18 enero 2017

Teatro, lo tuyo es puro teatro

Hola, me llamo Di y siempre quise hacer teatro.

Pero por lo que sea, nunca llegó Mi Momento. Aparte de en el cole (donde, por ser alta, siempre me daban papeles de malo- véase Capitán Garfio), mi única experiencia fue en la universidad: pasé fugazmente por una clase donde nos tuvieron todo el rato jugando al baloncesto sin balón. Fugazmente: no aparecí más. 

Ya en el UK, hace un montón de años, cuando aún estaba de aprendiza de bruja, hice un curso de una semana de "Presentation skills" (aprender a dar conferencias y clases sin que el personal se duerma). En aquel curso nos grabaron haciendo una presentación el primer día, y de nuevo al final. Fue impresionante: el primero éramos todos unos ratoncitos mojados, el último nos íbamos a comer el mundo. La profe era actriz, recuerdo que nos hacía decir un mantra -según ella, del Método Stanislavski- antes de salir al escenario que era algo así como:

"Todo el poder está en mis piernas
Toda la fuerza está en mi pecho
toda la sabiduría está en mi cabeza"

Después de aquel hice otro en un college cerca de casa y acabé a palos con el profesor. Hizo unos cuantos comentarios machistas y le paré los pies. Tras cuatro clases, dejé de ir. 

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Ana es una colega sin hijos de esas que vive Londinium a tope: siempre nos está mandando a un grupo de simpatizantes posibles actividades como proyecciones de pelis de culto en sitios mágicos con charla posterior, exposición interactiva con preguntas y respuestas al final, ese rollo. Antes de Navidad, Ana se destapa con "un curso de teatro, método Stanislavski, que lleva un amigo argentino". Ana ya ha participado por supuesto en previos seminarios, y tenemos que ir, está genial. Ana es una de esas personas que ama la vida y para la que todo es maravilloso-menos la injusticia, la maldad y la falta de amor. Ana es una encantadora hippie moderna. 

El otro colega y yo ponderamos muy seriamente el esfuerzo sobrehumano que supone, en estos meses de invierno y oscuridad extrema,  salir de casa en las evenings (que no son tales, son noche de lobo), en pleno miércoles, durante la friolera de diez semanas, a pasarnos un rato entre desconocidos haciendo no sabemos bien qué (yo ya solo espero que no envuelva deporte sin balón). Finalmente decido que no es la época, que estoy muy hasta arriba, que me dará pereza, y que cómo llegaré hasta allí. Total que me apunto. 

El "cómo llegaré hasta allí" parecerá baladí, pero en Londinium, los sitios que no tienen cerca una boca de metro, o, peor pero vaya, en su defecto tren, son a No-Go-Zone. Este es precisamente el caso del Chelsea Theatre, que, para más coña, está en un sitio llamado "World's End" (Final del Mundo): en serio. Hago mil cábalas de cómo voy a lograr estar allí a las 6 pm, teniendo en cuenta además que he de pasar a recoger a Mini antes y dejarla en casa con el Peda. Por fin descubro un autobus, al que tal vez le cueste horas, pero me voy armada de "2666" de Bolaño, y malo será que me lo acabe antes de llegar. 

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El Chelsea Theatre parece más bien un centro juvenil, de esos para mantener a los buperos fuera de líos. Será "teatro" pero el pasado miércoles no pasamos a ninguna sala con escenario. Se trata de un cuarto grandecito con barras de ballet a su alrededor y suelo de madera. Poco a poco vamos llegando, y nos juntamos un grupo de once: 6 chicos y 5 chicas, además de Germán, el profe. 

Todo es como os lo estáis imaginando: estamos descalzos, sentados en círculo, con ropa "cómoda" y sin relojes ni pulseras, contando quienes somos y qué tornillo nos falta para estar precisamente allí sentados, con las obligaciones (divagantes) que tenemos afuera. Algunos de ellos ya han hecho otros cursos del profe, como Ana. Unos cuantos venimos por la animadora sociocultural, Ana. "Soy fatal en teatro, pero aquí estoy", dice Ana. Yo cuento mi anécdota del baloncesto, y mi huída hacia adelante, intentando dejar las cosas claras desde el principio. Uno se describe como "actor", y desde luego durante la tarde es evidente que tiene algo ("duende"?). A otro que ha hecho previos cursos da gusto escucharle por cómo proyecta la voz. 


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El Método Stanislavski es el conjunto de técnicas desarrolladas por este director de teatro ruso, que se basa en que el actor, además de el típico entrenamiento físico y vocal, debe aprender a tener la misma experiencia que el papel que representan. Esto implica que el actor tenga los mismos sentimientos que el personaje.

Así que comienza la sesión: primero caminando por la sala dejando espacio los unos a los otros, luego interactuando, dando la mano y diciendo nuestro nombre, más tarde dando la mano y diciendo el nombre de la otra persona. A los pocos minutos, ya nos conocemos todos: yo por lo menos no me había aprendido en tan poco rato el nombre de 11 personas.

La sesión sigue con un montón de ejercicios físicos. Yo pensaba que era una hora y nos pasamos allí... dos horas y media! Me río mucho, a lo que Germán nos anima, pero no se puede hablar. Hay mucho contacto corporal: el siguiente ejercicio consiste  em apoyarse lateralmente en otra persona y andar por la habitación. Otro en tocar una parte del cuerpo a tu pareja, y él se empieza a mover por esa parte, y luego otra, y hasta tres, y seguir el movimiento. 

[Paréntesis: En el último ejercicio, el profe propone: "ahora todos paran y observan a Di y a Fulanito". Y de alguna parte de mí, incontrolable sale un "NO!". Pero solo dura dos segundos y ya veo que luego dice de observar a otros y me doy cuenta que he hecho directamente el ridículo, ya que no éramos Fulanito y yo en el centro 10 minutos con esa música como de mujer africana gritando de fondo, sino que era grupal]

Nos apoyamos en la pared intentando encontrar posturas cómodas... es increíble cuántas logro, o es el cansancio. Luego hay que hacer eso mismo con un companiero, espalda con espalda, presionando, e ir bajando hacia el suelo. A mí me toca uno muy alto y tengo su culo en mis lumbares, así que el ejercicio debe resultar hilarante para cualquier observador, pero Germán no se descojona en nuestra cara, que sería lo suyo. 

Otro ejercicio consiste en que una persona está en el suelo y el grupo a su alrededor. El del suelo ha de intentar levantarse y el grupo ha de pararle. Tras repetidos intentos, han de ayudar a levantarse. Esa experiencia es muy chula, porque te parece que vas a volar. 

Y hablando de volar, el último ejercicio es exactamente eso: una persona está echada y el resto a su alrededor, pone las manos debajo, y lo elevan, casi hasta el techo. Caminan por la sala, y a ratos, adornándose, hacen olas. No sé si es que me toca una mala posición, pero me parece cansadísimo. Y venga, otra persona. En un punto les digo que pesan mucho, y que yo no puedo más. En serio, ya temía serias agujetas al día siguiente (Mi colega, a la salida, dice que he sido "unruly"). Me voy al banio, bebo agua. Al volver: "Di, te toca volar". Venga, de perdidos al río, lo que no haré es levantar a más aprendices de actores.... Pero ahora es mi turno y... mmm... Cuando te echas en el suelo y vienen todos sobre ti, parece una escena de una pesadilla tipo peli de David Lynch. Solo falta la mujer del leño. Pero cuando subes, es verdaderamente chulo, flotas!!! Luego ya que hagan olas y lo que quieran... y cuando te bajan, no tienes ni idea de cuándo llegarás al suelo. Cuando por fin abres los ojos, para mí es un poco como volver de una anestesia general, todos alrededor mirando a ver si estás bien.

Terminamos en un círculo compartiendo "cómo nos hemos sentido". Alguien tan controlador como yo, está en el círculo preguntándose cómo cada una de las técnicas se relacionaba con el "Método". Se trata de sentirnos conscientes de nuestro cuerpo y el de otros? De colaborar? De dejarte ir? De confiar en otros? 


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Son casi las 9 de la noche y Londinium, la ciudad que nunca duerme, parece en "Worlds End" una ciudad sumida en una masiva anestesia general.




10 comentarios:

  1. Vamos, que has ido a hacer pilates con ínfulas.

    Todo bien. Ardo en deseos de la segunda sesión, cuando tengas que tener la experiencia de una fresa y luego exponerlo.

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  2. Te animo a que sigas. Es divertido y suelta mucho el conjunto anímico-muscular.

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  3. Admiro tu arrojo y naturalidad, Di, al apuntarte a esas desenfadadas clases de… teatro. Porque son de teatro, ¿verdad?

    Es que, no sé, mucho toqueteo veo yo, ¡y todos descalzos!, que si privación de la libertad de movimiento de persona indefensa y abatida contra el suelo, que si raptos aéreos… Llámame exagerado, pero creo que estás jugando con fuego. ¿Estás segura de que no es una secta sudcoreana o algo así? Acuérdate de Travolta y Cruise… Sí, actores, pero… ¡a qué precio!).

    Sea una secta o no, yo no sería capaz de tanto desparpajo, mi mucha timidez la mal resolví desde bien pequeñito infundiendo respeto al prójimo, imponiéndole la formalidad. ¡Pero si en el patio del colegio cuando metía un gol mis compañeros me felicitaban poniéndose en fila por riguroso orden de estatura y estrechándome la mano con seco taconazo y marcial Señor!

    Ahora en serio, se ve que lo has disfrutado por lo mucho que haces disfrutar al leerte (lo de la vuelta de la anestesia es especialmente gráfico).

    Tiene que haber más entregas. ¡Promételo!

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  4. ¡Tienes que contárnoslo todo! ¡Tú una actriz del método! ¡Como Brando, Newman y Dean! Robert Mitchum no: el decía que era del método Smirnoff. Ni Sharon Stone. Una vez le preguntaron por qué se había largado del Actors Studio. Respondió que no entendía el método Stanislavski: "No entendía cómo interiorizar durante más de dos horas que era una loncha de bacon frito iba a mejorar mis dotes interpretativas" ¡Ahora contaremos con información de primera!

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  5. Muy útil el teatro para usarlo en la vida real.
    Un par de ejemplos ilustrativos nos servirán al efecto.
    ...
    Viene un inspector de Hacienda a casa y te pide tus declaraciones de los últimos diez años.
    Te pones en modo actriz de teatro clásico, ataviada con túnica griega.
    Y desembuchas.
    Tal vez mi Señor opináis que es mi deber guardar legajos y papeles diversos. Más lo cierto es que mi oficio consiste en mantener vivos a los vivos, reconfortar a los enfermos y atenuar el dolor de la población humana.
    Quién sabe si el devenir de los tiempos pondrá a su madre o su hija en mis manos ?
    Debería entonces declinar mis obligaciones profesionales e ir a mi hogar para ordenar los impresos solicitados ?
    Usted qué haría, Señor ?
    Dudaría ? ( voz potente ).
    Tal vez dejaría en las puertas de la muerte a una dulce abuelita ? ( el final de la frase, suave, suave ).
    O tal vez... (Ritmo in creschendo, acompañado de un espectacular movimiento de los miembros superiores, a la vez que un suave paseo con los miembros inferiores), o tal vez haríais aquello que vuestra conciencia os dicta, vuestro honor os demanda y vuestro ímpetu os impele ?
    Señor, responda vuesa merced al reto planteado, y haga mīa su propia respuesta.
    ...
    Silencio prolongado y aplausos del público.
    ...
    No sigo con más ejemplos, pues se me ocurren tantos y tan divertidos, que será mejor que vuestra propia imaginación los determine.
    ...
    No lo dejes.
    Tu vida va a mejorar.

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  6. Discrepo Moli. Pilates con ínfulas? El pilates es muy yo, mi, me, conmigo. Y el teatro es más p`afuera telarañas, me meto en la piel de otro y otros que me me miran van y se lo creen. No se..., yo veo estas sesiones como un puro juego. Y creo que somos de los qeu queremos lo mejor para nuestras hijas y les damos juego a todas horas, porque es genial. Me das una envidia! Yo soy de la secta esa norcoreana, mucho andar descalza, venga a toquetear al vecino. Así que aprovecha y juega un rato, que ya te lo mereces.
    En un congreso al que fui allá por el neolítico, en Murcia, salimos hordas de educadores con ganas de resarcirnos de tanta charla y tanto rollo. Llegamos a una plaza y empezamos a poner en práctica algunos de los juegos que usamos con la chavalería en nuestros trabajos. La gente que pasaba por allí(una noche genial de junio, calorcito, cervecitas...)se fue uniendo a los juegos y aquello terminó siendo la pera, gente que no se conocía de nada jugando a cosas como las que cuentas Di. Pero porqué no jugamos más, y damos menos por saco?
    Un placer que estés por aquí Lux, con la salud maltrecha pero la pluma afilada, pardiez. Un beso norcoreano con achuchón incluido.

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    1. Muchas gracias, querida Marisa.

      Mencionas lo del congreso murciano y Di de su curso para hablar en público con soltura y me acuerdo con espanto de la primera vez que me tocó a mí dirigirme a una concurrida reunión.

      Mi mentor en aquello, para que venciese mis reparos, me aconsejo que imaginase a todo el auditorio, al concurso de oyentes, desnudos y haciendo caca… Y, acto seguido, se fumó un puro.

      Pero el tipo no imaginó, valga la redundancia, mi desbordante imaginación y, claro, pasó lo que tenía que pasar.

      Tras que me presentaran me serví con parsimonia un sorbo de agua, estiré el meñique cuanto pude y me llevé el vaso a los labios mientras alzaba la vista ¡para ver a más de doscientas personas en tal sincronización fisiológica que me engollipé!

      ¡Cómo era posible que tanta gente se viese urgida a hacer de vientre al unísono y en un lugar tan poco escusado! ¡Cómo hablar de «Concomitancias entre la Rosalía de Castro de Follas novas y el primer Javier Marías en tanti contri hijo de Julián» (título de la conferencia) en tales circunstancias!

      Engollipado, pasmado… y con remordimientos, pues me sentí como el gurú de una secta que en lugar de mandar al suicidio a sus fieles al medio de una selva de América del Sur les hubiese enviado a cagar en pleno paraninfo pelín rococó.

      El colmo fue cuando miré al techo para evitar la dandesta escena y entre la rocalla de escayola de abigarrados colores me vi reflejado en una esfera azogada que pinjaba del techo. Y sí, yo también: yo también hacía caca.

      Fatal.

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  7. Hola babies... un días tras la segunda sesión! Yo no pensaba q os fuera a interesar esta movida! Si es así, el finde hago otro divague... veréis, como dice Fashion "qué tortazo tenéis los del grupo Stanislvski".

    MO... leí por ahi q Sharon Stone se negó a aprender El Método, precisamente cuando le hicieron hacer de trozo de mortadela.. mira cómo acabó...

    Nan, me gustaría q estuvieras en mi grupo... nos íbamos a reir. te veo el priemr día diciendo "Soy nan y vengo por mi espalda"

    LUX, lo de descalzos es todo un tema... cómo une saber los calcetos q lleva el personal.. por ej, mi colega q va de dandy... le clareaban! O sea, me llevas panuelo en la solapa y te clarean zonas de los calcetos: CHATO, te estás delatando.

    DRIVER, si yo lo q quiero es declamar desde el priemr día! Si yo quiero ser Medea, Lisístrata, Lady MacBeth, Yerma! pero aquí no se habla (de momento). SOlo se gruñe y gime (esto os lo cuento el finde)...

    MARISA! Qué gran historia murciana... me encanta lo de "por qué no jugamso más y damos menos pol saco".. me lo voy a oner de status de tuiter o guasap o algo. Yo hice yoga (q tb deje a mitad, pq me aburría) y es tb más tipo tú y tú... esto es lo q dices tú... experimentar, pero gran paliza física...

    LUX... eso de verles desnudos ya lo había probado (en la escatología no entro, me lo prohíbe mi religión). Os he contado cuando me desmayé delante de 400 personas? Creo q no... igual un día... (sección "tengo un pasado oscuro")

    LOVE

    di

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  8. Solo vengo a decir que me he descojonado con tu indignacion con el clareo de calcetos y lo de "Chato"... pareces de las vistillas. Chata.

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  9. Genial Lux. Estoy riendome yo sola conmigo misma de tus desdichas escatologicas. Me acabas de alegrar el dia.
    Yo ahora hablo en publico con cierta soltura, pero la primera vez q estuve de moderadora en una mesa redonda me acelere tanto q el reloj q tenia que era de cuerda (te acordaras Lux, esos relojes a los dabas vuelticas a una rosca, el resto no se si sabeis q es esto dada vuestra incipiente madurez) adelantó dos horas durante la sesión. Dije alguna tontería, ckaro, pero se ha borrafo todo de mi cabeza excepto lo del reloj.

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