar que me caiga bien -aunque solo sea por esa primera peli- pero detecto cierto cacao mental y lo que podría haber sido una reflexión sobre el privilegio y su inherente injusticia [y de cómo hay que tomar esos Downtown Abbeys, o Castillos de Invierno, YA, sin piedad, pero de otra manera) ha terminando siendo el talentoso Mr Ripley. Libro que, por cierto, no he leído y va a ser mi próximo.
Que si la recomiendo? Es ideal para salir bailando la conga con toda tu familia con este "Murder on the dance floor" tan de la época... Yo lo sigo bailando por toda mis casa una semana después.
Corro a verla, por supuesto.
ResponderEliminarAyyy sí, porfa!!! Ganas de comentarla con alguien. Además, sé que no me echarás la bronca por el guión porque todo se le perdona por el "house porn"...
EliminarClaro, un poco de "houseporn" es irresistible!
EliminarLOL, te conozco desorejada... se lo tengo q pasar tb a Annapetons...
EliminarEiiiiiii por alusiones!!! de esta semana no pasa que me la ponga. Ya sólo con Oxford y la casa me ha conquistado. El caso es que la vi en novedades y pensé, la veré, y luego se me fue el santo al cielo.
ResponderEliminar...Oxford... (suspiro)
Me tengo que poner al día con el blog que entre lo vida que pasa y lo demás he visto que tengo un montón de entradas pendientes.
Petons,
Anna
Me encantàis las divagantas anglòfilas que tenemos...
ResponderEliminarHace mucho q no he ido a oxford, con eaa cosa de no salir de la city q tenemos lps q vivimos aquì (cuesta tanto salir y entrar...) , pero igual un dìa podìa irme de xay out y contaros...
Y te iba a echar la bronca por.dejadez divagante pero tod@s deberìamos tener un descanso de mì, yo incluida.
Petòns darling
Di
Entiendo perfectamente tu sensación de no estar a la altura en esa visita a la mansión de tu compañera de residencia, porque es exaaaactamente la misma sensación que tengo yo en tu blog y mira que me he metido en algunos de lo más densos y complejos pero es que haces tantísimas referencias, enlaces y alusiones que me es imposible así que sírveme sólo una naranja o no.. mejor no que hay que pelarla con cuchillo y tenedor y es un engorro, mejor unas uvas y me vale ; ) tiene muy buen pinta la peli, sí que he visto Downton Abbey y "Retorno a Brideshead" ambas estupendas, aunque nada que ver una con la otra, a parte de la grandiosidad de algunos escenarios, en fin Sra marquesa, un placer visitarla en su country house blogueril … Tendré que comprarme una bici virtual para poder pasearme por todas tus habitaciones.. a pie es imposible : ) Abrazo fuerte y feliz 2024 no sé si ya te he felicitado, a veces me veo felicitándolo en Marzo : )
ResponderEliminarJajaja, no, es q llevo tanto anios escribiendo el blog -y como siempre se escribe sobre los mismos temas- tengo ya referencias e historias para todo. Vamos, un caso claro de abuelacebolletismo de blog :) En todo caso, te agradezco mucho q lo intentes y sigas... y me ha encantado la metáfora de la bici virtual para recorrer el blog: no sé si lo sabes pero has juntado mis dos cosas favoritas!!!...:):)
EliminarY la peli no la recomiendo sin sus peros, q tiene muchos. Como digo, para mí tiene problemas de contenido pero visualmente se deja ver. Yo no vi Downtown ni Brideshead... solo leí el libro de esto último... no soy muy de series, igual cuando me jubile.
Y Feliz 2024 para ti también! Por un anio con mucha escritura, lectura, sonrisas y pedaleo! muá
di